En la zozobra la noche dormida me encuentro, lapsos como tic tac el cronógrafo del cerrajero universal. Fuegos que faroles iluminan mi frente que deposité en objetos perdidos la comisaría mi localidad entre semáforos y ruegos entré al parque Buero Vallejo para que alguna idea me iluminara, caricias eran abrojos derramaba un atrapasueños, sin miedo, al esperpento, una sombra me acariciaba se enredaba en los vellos de mi pecho. Escucha el plañir de mi tentación, llora por todas ilusiones marcharon en y sin valde. Era el susurro y reminiscencia del guerrero toda su tierra lamía, resurgido entre el polvo su memoria, Mientras una dama hilvanaba hilos de seda ...