I
Noche, noche a ti te escribo
tú que siempre fuiste
y siempre serás reflejo mi latido
espejo hondo de paz y sosiego
dragón dominante mi deseo
sempiterno, eje y punto cardinal
de mi sentido despierto
ojos de otros ojos miran
pero no ven,
siento con mis manos
y alma expuesta lo que no puedo ver,
que mano secreta, sí es mi doncella
prismas atónitos tu poder
que suena, acicala y acaricia,
yerta la espera, queda dibujarte
lo profano, indecible.
II
Sólo palpable,
detrás del ascua,
dentro del cantil
y mi dulce lujuria.
Una reminiscencia del amor
de príncipe a su dama hoguera
y agua manantial brota
puridad de escala,
oh, mirada, surca lo que ocultan
mis sentidos despiertos.
Noche, noche por qué
no me das a mi sueño,
que yo tanto ansío,
ya quiero conmigo
a mi luciérnaga princesa.
III
Paso noches en vela
de navegante sin mar
sus ojos mi astrolabio,
su beldad mi cartabón
mar sin inicio ni final,
sólo volver a despertar
desnudo en la penumbra
viendo su sueño pasearse
por mi campo de batalla
noche, que me llamas una vez
me llamas una vez más
para sentir que contigo,
estoy de raíz, ancla,
y sanguinoso amor.
Förüq El Inocente
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
Lugar La Campiña Castilla España
Tu grillo: febrero 12, 2021 Clareando su lividez por sotos vastos, reales, mi río navega. Entonado su bandoneón, dirige, blande mi grillo el afilar de su tercera cuerda. Entre el suelo de un ciprés enhiesto, rigen blandamente espigas rojas, jóvenes, juguetonas como si tuviesen sangre para sonreír al viento que pasa y no atraviesa. Reposa que aguarda el cráneo la tierra. Ay la tierra, hay de ella, sombras que complacen y acerban la mansa espera. Soliviar vetusto que Ninfas y Sátiros pastorean. II Es un tejado llorando por la piedra, con acequia desnuda de canalón; un cimiento que plañe la helada, y le agrieta el tiempo que ya no escapa. Sauce triste, abatido, con portón al mundo del grillo. Entre blanda grama fenece que acicala su alma. Entre un arpa estacional, y panales de ambrosía. A la lluvia primera abre su fiel Parnaso devorado entre caracoles sonoros. Grita la raíz acrisolada en ámbar de intelecto mayor. Cúspide de serena esfinge, y dolmen de divina pluma. III El grillo úni...
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