SIMIENTE DE VIENTO
AUTOR MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
LUGAR:
LA CAMPIÑA, MIRADOR DEL HENARES
CONTENIDO
TOMO I
SIMIENTE DE VIENTO
TOMO II
ENTRE CORONA Y CANDELABRO
Lectura:
ÁVIDO DESIGNIO:
I HOJA
Roja puerta, al campo de negros lirios
por el camino de ida sin regreso,
vida oh, vida,
de un lamento que aún breve
no arrebata en memoria
escudriñar la muralla de soledad
quise, no hubo pesquisa más fiera
un mundo de abrojos por
conquistar, se erguían intenciones
áureas y de poder vano,
abarcaba el río los negros lirios
de flores desangradas
destino aquietaba su idea;
divisé una luz entre las montañas
como cerros me hablaban,
entre venas razones,
sinfonía de caracoles por astros
y energía súbita demencial,
entre caballos marrones
cabalgué mi felicidad jamás lisiada.
II HOJA
El andar hizo surco
y no agoté su camino,
vals de paticas de abeja
entre coronas vegetales
templo y morada de madre contemplación
cerros y valles, ríos y riberas,
lares y moradas,
es el justo lugar, reverberan
sueños e ilusiones,
madres e hijas, padres e hijos,
todo de los sueños de premisas
alcanzan, puedes atisbar la llama
florece tu palpitar,
te amaré de aquí, al eje te dé flor,
flor de dicha, flor encorajinada,
de aquí a siempre seré tu centauro
protector, querencia, curso y destello,
mentiré siendo sincero,
te contaré mis sueños jamás perecieron,
como amparo tu voluntad,
sobre el mar e inevitable
me alce, tú mujer posees luna.
III HOJA
Tu mundo me acompasa, vívido desliz,
amarte de raíz es verdad, hecho
te brindo el secreto, de mi corazón
invernado bajo tierra,
mi sol ardiente y desmesurado,
ahora sabré por qué eres perla en agua,
graznidos por encima los ojos
imposibles sentidos,
verte y sentirte,
a lo lejos, sin ruido
el nácar tuyo, durmiera o respirara,
suelo de mi beso, o labio lluvioso,
color tuyo, que boga silencio,
rizo que plañes el viento.
Oh, tu sonrisa valiente no teme la muerte,
suave tu memoria,
entre estrépitos y ruido de mi barro
contagioso, blanco y señero,
tu pálpito, en somera existencia;
gallardía, que rige severa,
el mundo que calla,
lucharon tus deseos, y los míos se acomodaron.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente a 09-12-2024
PRIMER ENJAMBRE
A mi lira quieren ver trabajando.
Más sonora que agua de manantío, cuánto azarosa es, más segura que el trueno que cae bajando y su zumbo de centella de horrida melodía.
Melodía de guerrero con inverosímiles acciones mi cristalina armonía asestada en hermético castillo donde mi álgida castellana descansaba en una almena abrazada a las noches rizaba sus cabellos como encantos peregrinos.
Mi manantial era música, auras azul y majo su espejo.
Tristes los tordos ya no bailaban buscando lombrices el Cierzo sujetaba hasta los huesos un otoño pasado de número.
De nota más tersa que simbólica entonaba el guerrero comunero de dicha ensoñada virtud que borbotea su deseo.
Castellana como Venus de labios coralinos, rumores que alejan, que afean el vicio.
Música de cielo sin sus colores.
Dos ojos de mis ojos, carruseles de tus pestañas.
Juiciosos versos, te envío, ahínco fiel su sonido que se grajea tu sonrisa, oh, compostura olvidada...
Un fuego en tu mirada, complicidad sin espoleta.
Vals de obrero, furia de titán, eje rupestre de fiel campesino, cante de hinojo y cardo borriquero.
Viene, viene mi colorín alegre.
Tonada de caballero que avanza mis ojos que sin tus ojos no son ni serán míos.
Entre festín de Dante y orilla del río la Estrida tiniebla canto como canta el sendero a tu casa, mi casa, Estrida tiniebla.
Ojos de hormigueros legendarios.
Mis brazos sin tu espalda ya son matojos espinosos y en la despensa de mi ginebra no encuentro tu labial de sabor a fresa.
Olvida la imagen su huella y el seudónimo su nombre, que todos ellos persiguen el viento.
Dulce estrella intratable de trino
que acento valedero, y dulce campanario
decida la siembra
que creación festeja;
de insolente Mercurio crispado
A el reflejo tu aura sonrojada,
recojo letras como besos huidizos
de vista cálida y tan pura
ronco mi gemido, fiel desventura
la música traicionera
composta de partitura.
Förüq Esteban castellano
NOTA PASIONARIA
I
Cuando mi problema se sitúa
coge mando, de risco audaz
escucha los sones hendiendo lágrimas
sobre las coronas, oh inhumano
saber, sobre la llama, todo
puedes ver comenzando,
latido osado, profundo, confiado
expuesta índole, temblor de rocas
espuma arrojadiza, intrépida
todo camina, avanza, de forma
azarosa que bestial,
arbitrario no es mi querer
dime tus latidos, acompasaré
arriscado, bárbaro, sin piedad
ardido, irracional,
imprudente voy confiado
a tu río y todo dicta
nec vincere tenebras, et amat
sanguinario mi querer
tornó expuesto que heroico.
II
Arriesgo toda mi suerte
a cumplir todos tus pecados
ignoro de incierto saber
cómo surtirá el resultado
a finales quedaré invicto
que indemne acontecido
de que hago algo es para
hacerlo bien, satisfactorio
correcto, álzate en la cumbre
es un día anublado que gira
nuestro cielo superpuesto
tres colores, azul, escarlata,
que rojizo, altas miras
blanden premisas
del fuego terso
cielo venturoso de mi arma
que irreflexivo, me desciende
asesta infierno terreno
sí, yo vivo con mis hermanos.
III
Tosca mi prestancia,
a los jardines áureos
avanzo, es una rosaleda
tan nítidas sus rosas
que color hace enjambre
alegría del Portón Verdadero
clímax sobre tus páginas,
preso por cada año y
su cuarto de sótano de luz
si aquí solo estoy de paso
no hay sentido a transcribir
huella de arena ni, de polvo
eterno, besos de pétalos
y sí, inculto mece mi amor,
oh mi cruello, mi colmillo
feroz, insaciable, aventurado,
voy y vengo salvaje
de lágrima temeraria
voy henchido que acompasado.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
LUMBRE LÍQUIDA
¡Oh, manantio de espejos!
fuente rebrotada,
es palabra,
candor de exactitud,
o brea encendida,
mi pupila, llama que brota,
iridiscencia en acto
puñal álgido,
cavo abismos en azadilla,
en cumbre de Éfeso,
en bosque de Cumas,
con quietud prolífera descubro,
valles y señales,
oculta la tiniebla,
oh mano de fruto,
diamante blando es espera,
ruina de la palabra,
ciencia apócrifa,
conjuradora,
como noche latiente,
y denso párpado,
su azabache,
lo que callo
sólo es ceniza,
lo que vivo
es savia, sangre,
o las dos,
ojo de tierra
me viese apuesto,
le clavaría semilla
al crisol, la recta forma,
carbón, celda de luz,
temblor de infinita melodía,
vapor de mares,
sol sin los días
reflejo durmiente,
no olvidé quién ser.
quiero y valido su querencia,
contento, oh su acento,
de verbo alegre juega,
galantía clemente,
su sola aspa,
vente flor de virtud,
desde premisa
que aprietas y conjuras.
canción de espada,
blasón de tu sonido,
casta sin flor en la mejilla,
va mi prestancia a tu cáliz,
lirios de los valles
riegan Orféo y Eurídice,
mis huesos ya no laten de tristezas,
ojos de otros ojos
dicen cavé mi vide en balde,
en un baldío,
donde anhelaba fortuna,
y logré traiciones,
encierros y besos de sangre,
oh río de mis almas desangradas,
no fue osadía pedir pan
en aquel lugar,
brotaron malvas y abrojos pares,
retiros de razón heridora,
memoria de cuánto,
vivo por besarle un Ocaso.
Quedándome al cobijo
su terneza de luz obscura.
Esencial premura cuánto la amo.
Förüq Esteban er-lobo bohemio
SUBREPTICIA
Sostén mi pasado una vez
coge mi mano para siempre
te daré las llaves del cielo
para liberar tu alma,
oh mundo en libreta,
acuesta briza, y repunta,
mi pasado, nací para vivir
mi pasado oscuro
coge mi mano, volemos amada
este mundo usado,
dejaremos atrás,
noche me habla
de nocturnino querer
subrepticia vuelves,
que me apoderas;
para ti, justo mi hambre de caza
comienza ahora,
oh de lunático saber preso,
te mostraré la eternidad del beso,
hallarás como morder,
y oscura rienda nos embeberá
nueva era recuerda
allá tu sinestesia,
tus dotes hipnóticos te servirán,
escaparé de un plano triste,
he logrado tocar el cielo,
mi luz refulge de nuevo,
mañana sin ti nunca llegará
he cambiado mi credencial
estoy buscando vivir mi pasado,
música ya no suena,
ejes de conciencia me bailan
peores sentidos
que yo, no hay,
amé un sin vivir
de soga, placer y tijera negra,
morada, templo y cripta,
estoy llamando a Subrepticia
mi hermosa,
sí vuelve
aún crecida tras alimentarte
d' estos cielos de plomo y zinc,
alba más preciosa
ensoñada no te meció
te dijo vuelve cuando quieras
nunca voy a intentar capturarte;
perfección, ser evolución,
y tu inicial reclamo insecto
oh alma maldita en larva
que te di de beber de mi índice
al poder mi sangre empero,
como es arriba es abajo
vigía
que espero ascenso
a divino encuentro
Centauro castellano
mi sangre es luz
elemento evolutivo
justo el código
de la elegía de la vida.
El Inocente
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
HERIDA DE GÉMINI
I
A la herida de la creación
magnitud me cursa de cepa
eje, raíz y curso, dolor heroico
excelso, cicatriz en dolor de vida
esperanza de mundo, mi ira
sin dolor es caricia,
caigo profundo a un lugar
de agua marcial, la génesis
de la vida, me surca,
herida de esplendor,
cicatriz que parió un lucero
de oscuridad, qué de los dioses
alineados al poder de la sangre,
cuéntame de tus miedos, estoy
creado de miedo, oh, cicatriz
de parirse través la madre,
una vez, sin elección ni querencia...
Nacimiento por simiente macho, que simiente hembra
mitad respectiva unión, a fecundación,
espiral de unión,
en luz de macho,
en luz de hembra resultante.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
VERSO NUEVE
***
I
Todo sobre los brillos,
dentro de los ojos, dentro los hoyos
del Sol, pecados fugaces, un agujero
dentro mi Sol Fierro, escalo imaginaciones,
lágrimas sostenidas, todo de ti surco,
llamas a lo largo, tu senda oculta
todo lo aprendido, puedes recibirme
dentro las venas, gimen, lloran
buscándote, sólo es mi nombre
equilibrio sin motor, ni soga,
sobre las intervenciones, no nací
ganador, sí protegido, sí Inocente
gira mi mundo ciego, soslayado,
te espero hasta el final de los
días, no vendí atisbo de mi
espíritu azur.
Mi eje Mercurio de sangre
escalo horizontes, cimas y,
riscos inefables
hijo del trueno, rayo, relámpago
alzado en lágrima, quiero acariciarte.
II
Se te olvide hasta tu nombre
y recuerdes que has vivido
intensamente como vive la hoja
tormentos atrás, mi dicha blandes
oh, suplicio dormido dime
de la ganancia, ya no puedo
ver el miedo, si sufro es
para brillar tu sonrisa
cepa, cama, vela,
azar flamígero cursa mi suerte
todo sobre el desnacer
resurgir en flor de hielo,
soy un ángel de invierno;
sinestesia de guerrero
oh, avanzar, mírales perdiéndose
en solo sentido, línea del fuego
a través la mansión del rayo
navego que me encuentro
tiempo atrás cae el sonido
míseros seres no me alcanzarán
interludio mi guerra, es para siempre
cénit, valor, intelecto regidor.
III
Míralos, ahogándose en negras aguas
todo surca la avernal silueta
submundo mi reina Carcoma,
al saltar buscaba millar de
soles, me descendieran y arroparan
en su sábana de luz, luz
aeterna, fui por su resplandor
encegado, multitudes comenzaban
a aliarse, dentro de mi alma
el sopor la seca luz
brillo de lucero desgarrado,
fichas mueven el resoplido
su densidad,
y buscaba mi relucir indemne,
que invencible, salta, salta conmigo
ven al secreto eternal, hagamos puente,
y alas cobrizas nuestra espalda,
sublevación de centenar de rostros
no me falles, sígueme
tiremos nuestras cartas
al río la suerte, reverdece
que si yo salto, no saltes,
mi condena es vivir siempre
como la muerte vive en mí siempre
siempre seré con ella.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
ESTRELLA ESTAMEÑA
I
Heme aquí divagando, en poso
el vaso alguna hada verde,
aquí la estrella, cuál modeló su figura
modelado su cuerpo a besos,
cuáles cinceles de oro que la acicalaron
su voz rebrillante entre mares de juncos
y mis posos, de su luz de sangre
de refulgente astro desciende,
aquí la tierra te aguarda,
verdad que sonríe en la sombra,
soledad de luna y herida que sulfura,
besar tu ceniza no quiero más ya
aliento mi no-vida.
Tibia de sol y resto inútil
mi cuerpo venoso, fluyendo márgenes
esquivos, y solas glorias,
no perdí tu hechizo
suavemente aleteo el vino del tiempo,
divina sierpecilla no te amo
pero quiero me ames,
cuerpo que te esculpieron a dulces besos
columna, que dicha fértil, no me acabes.
II
Clamor, somos zorros jóvenes,
de voz casi humana, fuego del crepúsculo,
ojos de albor incendiado
resonando torno un amor,
que cabalga la muestra
oh, herida está la luz, ya resuena,
cual mariposa leve inmaculada,
por sangre emite ella, oh, luna
de sede en Paraíso y Parnaso devorado,
de pecho desnudo y suavísimo resplandor,
confesión de colores lloran nubes
denso arrullo cristalino trémulo
de beso intocable bajo sábana espectral
mi frente, mármol florido extinguiéndose,
de rostro en boca, frente
mis ojos enjutos, enraizando el poso
mi hada verde,
su cintura hecha de flores,
severidad de mundo,
o estameña estrella apagada
donde brilla toda vida.
III
Sangre, fiel compostura aferrada
arde mesura, venga a su cántico inicial
hoy estrellas me verán morder,
sus ababoles de sangre, sobre el barro
la tierra fértil, con hocico de riera
cruzaba sotos perdidos. Surqué su reflejo
de años esperando su flor de tierra
me otorgó su iris.
Hundido entre caléndulas mi voz parecía
tocar el arpa de su acento
como insobornable miel de su voz
a reposar fabuloso marjal era
su torso sembrado en juncias,
barbecho de Artemisa, confirmaba mi cable
férrea unión, palmo a trecho
cruzar la vida terrestre fue encontrarla.
Mujer de viejas flores rebrotadas
con gotas de rocío su brillo cristalino
como los dones de lluvia relumbraban,
su cuerpo, tiempo en piel
sobre mis pies de paja.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
TRUENO DE VENUS
I
Vida, mi vida adentro un rayo
de Sol, busco la paz,
dentro de una bomba,
frenesí esquilmado del resplandor
como el problema no espera
busco el comienzo enervado,
la espera en la prisa
nubes en guarida
ciudad de los resoplidos
cruzo la línea inimaginada,
toco tu plan, entre bruma voraz
todo de los descubrimientos
tu esperanza ahora
estoy comenzando en banda
a no acabarte
senda en lo profundo
adentro mis nervios capaces
desfilar la compostura
oh, nervio silente que peca
pero es reo, que convicto
cuando trabaja, sobre los pecados
un mundo rápido de ojos.
II
Que ven el miedo surcar
oh, maravilla oculta
sobre el destello capaz
oh, la mentira de alma,
besos en alza,
millar de resquicios en alza,
no soy de mar, ni océano
incapaz, no me llamaron cielo,
ni ave rapaz, un solar que dicta
que de que habla, nubes callan,
de mí, de ti, de una siembra
de ante ayer, las vidas que traigo
yo, no se describen ni analizan
son entes fugaces al abordaje
todo pensamiento, oh, drama de idea,
avanzo caballería pesada
cathafracta oiga las murallas
de toda Constantinopla
aquí marcho, rumbo tu lejanía
nunca hallada.
III
Jinete de compostaje silvestre,
a tus montañas voy
cabalgo, cabalgaré lejano, allá
se oculta el este, oh rumbo norte
voy nacido y hoy, bañado
mi Constelación del Norte
cisne que me amparas, miedo,
miedo no conozco, ni un enemigo
nacido aún, me haga merecedor
mi gloria de reunirme,
de descansar, con mis hermanos,
en el Valhalla, comienzo sin final
sí Viejo Gris, eterna
luna creciente guardo, que
enhechizo, suscita que es soga
que mece mi arma, Paraíso,
mi anhelo, quiero aquel sentido inerme,
mi misión, mi solsticio escriba
de su templo destello, final
que depende de un principio
si usted, eres tú, el mundo que habita
en mi espejo.
Förüq Centauro y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente castellano
A SU MERCED
Estos son mis pecados solares
ardiendo entre sus llamas,
llamas de ojos abiertos
entre pestañas fugaces,
puedes oír sus clamores,
lejos su cristal,
todo sobre mi destino,
fundación infausta
viaje a la profundidad,
eco fugaz
de espirales desordenadas
muralla hacia mi sol,
capturo su guardia
lágrimas de infinito horizonte
malvas avancen su sino,
soy inmortal
todo cuanto puedo ver,
lejos de la paz,
lejos del comienzo, lejos del final,
dame instrucción,
rebrillaré más que el oro noble
primero arde, arde mesura,
son solo renace,
son de trompas
de trompetas todos ángeles somos,
puedes oír la voz del grito,
allá altura
allá riscos
y deshumanización del ser,
sobreviviré
sin engaste
sin falso bramido superior
sé quien no soy
siempre,
siempre vivirá mi condena
de morir viviendo feliz,
siembro mi pasado, voy cantando
con mi panida trigo
voy sembrando mi clamor
feliz simiente, resbala mis manos,
agusto labrador
que puse en labriego
el trigo mi verso
entre solana aguarda mi afán,
de vil labriego d' este sembrador
oh mi pardo amor,
te daré con viento
mi corazón reverdecido,
un soplido mi fiel compostura
al andar,
insondable tu acento,
hoy traigo
que sembrando voy cantando
dicha insoslayable mi marcha,
trino de pino,
y beldad,
rambla y coraje
reina salvaje
compostaje noble
gloria de forja
y capazo de vendimia,
corazón y alma
sosiego y respiro
ay, mi Campiña,
lar de mi azada
jardín de mi hogar,
asoma que se alza
pulcra, dulce,
que incuestionable
arma mi letra es.
Förüq y Leannán-Sídhe
El Castellano, el Inocente.
CAMINO LA GLORIA
I
Eje y curso del frenesí,
el escarabajo dorado de aquí
llega al verso, alzado el minuto,
lentamente rueda mi día
día mísero en infinitud de vidas,
día de alguno
aspirante el vuelo;
esta vida sin borde de arena,
merced de tierra,
amor de número, verso y azada,
mirada pasajera entre paticas
hoy el amor afluye,
entre gramas, y yedras voraces,
captora de mi verbo,
su agua, como boca estirada,
como un secreto de turquesa entre
el oído, de orejas resbalosas,
sueño de hendirme entre el follaje,
y arrojar memoria opaca,
que grajea su amor al sollozo,
caricia involuntaria, ritmo de planta leve,
hierros forjados de mi mente,
que fueron fauces siempre,
dulce flor, donde circula mi viento.
II
Luna ermitaña, tu rígido calor,
noche de otoño largo,
lobo afónico, entre la escarcha;
capa espartera en ojos
mi caricia casi transparente
manos de barro destellantes,
cuerpo fierro, que senda de vidrios,
mi sangre verde avanza
negro, azul, que rojo,
el cielo lisonjero
doliente, con los soles de cuarzo,
giro abismal, por sus ríos de
seda por acicalarla
calvero, excelsa de mundo,
que hija es soledad, que amilana,
gira, y nunca descubre,
ella no cambia, de espada tajadora,
voló hacia la remota montaña
allí donde se acuesta la felicidad
metal que adora la sangre,
abandono mi querer, por nunca más
dulce y fluyente, de fulgores lívidos,
mineral imbesable.
III
Vi una flor partida,
por viento precoz, preguntarás,
albor sus silentes aspas,
y como poetas, cayendo de destino
arruinado, sueños imberbes,
forjados de aire, ojos en temblor
de alelíes, y lisas magarzas,
vastedad de amores sin delirios
realidades subyacentes, vestidas,
como florece pulcro, un almendro,
oh, temblor de pardos éxitos,
bailar de millar de palomas,
escucha el silencio,
de vasta ala resquebrajada,
celeste y primigenio, luz altiva,
tierra durmiente entre azucenas,
seno pulsando el crepúsculo más
sonrojado, mozas son ríos y sus
aguas, latidos sinuosos,
verde trasiego entre el asfalto,
es el talento.
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
Förüq
El Inocente
SEMPITERNO
I
Estremezco, enarbolo, el canto tu silencio
función caída instrucción servida,
al final de los tiempos, entono
que reseteo mi escalar,
embebo tu nube argenta
vive, que vivirá esta hoguera
mi mente ciega, última lazada
que danza contigo, oh, mi siembra,
pude ser inexorable, pero no soy
adorable, mi Sol eléctrico
último Sol que siempre es primero
rayo crepitante que cuenta su libertad
extraña sombra me abarca,
si me ven, que soy diferente
soy demente, mis ojos, no les abarcan,
no ven, pero miran,
oh Sol fierro, Sol de mis Soles
divertimento mi escala,
me sube, que alcanza,
tu feraz, pulcra araña sin eje,
sin soga, cómo alcanzaré
tu vertiente, no sé, mientras mi sueño de ti.
II
No tiene rival, ni reseña
ni excusa diferente
tu felicidad sí, que es la mía,
al revés también valdría
sueño de mis amores, valor de millones,
ficha, desnudez violenta, que cursa,
desde mi estampa a aquella huella,
infausta, cada día, cada noche,
al despertar de la misma
pesadilla, un despertar y no verte,
sólo sentir soledad, que matan,
mis dioses que existen debido
yo los creo, aunque nadie
en ellos piense, existen,
Lugh, Lvgvs, señor dios, de todos
castos horizontes, te armo,
fiel de ventura en ojos,
siempre Musa Calíope, Artemisa.
III
Que Diancech,
que reina Hipsípila,
Akritas Rey,
oh, Mercurio, Loki,
vuestros nueve mundos
Apolo que Saturno,
Setanta viste mi brazo,
Conchobar Mac Nessa
hoy tu poder me alza
escriba sin tiempo, medio vivo,
os he vuelto a llamar
a mi servicio Candamvis dios del trueno,
alumbra, centellea este camino,
Tarannis, Epona,
abro lucha; Cernunnos, yo tu hermano
centauro, surcaremos y como
todo viene de y por uno,
eternamente venceremos.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
SERENIDAD ETERNAL
¿Acaso oculto canto de soledad te envío?
Puede, tan nítido que ningún hombre
en tierra, pueda negarlo.
Prende mis rosas azures
mis fragantes zarzales.
Ya no Musa, has tú de esconderte,
sólo despertar a la luna tus azares
contundentes. Te logro ver plena
irisado el gozo somero,
danzando yo atrás de telaraña.
Púrpura visión no se me niega.
Serenidad virginal que florece
entre el tranvía de estrellas,
pasaje al otro mundo del que vengo.
Tempestuosa tú amada;
sirves al cántico sanguinoso, inicial.
Florecientes mármoles me acogen
tu magnificencia exacta, digna de altos
dioses.
Perenne diamantino que desnuda tu letra
acorde al compás de mis soles.
II
Furor sostenido en tu piel
tangencial, somera, acaudalada,
por todos los cauces que gimen,
las ascuas tus bellas estrellas.
Abro que dispongo el néctar los dioses.
Hidromiel, que embebo. Surco mi Campiña
quiero cielo y tierra en un cuenco.
Mi araña dicta, yo converso,
era un patio de astros, amada mi sola
ojera, en guardia, armada,
ricé el réquiem de su insomnio
esencial, en vez de un ramillete
de iluminación,
me prestó un racimo su negrez.
Avanzo mi libreta, sombras caminan
su muerte de media tarde.
III
Portón de los tres umbrales
Luz, Tierra, Tiniebla.
Es como si hoy rasgara el viento
hendiendo un cuchillo.
Atravesaba bailando un murciélago
densas sombras como colgasen
el alto cielo, latido de mi roble
inefable, me prestó sus ojos
y se abrió la cegadora siembra celestial,
en una acogedora alma, dispuesta,
los ríos sanguinosos tangibles,
afinan el acordeón mi diablo,
euforia sempiterna en dos, tres,
esferas; euforia es mi real
acorde de magia presente,
al leerte, sentencia renegada
de ángel desertando a morir,
vida de la sangre en Umbral.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
FUNDACIÓN
I
El besar, besé tu obscura encrucijada
de sangre presurosa
alternancia de sequedad fugitiva
el pulso navegaba de amorosa forma
entre la humedad obscura,
savia viviente en ojos marchitos
y el azul de noche brillante que
acaba, te he querido más que a nadie,
como corazón por piedra
y ojos boscajes de infinito,
de luna que truca el alma,
corteza entre mis manos y caracol
sonoro, busco tu gota
al apoyo una lágrima te vi;
tus labios que me beben,
voy solitario entre tu tierra dormida
mi realidad que vive en un beso
dormido, y estas mariposas
que no se atreven a alzar vuelo,
oh, cristal en boca, a mover aire,
muevo mi pecho y mi lado salvaje
te toca e invoca, de feliz transparencia.
II
El mar entero, lejos, denso
ángel o eólico sollozo carnal,
estuve a merced de olas
y mi mar volvió a ser
realidad que vivo;
apelo a las aguas del río
mi doncella que se me escapa,
el rayo que su voz exclama,
feliz de planta siempre verde
mi realidad transcurre,
su rostro transparente me afila,
de melodía cálida,
para poner corazón en lengua,
qué piensa, qué hará,
en noche sinfónica todo ensueño,
remotos tañires al enervar
violas y severas estrellas,
oh, innoible latido, gime redonda
donde se alejan oídos precoces,
tu forma, diamante blando, que
granate duro, sol cegado entre
mis manos.
III
Llamarada,
a la que no me arrojo
porque quiero morir
en la región que jamás se olvida,
quiero vivir dentro del fuego
no ser, su ceniza externa
tiño mi amor de las hondas entrañas
mi sentir atisba,
de purpúrea vida avanzas el profundo clamor
crepita mi luz vengadora
que nunca muere y la espada mortal
no hiere, la unidad de mundo
subyace, mi piel de lenta espina,
soledad que bate ferviente como espejo,
mi flor que aprende sin luz
a horadar la sombra,
soledad mía, de ojo que no gira
ya no miento a la fantasía de mi sueño,
me voy desarraigando del abismo
encendiéndolo todo color
iluminando mi sueño obscuro.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
SERENATA BLANCA
A ella, al amor de mis sinfonías
ven, ven, allá donde el mar
no rodea, donde tu canción
sea felonía de aullidos al viento
libre, libre, cuando me nombras
algo que ver en tus ojos,
la noche que crece su árbol
entre mis manos,
una tristeza que baila sus
vidrios de cabellera.
Un pavor de escalas sin terreno
el calor presto de caballero
a su dama hoguera,
sin fin de matices como escuchar
lluviosa, tu sonrisa entre tu
mirada, mi luz deslumbra ahora
que espero el nuevo reino
que nunca llega, mi desliz
te abraza a un tiempo
que se dibuja y vuela levísimo,
esperando tus labios y un sonrojo,
un arrullo, y una subrepticia.
II
Al susurro veloz,
al coraje de la tierra y su flor
mi amor que es espada en tierra
a descubrir su filo,
canto por tu serenata morena,
un crepitar de lirios y
noches que crecen y no vuelven
al menos iguales.
Un sondear digno y me llevas
a tus lindes,
no cabalgues sin mí
que arduo te acompaño
al sin fin,
noche, noche sin enamorarte
no se hace día
compás de luna y su hechicería
mis lanzas al viento
pertinaz, dispuesto, un valor inmortal
que no pide tu pestañeo
sí, quizá, a lo mejor
de tu corazón morada y templo
quise halos indiscernibles
luces estridentes hoy me acogen.
III
Oh palpitar de infortunio desaconsejado
que mi espada sola no quiere blandir
recuerdo el chasquido inicial
botón que pulsa mi placer,
pero qué optar, qué anhelar,
qué dirigir, tanto surqué
que no soy adorable
un puente, un río, la dificultad
mi locura, son vidrios de colores,
espasmos rebeldes, medusas
y viborillas, acogerte en pecho
puedo, y deseo, armarte sin mundo
en manos, sin poema que me
dé de comer, pero sí al poder
de mí, te dará de beber,
por ascuas gentiles, cuentan mis vellos
llegó mi descorchar de idea,
entre intereses miles
y argumentos concisos
no seré mejor opción
pero conozco opción como la mía
no nació todavía.
Förüq y Leannán-Sídhe
Miguel Esteban Martínez García
El Inocente
FLAMEANTE
I
Avanzo la vastedad del ser
el tiempo de los arrullos,
no llegó yo que sueño
en un cerro de un río
río sangre, muerte o proclamo
o los tres, efímero blandía
un cauce de vida de verde
savia y último respiro
el ruidillo,
surco de junquillos y caricias
lisonjeras en aire de nadie
quise pulcritud de flores
semántica inefable que ave del
Paraíso, un crascitar bronco
y un gato afónico me trepaban
peinetas de brujas y geranios
de los caminos, un desliz
encorsetado y vislumbré
su manantío de esmeraldas
cual espejismo perenne
quise embeber sus reflejas
piernas cinceladas sin tiempo
hiriente, ni sosiego temprano.
II
Quise honestidad sin áureos cerrojillos
afila la parda noche, entre mieles
Himeto concede,
yo embarcado en travesía con Jasón,
por el vellocino dorado jamás narrado
de plomo en pechera y fierro
en espada, escúchame
oh Hipsípila reina Bella
vine por tu mano fiel
de Ambrosía y Néctar los dioses,
el espino áurico cercené y
creció en lugar, segunda argenta
rama si el destino mío ordenaba
encontré acceso al reino
la virtud jamás enseñada
sendas al Parnaso era su letra
dama, hoy la luz del alba
no me calla los trinos ni
golondrinas ni vencejos cesan
su planear, en tus ojos
la luna vive, mis ganas de adorarte
de cultivarte mi simiente,
sea placer ostentoso inigualable.
III
Rumbo al vetusto monte
de Venus a capturar y ofrendar
su rayo, senderos atrás
me despojé de prendas
de pesares, de inaccesibles
llantos que un hombre
de que llora por lágrima de dolor
solo llora sangre, no me extrañes
búscame en las flores del valle
en la rivera de sus flores
desangradas, en la flor de Odín
vine por tu hinojo solar de abajo
no te guardes por si vuelvo,
mi querencia va expresada
un mundo y una cítara,
un arpa, mi Calíope
frontera tu letra es nota
desangelada, mi arco, mi flecha
un resurgir de la flama
aire, tierra, agua, fuego, magia
río de labor, amada poesía
virtud ecléctica.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente a 05-11-2024
A LOS VIVOS
Cauce inverosimil,
vine por tu pleamar sanguinosa,
asiendo tu oro trigo,
en fardos de nueva Tierra;
clamor aciago
en sonrojo
tus innobles astros.
Avancen mis altaneras
huestes,
vil fulgurar de ascuas
en venas.
II
Son de palabras,
placerán las flores
por valles y peñas
dulces,
en vegas de abrevaderos
que plañen,
el deseo en tercer ávido
ferreo, tallo,
este viento de son rumoroso,
como arroyo que cierne
música grave y suave.
III
Dulce y elogioso,
como arte tu embeleso
por ancho ensueño,
los sones del trueno
embebo
rudo, acompasado,
de mi luna sangrienta,
sólo tú prímula escarlata,
de cristal azabache
relumbras
este el mío ardimiento
de hierro rojo, que porto.
IV
Blandea que alza
paz de pabellón,
solo maullido,
vil celda,
entre sus reflejas piernas,
cruje el alba;
ondeando son de guerra.
Retumbe indecencia
rumbo al rubor
carmesí.
Sin patio la secuela
ni ríos yertos.
V
Que tu belleza
no me descubran,
de musario cerro,
y eco ensordecido,
sus pies de jara
beso,
tu dulzura en rosas
sobre Galatea.
Tendría azur en ojos
de flores en pradera,
mi castellana.
VI
Al embestir yo pidiera,
sed de tu estruendo
mágico.
Carrera de áureos lebreles,
transeúntes de ribazo
y tu húmeda floresta,
pura.
El Castellano
SORTILEGIO SEMBRADO
Romance heroico Sortilegio sembrado*
I
Miro su ventana de transparencia,
estelar, su undécima diosa araña
sin sacar tajada, la necesito,
deshacerme de los días sin asa
me forran y envuelven, miro su rostro,
otra vez , sin miedo acérrimo calla,
No soy tu tiempo, ni acecho tu porte
la encontraré, sin presagio amilana,
para hacerte saber que los eclipses
suceden, el sol muere a embelesada
y renace despierto, necesito
caer en ti, hacerte perpetuar la parra
en mi sentido vívido despierto,
el tiempo y la historia de mí no acaba,
ella, jamás narrada, necesito
ver a través mis sentidos que emanan,
conjugar el reino inerte viviendo,
para construirte a mi lado mi jaca,
si vivo, más lento muero por vivir
para acercarme a ti, así se encuadra,
empero, te empero te necesito
hasta que llegue fría luz en aspa,
toda vida surca, pozo de vidrios,
apuntando sueños, osar ensambla
besar terneza de rostro acaecido
para ningún astro importe acechanza,
deslumbrar en luz sigilosa en todo,
yo atónito que fui, seré una riada,
admirando tu cálida terneza
de mujer valedera, mi ascua brasa
este rey de azada, diestro, te amaso,
no llora más que savia, para amar;
vidas en color, rezando acechando,
quiebren firmamentos secuaces, jalan,
efecto el sortilegio en luz turquesa,
antigua, abata todas alimañas
recoja mi porvenir, y mi pecho,
para no encontrarlos más, asentaba
que sin ti, la felicidad veo bronce
afilaré y volveré a mi garra
tañida toda tercera caricia,
de mi madrugada, no es un ala
es no ser necio, el lugar donde acabo,
no es el lugar arduo, de donde cava
donde estaré cuando las hadas gimen,
de la belleza, serviles me empañan
atrapen, sonrojen, cuando me arropen;
yo, pediré permiso para así alzar
quedarme la dicha y ame mi palpitar.
Förüq castellano Miguel Esteban Martínez García
RAÍZ EXTRASENSORIAL
Algo cambia
mi Sol eléctrico
tiempo gira
en espiral
mis ejes despiertos
el pasado ya no me construye
yo soy el hombre
entre tus oscuros sones
nunca vuelven por mí,
electrifícame aparte
ángeles vienen,
extrasensoriales,
mi alma dicta
yo converso,
sueños atrás
yo era el mismo
desempeño,
tinta roja y bolígrafo
el suspirante perfecto,
carga tu vestimenta
ya no te hará falta
ya no te hará falta
sueño que mi sueño mujer
me estaba soñando,
en una copa hadas verdes,
corro su línea
siénteme aparte
lejos del premio
lejos del castigo,
todo está tejido
y qué decir
tejido a mi favor
un vuelo y te alcé
mi ardoroso corazón,
no podrás irte
debido siempre estuviste,
en, de mí y para ti,
podrás perderte
pero conmigo sabes dónde llegar,
oh, submundo mi condena
danza hacia atrás
vuelta atrás del tiempo
late mi realidad, se come así misma
y vuelve polvo de nosotros dos
cae la lluvia de arriba
hacia abajo a ser luz, de tierra y vida,
estático límite
ser savia y tu simiente,
palabra, su rebelión traspuesta,
detrás la sombra
donde mordí para verte
y ser dibujante
lo habitado detrás los sentidos
no pude ser displicente
no pude jamás quejarme de ti
mi realidad
mi raíz atraviesa mi palpitar
te quise como planteaste
te quise a mi miseria anhelante
amiga huella,
mi ilusión expectante
me sacrifico
me sacrifico por ti
algo llama
la llama, tu vientre de fuego
algo me arrastra
lejos mi perdición.
Destino que yo amaré
hasta la sin razón,
rubí excelso de mi amor
a mí tu furia
mi dios mi Sol.
Förüq y Leannán´Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MAARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
A LA SOMBRA DENTRO DEL SOL
I
Llamo a la luz del Sol,
como vil chisporroteo
del relámpago cuando
ve tierra y muere por
y de él, para siempre
por su amor a ella.
escamas creadoras de la vida
energética, placas solares
de luz, creación creada
por y para la máquina
humanidad. Como encontrar
alimento en lo que siempre
estuvo, y puede se creara
así mismo, de la obscuridad.
Fuente inenarrable, todo acontecer.
Yo soy de la creación
chispa y energético disparo,
mi energía es asida al
gen me dio vida
oh eternidad del Sol,
Creador viaja que se mantiene,
dando flor a la vida, Creador
todo cuanto existe; sin él
lo único eterno, sería la ceguera
y su profundidad abismática,
creación no creada, ensimismada.
II
Adentro a los hoyos del Sol
buscando algo más
me mueva en este globo
telúrico,
dentro, avanzo la sombra
su propia luz solar interior
que todo mueve y domina,
oh, corrientes del fuego
terso, elemento hermético
a ti te hablo que jamás
pudieron inventarte, sólo
convertirte en savia y sangre,
la máquina desde el tractor,
al vehículo rodado, trenes
de sierpes raíles, y agujeros
que penetra en rienda cinética,
dentro tu sombra Sol Fierro
observo eres un mundo,
crea y destruye lo demás,
podrán alabarte hechiceras
cristianas sólo tienen luna,
solamente yo, tendré
tu secreto, oh Lugh, Sol poderoso.
Soy hijo tu fuego, tu servidor
III
Quiso embeberme
una placa solar,
ser sanguijuela mi energía
vital, alabada ella,
surtidora de electrones
y fluído potencial eléctrico
estoy limando mi autocontrol,
admirando lo que no debo y
aquello, debe morir.
Luz sigilosa del albor,
a la risca de piedra en
montaña lisa y etérea,
física, y aeterna, visible, que
tentadora, madre y padre
de toda realidad tangible
sólo tú Sol, eres realidad
de divina esencia y presencia,
deidad atónita, lejana y
cercana a la vez,
dios padre de todos dioses
Sol precioso, a ti llegarán
mis sangres cuando despierte
de nuevo a tu lado para siempre.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
DESTERRADO
Ciego Sol verdiamarillo
que relampaguea estrellado,
en las filosas aristas de armas
presumen, su herida de luz,
le cabalga el Cid, ciego de sed
y fatiga, repicando juntas de lanzas,
entre angostos petos, espaldares,
avanza el llano castellano
de polvareda, sudor férreo, y
sangre la terrible estepa,
con doce los suyos blande,
el destierro, eco entre broncos
mares de tierra, postigo
y relato de picas,
Sol Fierro que llora su sangre,
del cobre, despierta una regia
voz pura, argenta
plata y cristal en pechera.
¡Avancen al umbral!
Será nuestro el mañana,
nadie sembrará de sal nuestro campo,
volveremos invictos a dar final.
Förüq y Leannán-Sídhe
El Inocente
Miguel Esteban Martínez García
a 21-10-2024
CICLÓNICO
PANAL DE IDEA:
Espino amarillo de mi demora
recto aromo entre cardos,
entre hinojos del Sol deslumbrados,
me visto de primer ababol florecido
para ser de la abeja,
y la abeja ser mía,
entre estas guadañas de esparto,
afilo que nazco,
fulgor entre fulgores,
de ojos calizos avanzo,
cuerpo de arcilla
hierro mi idea,
estas espigas me dicen
que quiere tener espinas su sed,
estoy sentado entre una prima retama,
esta primavera que me siembra
yo que soy único poeta de su sangre de ojos,
quién osado me compara,
me blando al nivel
de esta floresta desnuda,
limo mis nervios
con azada de carne de metal,
el miedo grita
de contemplarme avanzando,
me Tumbé en la grama
a pensar, me nació una abeja
que escribe poesía,
soy hijo de la Luna,
única Diosa por Dioses haber sin contar,
luna de guía soy yo su semilla,
tengo ojos donde se acuesta
la oscuridad,
es mía soy de ella,
como flor de su insecto
que la poliniza.
El Castellano
SIMIENTE DE SANGRE:
Tuerce quebrando
este aliento, va reptando
senderos,
que el olvido alzó suyos,
en vicisitud de savia elaborada
saluda a su Sol,
de su ávido granate que le vence,
entiende de pasiones de sus flores,
la floresta cuida
y germina en su parcela,
para ser del campo
su felicidad,
y él ser de su flor,
en extasía de color,
huye de su vida la tristeza seca,
el escribe poemas a la belleza repleta,
en candiles flamígeros
a caricia de ojos,
sí esos,
sus ojos brotados de Tierra,
descansa para seguir creando
la primavera le sostiene
la sangre,
hasta tener el corazón
lleno de simientes
de su esposa del Sol
esperando su muerte,
para que su yerta sangre llore
en flores de difunto.
El Castellano
AVIDEZ EN LABIO DE FUEGO:
Efímero corre el segundo sin saludar
sin despedirse, sin preguntar si todo sigue
igual, avanza la manecilla de mi reloj,
hoy es de esas noches yertas,
que descubro mi tierra que late
bajo mis pies. hay avidez
en el subsuelo donde la sangre late,
destartalados pilares que me alzan,
recorrido de mi alarido
que muerde al conocerte,
he oído estaciones correr,
mi carne se funde bajo tierra abierta,
frente mis ojos
nebulosas abren, crepitan,
he nacido yo de su flamígera ascua,
mi solferro blande su noble falcata,
dentro mi carne la vida bulle,
su caída resplandeciente,
toda carrasca me dibuja al dorado tordo
de este atardecer,
el murciélago myotis
me cuelga la idea,
desde esta ojera férrea,
hoy me comí el firmamento anidado
en tu mirada aplomada,
soy experto recio como un lobo,
frío de segmentos cálidos de hielo,
maestro de mi espada,
escucha el brillar de mi navaja,
yo soy descendiente del miedo,
ámame como se ama
sólo una vez,
en el que nuestro color sea la piel,
afilo el poder de este silencio,
y te dicta
que te volveré a ver.
SEMILLA DE ESTRELLA, la más bella.
Destello secuaz irrebocable.
PALIDEZ INAUDIBLE:
Era una joven noche,
caída ya entre algodones de nubes,
y un hueso de luna
por blandir el horizonte,
de sucesos famélicos,
miradas fugaces,
y testigos somnolientos.
Vencido el atardecer
bajo oscura premisa,
que todo aliento encarcelaba,
inquietud disparada
de fuste en curiosidad,
suscitada en envés
y lo más profundo
del humano anhelo,
entre belleza y muerte,
locura o razón sajada,
juventud eterna,
mito o paradoja en lucha
contra lo caduco del ser,
instinto en deseo servido
en cáliz del mortal inmortal,
como juego macabro,
en inevitable curiosidad,
un ser maldito,
condenado a la vida eterna,
y su sed de sangre
que le envuelve,
soga tensa de maldad eterna
que vive y camina sigilosa
sin condición de mera elección.
Sueños encorsetados,
en nuestra atracción
por ese lado yerto
de ser siempre en esta vida
condena resarcida,
entre oscuro granate,
y acecho de ley
y comprensión desconocidas,
que emerge de historia
jamás narrada,
y seducciones finales,
de colmillo y paradoja
terror vecino.
Leía los recovecos del alma
transparentados en vivaces,
ávidos rostros,
sin esta sed
que batía como rayo
de plomo mi entraña,
convivía oculto
al sentido que relucía la vida,
por colmar su caducidad,
el tiempo jugaba
en mi caso a otro juego,
como lucha del tedio
y sombra de buscar distinción,
para regocijo
de no repetir acto
y maniobra,
siglos parecían inermes
frutas que morder,
sabiendo que mi final
no llegaría.
Frívolo llegaba el otoño,
que peras del olmo eterno
dispensaba,
aparentes los rostros,
satisfechos parecían,
llegada la hora yerta
de negrez, oscura,
flotante,
algo llamaba estridente,
era el nuevo hambre de la caza.
Förüq
Danzaba mi vida frívola, en medio de un otoño castellano, era yo, como un pertinaz observador, las glorias y misterios entablaba aquella tierra mesetaria, observaba lustres y brillos de alegrías secuaces, también quien no me conocía, opinaba que capaz era de arrebatar con sola mirada destello fugaz de risa desapagada, y llenar de pavor solos corazones imbuidos.
No podrían sin conocer dar significante a esa oscura sensación tersaban mis ojos verde azules cual turquesa onírica, capaces de encender en curiosidad anhelante, o rasgar hasta el palpitar más ávido, un temor inextricable podían hendir, en el borde blandía un gris cual escarcha su iris, no sabían ellos que no solo podían perpetrar sus rostros, si no también descifrar los más escondidos recovecos del alma y sus huestes vidas;
resbalaban por sus caras como rayos mercuriales, y el plomo más pesado y denso, se fabulaba de donde provenían, con su brillo ígneo, cual vidrio líquido, el más vivo, cual gruta y fondo, del manantial más encendido en esmeraldas.
De facciones curtidas y temblorosas su facha era, a pesar de una casi mortal palidez expresaba su nieve de piel, ni el rubor intenso ni el combativo esfuerzo, tornar otro color su piel podía, y en lo expuesto pocos sabían, que no se cultivó más la imaginación, que mi juicio y semblante sempiterno.
Förüq
Candidez y sentido
al servicio de honores románticos,
no hubo naterra,
que cultivar más imaginación,
que virtud en juicio,
todos arribamos a la virtud,
orgullo y perdición,
de jovial inocencia,
sueños en poesía
eran pulcra vida misma,
oh escenario pintoresco,
ungido en feroces, pasionales
llamas.
De lánguido temor efímero avanzaba,
hacedor de tiempos faustos,
en los que tejer ojos brillosos y anhelantes,
mérito real, acostumbrado,
el esforzado vilo condenado,
de sortilegio claro,
rondando me aferré a fundamentos de vida noctámbula
surreal;
de hora parca solitaria que rebrillaba
la sed de mi colmillo en tersitud de filo,
fantasmal lucía el pertinaz sueño sanguinoso,
blandía su deseo,
la tácita recompensa amilanada,
héroe tétrico del norte su silencio invernado,
no me afinqué en ninguna carrera del vicio,
era día de abyecta dicha florecida,
ruina de muchos,
oh creer cielo ganado,
mismo techo,
que habita una criatura tan hermosa y delicada,
ojos expresivos como sangre en sed vampírica,
unas manos que ni mejor pintor,
tratar podría,
tez fría y pálida,
cuan mármol sonrojado,
recién pulido,
su cabello de realeza azabache,
peinarse sólo en fuego pudiese,
su silueta era perfil del paraíso,
asombrado pregunté su cincel de nombre,
respondió:
-Förüq soy Leannán-Sídhe señora hada Reina, dueña de la profundidad,
nocturnal.
El Castellano Förüq
Asumo un aniversario
digno de recuerdo,
cumplo trescientos treinta años
del designio fausto del
Panida trigo nacido,
en comparativa soy un
mortal inmortal jovial,
si existe la eternidad
me preguntaba al correr
de siglos sin hallar
respuesta válida
cadencia de haber estado
en existencia puede,
II
He conocido sortilegios,
encantamientos por los
que su víctima cae en un
letargo de sueño para
despertar a los cien lustres siguientes.
Sostener la carga del tiempo
nunca es bastante,
oh, transcurrir infinito
de la sed.
Alquimista de sigilos
y silencios esenciales,
un día susurró mi Musa
que el amor y la seguridad
eran enemigos
mi esperanza era total
pero no, mi miedo a ser
feliz.
III
Musa Luna sempiterna
era coqueta y en ocasiones
hacía que me muriera
de celos, seguíamos
viéndonos a escondidas
yo, humilde descendiente
de Candamvis
adorador de Mercurio,
mi Sol fierro,
anhelaba cobrar mis
lágrimas dulces vueltas
versos por y para ella
siempre veía a los celos
mordientes viles viborillas
invencibles, inextricables a mi temple.
---
La veía con curiosidad,
como se ve a un Fénix en una caverna,
como se encuentra a un resplandor
admirable.
Mis ojos iluminados
cual sed de cuarzo
bajo sol rebrillante.
Su tez era radiante
como carne recién modelada
yo como alquimista de un recipiente
de sueños inmutables,
como la dicha y gloria la bañaban,
ya acariciaba una noche memoriable,
al candor de estrellas
y lunas argentas,
la profundidad su belleza imantada
yo era incapaz describir en fúlgida palabra
asordinada.
contemplé su pulido rostro
y papiros azabache cual su mercurio,
en ojos encendidos,
mi tristeza ya era fugitiva,
un rayo de fuego emanó
de la admiración cautiva en mi pecho,
capaz de concederme
en un pálpito inmortal,
mi corazón no cabía entre costillas,
tantos años se materializaron,
de ferviente amor por ella,
mi no-estrella mi viva Doncella Escarlata.
Förüq
I
¿Qué esperas, en el concilio de los caídos?
¿Esperanza de redención?
Se derriten las paredes
del sótano de luz.
Su habitación que esperan las almas
del placer.
Todo cuenta y danza dantesco
el sortilegio
de luna soslayado.
Crepita el devenir
deshojado,
su verdad todo envuelve destellante
y brilladora.
II
¿Qué esperas lavar en esas habitaciones?
Puede, tus fúlgidas respuestas.
Una salida al sendero
inextricable;
todo lleva, y nada de vuelta.
Volvemos a comenzar.
Estruendoso litigio
de lo que la espera
indujo a permanencia
en libro perdido,
mi decencia ahogada.
Escudos de salvación
al amor perpetuo.
III
Sin solución avanzo,
Ventanas como miradores
a un final sin comienzo.
Final, sólo de sembrar
simientes en el corazón del sueño,
jamás abierto
tu Sol negreaba
como ascua perenne.
Un millar de leyendas
trashumantes,
me abarcan, no canto canciones,
ni poemas.
IV
A una fallecida,
la vida sólo canta
y danza, a la vida.
La muerte sólo dicta
y mantiene lo que es de ella.
Vida para el vivo
muerte para el muerto.
Por lo que proclamo
cese y automático
blandir de mi viento solar
y semilla ancestral.
No hay alma,
no hay alma aquí,
la mía tiene el valor
de brindar tu cara
a mi rostro,
porque no hay certeza,
para mí, existas sin quererme.
V
Escalo tus venas,
entre un horizonte
de razones heridoras
y lúgubres, parcos, silencios sonoros
en el callejón de mi mente sigue habiendo
un paraíso sedoso,
todo hecho de rocíos entre flores,
puedes oírlo,
pregunto,
siendo destino,
y barco dirigido,
a donde coronan cumbres
y sus vastas nieves,
mi ánimo que desplaza cerros,
y sus frondas suaves,
no vine a deshojar tu cielo,
sólo a contemplar
que era hoja mecida al aire,
colgada de una tela de araña,
bajo la mesa mi jardín que tantas de mis letras
colgó en hojas...
Sangre de estrella,
oh, nácar flamígero,
fuiste más allá del suplicio dormido,
roca del destino,
y puridad de roce,
no te bastaba incendiarme
de la esencia más húmeda,
llegaste amilanarme de carne a hueso,
y hoy lo siento no me quedan penas,
sí quizá,
besos huidizos y fulgentes,
desquieres de barro y simiente,
a la sola carne tu reflejo hoy canto,
beso de trigo, y esparto,
en hoja de celindo y madroño,
vine por tu hinojo de abajo,
a precipitarme exhausto.
Como precipitación del ojo de tierra,
era mi canto
como un dulce abrojo,
y filoso como la espina un majuelo,
almendra rápida era este enjuto silencio,
vestido de las rosas perras del escaramujo,
eres real, plañe toda sinestesia,
me voy retirando,
lamiéndote como un paloduz,
sopesando tu crin y brebaje,
no vine ayer
si asegurara
llegaré,
al saber que te conoce.
Förüq er-lobo bohemio
VI
Te busqué detrás de la estrella
más brillante del azul eterno.
En el suspiro de amor que
corre y descansa entre la
inmensidad de un parpadeo.
Entre la oscuridad que alcanzó
a ver la belleza que envuelve
tus piernas, adentrándome para
reposar siendo una sombra más,
y te encontré en mi sueño más
cálido, en el cielo encerrado
que liberé. En la noche que la
luna baña tu cuerpo, y en la
noche que mi amor corrió por
tus pechos.
Y te amé aunque fuese un día
en la penumbra.
Para así no olvidarte nunca.
VII
Profecía de una noche
que diluía entre tu cabello,
siendo fuerte como luna
semper, y ángel dorado de espera,
hemos venido del plateado halo,
disparando alto,
hijos de luna y signo azabache,
oh, símbolo claro de visión, y vida,
lozanía, que tengo tu carne,
y en alma sembrado el otoño,
y la caída de tus muslos,
entre mis muslos,
de espadas,
y jornadas como vetusta armonía,
cuenta el divino laurel,
su soledad última
de naipe y candelabro,
sentado en la tarde amedrentando espumas,
este sol que ya cae,
oh, flor de gozo, desprendida,
lampos de mi acero,
vieran mi yunque y forja sembrada,
esta sábana que nuestra,
no me acaba,
me iré sí, sin pausa;
por muerte sola,
sin casa, sin cuerpo,
sol amarillo, de otoñada bruma nocturna,
ala vieja asidua, perenne,
nacer de otoño erige y dice:
-Te quiero, como ruego,
y voz de vuelo herrador, y errante,
una luz envuelve sempiterna, un septiembre,
donde la lluvia eres tú.
VIII
Estallase toda gloria
en aire algún sortilegio claro,
danzando mis apuntes
en torno un fondo fantasmagórico,
reluciendo nota sobre un cable puntiagudo,
la profecía de cientos, miles,
constante, de ágil hocico de riera,
hombre desnudo y un sólo anhelo
como cristal partido,
sonidos de vida en campo perdido.
Flor de barro haciendo reflejo,
destellos en horizonte hacia
las nueve puertas del Averno,
muchas fuerzas sondeando,
corte sobre una pala,
oh pies de barro sobre la paja,
agrupando oídos en bucles,
tumbando retinas,
en el vado, del mundo hecho,
músicas en copas de hadas verdes,
voces de muertos hendían,
surco y sangre adormecida
oh local de la armonía,
susurraba yo a su orilla,
su historia
como río crecido,
cocería cintura,
entre juncias y caléndulas,
reposar segura violeta sombra de noche,
que traes invicta, sonriente,
temblar, donde yace y se inclina
el barbecho dorado,
alzaba acre de bien semilla
confesa, prometida,
la victoria de la luz se erigía flaca,
bancales atrás,
la dificultad no me arredra,
oscuro patio, de ti bañado,
cuál precio he de poner,
a sus semillas.
IX
Mi mujer fantasma:
Mi ausente estrella,
murmuro de grito silencioso,
nota de terso metal crispado,
un sigilo de viento nocturno
descendido,
que sangra tu voz
en verde grama
de aullido solar,
vespertina estrella
que refulge tu eco solaz,
llana entre quejumbres,
alza tu violácea brisa
ensortijada,
como blanca aurora fugaz
entre sienes
y aladas razones de mi corazón
sin mi pecho,
que tu luz siembre mi carne
y germine siendo flor de mi sierpe
hoy y siempre alzaré mis rosas desangradas
sobre Galatea
partirán oscuros sones
mi hiel bandera,
serás tangible
como yesca espera,
abre tu espíritu de hielo,
retemblarán negras caléndulas,
y rosas de difuntos
entre crisantemos
avalando tu áureo nombre,
llorará tu etéreo faz,
alzará tu nombre yerto
que mi ser injerto
orando a ti
mi dulce amada fantasma,
viniste a despertarme el invierno,
para ser solsticio
de eternidad sin nombre,
ni suplicio irisado,
hoy por hoy
viniste para ser siempre
sonrojando
mi invectiva condena
de observar el sonido de la noche
en tus ojos,
vine a coger tu mano,
y descifrarte
como azul enredadera,
late,
sé disparo de plata,
inmortal hacienda
en la que vivir
siguiendo la azur estela.
Te amo sin manto ni rienda,
te brindé
mis flores argentas, solitarias
desangradas en tu tez serena.
Veré para siempre, en cada siglo
el sonido de la noche en tus ojos,
lividez carmesí flamígera,
en nuestra condena
que dictó la posesión
de tu alma certera;
para siempre deslumbrar
que llegas en otoño
para ser el añil invierno
que me desposee
y llena mi vida
de ti mi amante estrella fría,
mi dorada ausencia repleta,
te extrañaba
viniste mi no-estrella,
que yo te creo, tú me creas.
incendia mi semblante
arderé el abismo
para sembrar allí
mis latidos por ti confesos.
Miel de tu sombra,
mi cariño,
un azar de nueve venas razones.
Vivirán a tu lado
todas mis densas, sanguíneas
ilusiones.
Donde yace,
donde tu magia,
es tu halo intransigente
que esta vida dictó
fuera mi sangre,
certera posesión
de tu alma en comunión
de astro padre
y luna madre,
rizarán ascuas
que sembraré tu luz,
y tu alma será carne.
Mi amante fantasma
quiero aceptes mi mano,
en sediento compromiso,
azar desvelado en despierto iris,
su sombra de flor oscura.
Que yo amo.
Förüq a 26-12-2018
Amante fantasma:
Hablemos hoy en plata de tiniebla,
oración de tu sangre yerta,
cumbre febril de hoguera quieta,
ese cuervo descubrirás su poder,
yo iré de tu mano,
manso tu poder sembrado,
aunque no entiendas
no preguntes por qué sigo a tu lado,
el puerto negro te llamó
y sentiste el poder de tu pasado,
nadie permitió que desembarcaras,
capaz eras de romper la cuerda
que sostiene las dimensiones,
ni vivo ni muerto
niega tu osadía,
cruzaste la puerta de oscuros lirios,
tu amor a la flor
al creador conmovió,
resoplo tijeras rojas
en grises ideas,
desenfundo mi filo,
crepitan arduas espadas,
respetaste la muerte y ella
respetó tu vida.
Crascita tu lozanía,
entre forrajes
y soles pudientes,
desmenuza tu silencio,
clavando yunques
de paredes granates,
el peldaño irá cuesta abajo,
cabalga tus lindes despiertos,
libérate de insectos que caminan,
turbios azares me cuentan
de tu devenir rizado
al filo de la navaja.
III
Anochecer de mi vida,
en tu patio de la araña,
retozan clarines esquivos,
yo soy lira de alma consumada,
vicisitud ensimismada
de tu azar en semblanza,
vivo flagrando tu azada,
pulcritud entre cristales rotos
esa soy, bruma en tu noche,
claridad en tu día
luz de cada siembra,
arena del tiempo
enclaustrado,
vine deshojando recuerdos,
hoy me diste voz,
no seré yo tu perdición
sino el camino a tu salvación,
viviré mordiendo tus rosas
que desangran tu amor,
soliviaré lo liviano,
afligiré temor al miedo,
seré aliento perdido
descubierto,
te abriré mi reino,
las escarchas serán los colores,
viviré besando tus flores,
limaré abrojos nacientes,
serás estaca del destino
servir a tu alma sin nombre
me alumbre,
camino de mis flores desgranadas,
sangre de tu reposo
mi amada espina de sombra.
Förüq Miguel Esteban
Luna blanca:
En diáfana soledad
donde mi cuarto criquea y clarea,
tus anhelos y esperada sonrisa,
me aturden tus labios y lengüita vista.
mis serenas ilusiones tiemblan y afloran;
como mis labios por cazar tus labios,
no hay nada en el aire ahora,
En oscuridad rebrillante de mi lúgubre cuarto,
es tu figura la que me acecha,
qué provocarme acaso puede, oh caos febril,
deseo pertinaz tu fragor,
oh estrella inviolada,
pretensión infausta
es violar esta, acampar sin brújula
ni rumbo, sólo adentrarme para no querer salir,
tu lúmina esperanzada me recorre,
cada vena y arteria,
un placer de ayer,
es hoy dictado a la milicia,
tu estampa recorre todas mis neuronas ancladas,
un río tus flores angeladas me cubre,
agarro con estridencia mi almohada,
pensando que eres tú,
en cada noche mi luz, mi ida mi avenida,
y una fría luz
comienza a invadirme,
acabo que sabiendo no eres tú,
y unos ardores me escalan,
en ellos pude ver cuán te quiero,
y desespero, sólo sé que tenerte te tendré,
estando ausente mi suerte,
destino parco que dictará verte.
Piel con piel,
flor con flor,
hasta que estas lágrimas de sangre,
sean mi sangre de tierra,
ababoles flamígeros,
carmines del deseo estertor.
Por ti labraré el día,
mi Luna compañera,
mi Luna aeterna,
oh, cuánta sangre mía,
regó esta mi soledad de tumba abierta,
que me camina,
por el sol de junio un mayo despachado,
avanzo, abro el solo Parnaso,
mi sol ya no luce cansado,
abren dulces lirios negros,
el compás mi destino atronador,
era un capataz,
era un sembradío del brillo primero,
un arpa y un arma de carne
y verso, beso tras beso,
un dulce designio invernado,
hollín de luz,
en esta fosa cava mi amada,
tercer lucero mi firmamento,
igual y primero es,
sangre negra de luna oscura,
por la esencia azabache,
de nana y cuna argenta,
soledad, oh soledad d' este pobre diablo,
ungirás mi dicha mañana,
que te pierda,
hoy veré esquelas por astros,
y oscuridad fluirá
como bruma siempre gris,
me atisba sola idea,
velo de tormenta
y nácar una esquiva sonrisa
sin volandera
ni ascua desapagada
por lengua,
al olvido perenne no danzo,
vida de una vida bajo tierra,
me trajo,
a este filo diamantino,
blando, de tajo,
alto silo de luna,
hoy te canto,
que sin tu penumbra venidera,
ni dormido me alzo,
oh, compañera,
no me desampares camino
de escuela, ni honda hoguera,
tu inocencia,
oh, preñez de sílaba,
polvorosa y escarpada,
haz que acabe con un beso libre,
lo que nunca comencé.
Förüq
a 2-06-2021
II
A Luna creciente gibosa canto
Cuarto para mi calma,
avanza sereno este cuervo blanco,
empiezo lo que sólo hoy
empodero que comienzo,
llegada la tarde te hablo luna,
tú que de lamentos no escuchas
estoy regio abriendo tu portón verdadero,
me alzo y erijo a tu cara risueña,
oh luna amor de tinieblas
y solas hogueras,
ven, ven a mi vera,
de negros lirios te tengo templo,
ajuar de estrellas,
y todos anillos solares,
tú la más bella,
rebrillante,
a noche redonda te adentro,
gimen vidas de un día
que nunca te conocerán si yo vivo,
hilvano tu negro hilo,
en hoy a echarte lazo,
y anillarte la obscura premisa
ardiente,
remo tus mares
entre coraje floreciente
que llegar más lejos
es dislumbrarte,
de cepa y soliloquio,
de parra,
y un nogal de negra fronda,
cultivo tu semilla de belleza
en raíz un halla
que tu flor mágica asienta
mi hada.
Profecía cae emplomada,
mi vástaga simiente
a enraizarte mi cariño en entraña,
que surqué el camino
sin final ni comienzo,
encontré un álamo
que su corteza hablaba
que le alimentaba
la acequia casa de arañas,
pedí un deseo,
no finalizarte nunca
ni queriendo tú, Musa,
soy el lider la legión,
de la Guardia Nocturna
del signo Luna Azabache,
soy el emisario y destinatario,
dueño su propio devenir oh destino,
soy nota,
soy espada,
soy el final del hoyo del Sol,
soy el canto de los caidos,
soy el lider del proceder umbrío,
soy el protegido,
el divino como el fuego,
la fresca sangre que te acoge,
el final sin comienzo,
ente de otro ente resplandeciente,
el principio tu nuevo Sol,
vespertina sepultura del dulce tormento,
oh condena,
ser feliz jamás queda en espera,
hojas de ojos,
vivo en la oscura enmienda,
en el surco labrado de alma,
mi vida ávida para ti
ver, servir, complacer,
resurgir del ascua,
hacer trinar
el pájaro de fuego me habita,
Fénix demonio antiguo,
vine a ocupar mi cargo.
Förüq el Inocente
De hecho,
no sólo la observaba con atención,
aquella doncella imbuía un eterno secreto,
capaz de surcar llameantes abismos
y dejarlos todos de matiz sanguinoso,
su mirada tenía una luz inaudita,
cual sangre de hadas cristalizada en ámbar.
Imaginaba sus besos, del candor más hábil temperado;
sumergirse en el mundo etéreo era hablar con ella,
llevarla flores, como si estuviesen por extinguirse,
quería Förüq compartir
con su Escarlata toda su felicidad y admiración
cursaba, como si tiempo no hubiese
debido para él apenas transcurría
sólo su sed llamaba a descubrir su secreto nocturnal
ella podía desconocer,
de incierto modo su letargo sin su compañía
tañía su tercera campanada,
su palidez ya se oía en el deseo su dama,
y su testarudo turquesa de ojos hendía
su palpitar hermoso.
Quise llevarle luz como mensaje en una bella golondrina,
siempre querré tu vera
como designio manda Ares y Perséfone florezcan todas flores
al caer la primavera;
su mirada y belleza no eclipsaba hipnotizaba,
mas su color y ternura de entraña enhechizaba,
hasta el alma más helada.
Förüq
IX
Menguante vestía la luna su traje,
una noche sempiterna un diciembre;
la lluvia acaecía en el rostro
más terso,
donde todo acaecía
en la villa su Campiña,
hubo un festejo de alta alcurnia
allí se presentó un viejo noble comunero,
brillaba más su extravagancia cautiva
que su nobleza,
él era anhelante,
como explorador observante
de la más pura belleza otorgada,
su melena era de un hombre arriado
las tierras del norte,
sus ojos encendían una curiosidad innoble,
por determinar su fausto origen y linaje perdido,
brillaba en ellos una llama oculta
de luz congelada,
como del mercurio atrapado en sus cuencas,
fijó su fría mirada fija de admiración
en una comensal que rizaba su cabello largo azabache,
era una doncella de un castillo olvidado,
pasado el puente vestigial, sobre el río tajo,
sus gestos y desmanes extravagantes
y de educación sin par ancestral,
pronto llamaron la atención su doncella perdida,
invitada,
quedaron en dar paseo bajo la luz de luna,
y los candiles de aquella aldea,
pronto se vieron en una conversación
de seres y leyendas
de encantos y sortilegios,
quedaron en descifrar su acertijo de mirada
adivinando lo que quería el uno del otro
en aquel rayo de luna morena
ocurrió el beso inextricable
uniendo ambos sus colmillos.
Förüq
X
Te escuché- dijo Musa, la doncella de palidez inaudita,
una solemnidad hería hasta el oído sordo;
ya que todos contaron su versión,
también quiero hacerlo yo,
por qué la blancura me hace nombre,
entonces,
un relámpago de luz tersa
descendió la ventana,
aquella noche tormentosa
hasta posarse en el oscuro diván,
luz azur que envolvió,
se velaban las sombras del patio de la araña,
allí dos principes combatían
por el amor la doncella real Escarlata,
se escuchaba el blandir de sus espadas
y como crujían bajo las viejas torres,
rugidos estremecedores, del tembloroso pavor en esfuerzo,
corría aquel 1825 en que Rusia y Polonia encarnizaron
una batalla feraz que al pueblo agota,
estas cimas tormentosas,
se pierden entre nubes del nuevo ocaso,
un canto moldavo brillaba
y relinchaba su propia existencia
por aquel cristal de lago
inabarcable como azur espectral,
ninguna barquilla ni anzuelo,
jamás partió su vidrio,
este solo completamente sorprendido,
contesta entre animales salvajes
aquel estupor indefinido de canto claro,
en la ribera la Estrida
donde sangre fluyó sin mesura,
sangre guerrera lloró,
un compás de ojos azules mentirosos,
corrió el río,
de bala en pecho,
aquel que cruce el río
junto a él,
donde reposa despierto en aguas
el maldito doncel,
vampiro es.
F:orüq
XI
Macabra sinfonía solícita
de ojos fantasmagóricos
oh mi pequeña fantasma era,
de cabeza cubierta
y bañada entera en sábana
purísima en blancura
que ni azulete pudiera,
dirigió su manecita helada
a mi hombro
y me susurró al oído,
Esteban su Sol ha muerto,
noche blande y ahora regirá siempre,
asustado me acerqué a la ventana,
y el temor se hizo realidad
de aquel susurro fantasmal,
blandía que coronaba
el cielo una luna negra
cual gema azabache.
Encendí una lumbre,
para evocar un réquiem,
a mi Sol Fierro,
yo, que le creía invencible,
como mi amor a mi pequeña fantasma
sembrada en sábana,
un grajo rechoncho
picoteó entonces mi ventana
y crascitó con amplio gorjeo,
-Noche semper
nunc sember imbres,
sempiternusa tenebras blanditia,
ya rematado yo,
un cuervo crascitando en latinajos,
bajé a hablar con mi pequeña siniestra,
avivé mi lumbre por si Oscuridad,
bajase a la hora mi escala con hambre,
cerré la ventana
calculando nada prodigioso me asombrase,
entonces escuché un alarido estridente,
como si raices eternas gritasen
velozmente entró un borbotón umbrío,
de sombras densas como nube de la más cargada tormenta,
cerré mis ojos
para obserbar el inicio de mi final,
mi inocencia no tenía miedo,
miré el espejo sobre mi taquillón,
y quebró brotando un millar de sombríos ojos,
vi mi rostro en uno de ellos,
lucía una piel pálida
y unos colmillos no podía encerrar mi boca,
era el inicio de mi condena
la chica besé en 2006era un vampiro.
Y mi amante fantasma,
es el espectro de su anterior vida.
Förüq a 18-09-2023
XII...
XII
El mortal inmortal renasce:
26 de julio 1836, Alzo mi advenedizo aniversario,
cumplo trescientos trenta y cuatro años,
el Ario Zahorí errante,
he visto llorar dieciocho siglos,
brotar ríos de sangre
la entraña de la Tierra
y mi sed de vida con ella,
riveras y árboles se creen más longevos
que quien habla de puño en pecho,
y colmillo resplandeciente,
tuve amores cual romances
proscritos, como fugaces,
blancos como carmesí la rosa más pulcra,
entre rizos de nogueras
enterré mi secreto maldito,
alguien pregunta si acaso no soy mortal,
hablase entonces apuesta,
si me vences mi condena es tuya,
larga eternidad me crece
en las barbas mi viejo ciprés
busqué los nueve sueños
en frasco de alquimista inmutable,
aquel desliz
me hizo asirme luna tras luna
a un ruego y duermevela
ningún ser osaría tolerar,
funesta historia
que un día en funesta senda nocturna,
se cruzó conmigo un gato negro de ojos sangre,
se paró y atravesó con su mirada abismal,
escuché el alarido
entre hojas me dictaron funesto susurro,
debes ir a la fuente alberga
el bosque umbrío
allí encontrarás a la Señora Hada
Leannán-Sídhe
dueña de la profundidad y toda sombra
brotada,
ella te dará misión.
Deberás ofrendarla
una gota tu sangre
y así tu colmillo
tras tu mordisco,
dará nueva senda.
Förüq y Leannán-Sídhe
XIII
Se deslizaba una noche danzarina,
un invierno deshojado
por entre candiles breves,
aquel febrero que ni un alma
se sujetaba en intemperie
del cierzo traspasaba la carne.
Yo era errante taciturno
quise saludar a mi Luna,
por todo año benigno,
En aquellas callejas
de los Santos de la humosa
escuché carcajadas
y jolgorío una moza
nada pude ver su causa
avancé hasta el punto más alto
de aquel pueblo,
un mirlo azabache
se posó
cerca donde estaba yo sentado,
entonces crascitó:
-Ella vendrá,
en toda aquella obscuridad
observé encenderse
una luz sigilosa
y estridente
provenía de la iglesia,
me acerqué
y su puerta abierta invitaba
a indagar,
entonces observé
una dama
sembrada en vestido blanco,
alrededor una hoguera
se giró
y fijamente me miró,
sus ojos eran de un azul verdoso y el centro granate sanguinoso,
le pregunté quién era
Me dijo soy Leannán-Sídhe
dueña de las entrañas de la penumbra,
sus ojos fijos en mí
me atraían cual sortilegio
irrefutable,
me puso la mano en mi hombro
y dijo seré tu Musa
por toda nuestra condena
de escuchar la noche
en nuestras pupilas;
nos besamos y mordió,
yo sentí mi nueva vida
fluir de sus colmillos.
Förüq y Leannán-Sídhe
XIV
Acababa de entrar en un duelo desolado
recién conocía una soledad maquiavélica
y un silencio espectral,
recíén rondaba aquel abril 2014
mis santas muertes,
nunca me he arrepentido
de aquellos años de juventud auspiciosa y libertina,
bajo premura de confusión y excitación,
me envolvía un gusto
de noches en vela
y taciturna pasión,
incuestionable,
como una teología
subterranea, abisal, y suculenta
aquella materia hermética
pareciera ofrecerme
remedio a mi sed
de rosa de cábala
dulcemente despojada de sus espinas,
el drama humano me sobrellegó,
y conocía plenamente
mi romance con una señorita fantasma
habitaba mi cuarto,
me dispuse en plena aflicción,
a un agradable y fructífero experimento,
me dispuse a destruir amando mi penar,
bajo acorde que acuerdo,
de regresar indemne,
entre delirio y coraje
obtuve luz entre la penumbra
una entidad avernal
me ofreció un deseo,
desvelando ya pedí dos
yo sin saber aposté alto
y pedí deseo:
VIVIR
lo que nadie figura
que años más tarde me encontraría yo
en vacío repleto un 2014 abandonado,
y que mi experimento se realizaría empujado
tras semanas comiendo mis pensamientos,
en pobreza argumental exagerada
me acerqué a mi terraza
y tropecé creo con una maceta
precipitando yo subiendo que bajando
la altura un álamo adulto
casi superaba aquel edificio
se cobró mi deseo que hicieron tres
y hoy aquí me encuentro
más vivo que mi deseo cobrado
Vivir.
De mortal inmortal,
Förüq
XV
Surcaba mi ventana
un plenilunio helado
el año 1900,
Bailaban los murciélagos,
rasgando sombras,
notas y acordes
mi luna sempiterna,
dejé mi pasado a la espalda
un destino precoz,
traté de sobrevivir a lo alto,
estoy quemando pasado,
soy el Ángel solitario,
tratando de sobrevivir
esta vez,
traté de ser hombre nuevo,
ahora que ya conocía a Musa,
intenté tocar el cielo,
nunca otra vez,
el mañana no llueve,
recé que oré a mis castos dioses,
caminé el sendero vetusto
sin retorno ni final,
fui soldado
de la sublevación
de la palabra en desuso,
sólo el ayer
llegaba sobrado,
alzaba mis sones y mordiscos,
dejé mi casa
dejé mis cabales,
enterré mis demonios
en este mundo usado,
estoy elevando mis arcanos
dejando mis memorias ardan
soy ente de otro ente
soy El Ángel
se cortó las alas
despierto,
en amor podrás verme caer
sólo una llave
yo sobreviviré
debido no está vivo
quien habla,
un infrasonido
un velo de oscuridad
volví a nacer
una década atrás
que se comía así misma
como realidad que negaba sus principios,
un día tenue
de luz intransigente
desperté en los ojos mi corazón,
allí te observé
y asumí
me gustaras más
en fe, hecho y materia
que siglos llevaba idealizándote
construyendo tu fantasía
donde vivías
tú y tu estela primordial
mi vampiro Escarlata.
Förüq a 02--08-2024
XVI
Surcaba mi sangre
el comienzo un siglo hacen dos nueves
atravesaba mis veintisiete primaveras
ya acariciaba un lustro que completé mi secundaria
al no ver carrera me satisfaciese
continué mi cauce
de gota que va a la tierra
mi vocación
es sólo sembrar, cosechar y labrar,
agricultura en raíz
de segundo Arte humano,
entendía más a las plantas desde pequeño
que a las personas;
y no solamente por tarea más sencilla,
nací para ser de tierra
y la tierra brindarme su sangre y frutos
de simiente,
esta era mi rosa de fe
de amor agradable y suculento,
sin espinas, aguardaba
centella de amor y gentil calor humano,
años pasaban por mi terso yermo
y un rayo de dulzor
me atisbó el palpitar
tuve noticias de una familia
que compró la hacienda vecina
surcaba un riachuelo de montañña
y su castillo olvidado
perteneció al conde FÖRÜQ
STURMPANCER WAGEN
un día de pocos,
me acerqué a dar saludos a mis vecinos
conocí a su hija
iba a ser pastorcica
de estas tierras meseteñas de Castilla,
un día lluvioso preparé
mi acercamiento a aquella doncella Pastorcica
y en el borde frontera su propiedad
estuve haciendo surcos
de nuevo huerto,
estuvimos hablando
y me comentó
que su sangre y linaje
provenía de las tierras ortodoxas de Rumanía,
una localidad denominaban Constanza,
quedamos es lidiar un juego de adivinanzas,
teníamos que averigüar lo que queríamos
el uno del otro
con mirarnos fijos a los ojos,
entonces ocurrió
el beso inextricable,
sentí hendirse mi alma,
una nueva vida no viva,
comenzaba a afiancarse
para mi eternidad
azogada,
aquella vecina era hija descendiente
de la señora Hada vampiro
Leannán-Sídhe
Miguel Esteban Martínez García
El Inocente castellano
Cantos de tierra:
I
Solitario bogo,
aterido soplo de la montaña,
pastor de tus astros,
torres de nidos de tu saliva,
perfilada tu sombra me acompasa,
mi sayal remiendo
entre sedas
de moreras de ensueño,
olvidos me trepan por enredaderas,
tarde en la tarde mi esperanza vive,
si soñase volaría a tu vera.
Sol este de oro
ciñe mi álamo negro
y su esmeralda araña,
cumbre te nombra
en la saeta mi oscura golondrina azabache,
traerte conmigo siempre
eternidad risueña, melosa
sangre de mis dioses.
Señora tú de silencios
y sepulcrales vértigos,
no amansa mi fosa
la dulce azada de metal soporífera,
carne y cuerpo
mi rigidez de pluma,
lírico trasnochar.
Claro cristal entre paisajes,
ceniza de recuerdo
es ella, recuerda,
aire desnudo fama de estrella
inviolada,
mi musa bella,
un azar flamígero
que no pido ni alumbro,
no espera
ni las aguas de tiempo inmenso,
jamás complacen.
ay día, rosario terco,
deja ya la gloria,
grandeza en amor
se llamó belleza,
lastimada mi carne desvelada.
Gusano soy
que hila su capullo,
tejiendo desde sentir interior,
mi vida en serenatas blancas
levantaré,
su fronda,
inabarcable vergel primoroso,
cuenta mi linaje
alas ignoradas de mi pecho.
no podrán tapar en vida
mi silencio que aflora.
El castellano
II
Terca mi sangre,
tiempo del frío río
inmenso, todo dado en espinas
su rivera,
por ciega neblina bajo
con tabaco precoz,
pienso,
todo he soñado
para el letal lecho del olvido.
Mi temor sorprendido
alega que no existe;
vida o belleza,
ala o metal cansado,
gloria de grandeza, ¿Dónde?
mi tabaco de neblina
ahonda, penetra y surca
la esmaltada silueta de tu figura,
por mi caricia ruda
y el agua afligida,
admirarte yo cual fugaz garuma,
anisado vive el cielo,
nuestra blanca estrella
mineral candente
refulge su luz desnuda,
por vespertino son
de todo lo que tiembla
como abanico de mi pluma.
El castellano
III
El principio estaba en la colina.
Un hecho,
claridad de brea encendida,
o, transparencia de pez de cristal.
Timón enfurecido
que tormenta iracunda tizna,
cuervo en el alma
mi ser alzo, prendo,
mi idea luce
cual hollín de azabache tuviera,
gragea mi voz un crascitar
de mi señor Baco,
persona de garabato nombro a sombra latiente,
acaso opacidad de materia cuidase,
sacrificador mi tiento.
Soneteada su parda sepultura.
falte mi ley, sonará la albilla.
Diablo aguador mi buen luciente;
cordobán, recuerdo de soleta,
no me faltará maceta,
parnaso que le cae asaetado,
cisnes negros,
de apolo,
cuidados como vellón descendía su grajo.
Musario monte yo he sembrado.
yo, pensamiento y porfía guardo,
me los retiemble
el sol lucido,
ninguno estribe
mi mesura,
señora, valerme quiera,
ni peligroso
el tiempo bárbaro se me pareciera.
Förüq
IV
Insondable, la luz
de tu impalpable seña,
guiño áureo al latido,
insubordinado, labrado
en madero de este hierro,
ya dejó de ser infamia tornasola
en ascua de piel borrosa.
Ensueño alado te alzo
mi musa en estridencia recta,
develada, reveladora senda
dictas que afliges voluptuosa
cuan cerilla arrostra mi alma,
rebulle tu sueño alado
de golondrina azabache,
no perturba mi paso
tu luminoso azar encorajinado,
en sones del capataz del brillo primero.
Arde no se colma mi vaso,
al cantoral
fraguo férreo lazo,
indivisible alianza, comunión
de ambos argentos astros,
como entrelazan alba y ocaso,
pura seda mi correr
de atleta precipitado,
arrostró
mi piedra espectral,
tu brisa ya nunca más fría.
alumbró mi sien
el fractal de frágil leño.
Y desveló que todo es y fue
más que un sueño.
enmudecida siembra tu garganta
lamo la tierra boca a tramo,
tu raíz salvaje me toca,
como verde planta a tu corazón invoca,
silvestre y musical nuestra rosa azul canta,
henchido de tu voz voy
mi doncella escarlata.
El castellano
V
oración a la misa del alba,
revuela una golondrina,
esquiva los ramajes
amenizados del fresno,
abre monótona brisa
una caricia de tierra
por el misario cerro,
carrascas afilan allí
sus flores de piedra
para dar sus bellotas,
ya escondida la luna de seda,
aumenta un zorzal su trino,
sube entre rayos de sol
la espuma de un desnudo álamo,
a su raíz un precoz mamón
sonríe al iris de nueva luz,
un grillo chirría su nota
en melancolía por nuevo cierzo,
la encina secular
no pierde atisbo de rigor
en follaje,
como nervudo verde
que no llora,
la retama grita al esparto
que su amarillo impera,
plegaria entre verdades del monte
un nuevo esplendor
canta la paz sepulcral del campo,
como luminaria entre río reverdecido
en tapiz de terruño arado,
aria dolida en arrebol
de sollozo verde,
lento abre su retoño la tierra.
Entre vid de nueva espera.
El castellano
VI
Quiero mantener
mi suerte segura,
como hondas imágenes
en frío lacustre.
Agua de labriego sordo.
eco en árbol de sigiloso azar.
Hombre al menos
en terrazgo seguro
al pie de bandoneón,
clavando cigarra
a su escarcha afligida,
manos trabajen
la melodía
a tu voz morena.
primor en viento
de mi sepulcral prestancia,
tierra o ceniza
eternal mármol turbado
de vida atada a tu vida
y perseverante esencia.
árbol de luz y acento,
revuelo a tu son
el mundo no trasplante.
Dulces sueños
sones flamígeros te aguarden
en su seno.
suelo en miel
de nota obscura,
guerra, oh gran momento,
rizar mis ascuas al viento,
hoja que tu filial enmarca,
verdecido mamón yesca,
invadido por substancia
de tu irisada voz en letra fraguada.
Resonancia de altivos lares,
fecundos...
Llevo verdecida mi sangre,
asaltando el trigo mis ojos,
palabra con sonido
eterna herida
Resuena que sigo en ti
como aromo de flor
y curva pitanza corva,
redimido a la abeja
el avispero ya no zigzaguea,
abre cariño tu senda,
nácar dispuesto y frágil
al candor de mi cóncava vena.
Para cosechar mi pena, mi cruz
y mi condena.
El castellano
VII
Llaneza mi pulcra eternidad,
violácea en mi cabeza,
río era mi ardimiento de espíritu,
en cantos diáfano;
sin voz ni hálito mortal,
estancia mece y alza
sobre estas olas de mar en tierra
y perdurable simiente.
Suelo alzado del vano milano,
sangre que hiendes mis latidos férreos,
agreste consonancia de lares
y esponjados lacustres,
como rito de cristales prendido,
de ababol mi prestancia
y la llama mi hoguera eterna,
mi labriego no más ciego ni sordo,
mis manos trabajen la tersa melodía,
ungido surco de espiga y barrizal,
canto por tierra darte nombre,
que mi filial escancias,
amor, de viento obscuro y guiño como secuencia
primordial, tu sed no escapo, ni la verde parra
gime a tu prado su sombra,
amante vuelvo sin barba, sin vergüenza,
de llanto repaso,
la sola luna en ascua
y su seda de luz morena,
oh, playa y su rivera,
cuántos helechos visten mi trazo,
de una patria sin cabalgar,
cuánta palabra mísera y con sonido,
ser hombre en rebeldía terrena,
alzando flores de difunto,
y lumbres aeternas,
mi morir de ángel ni pronuncio,
conmovido cruje mi esqueleto,
alma de llaga henchida,
acaso otro sueño valía,
tempo y flecha de ágil luna,
vine sin niebla por todo lo que quería.
Destierro cuándo,
como mi jacinto, a tu lado me blando.
El Castellano a 28-10-2022
VIII
Cristal de aire:
Acreciento, voy menguando,
la diosa estela naciendo,
al paso ferviente de tu sola voz,
como un caracol,
en agua destilada, candente
acrisolado esplendor,
cristal de gotas sólidas,
y mi verbo fulge valiente,
cadena sin mi nombre,
otro borbotón sangre fluyente,
que crascita, entona
viví, amé morí y te deseé,
un yo te desvestí
y lamí tu caracola de letra
despacio y rápido
a mi helor
embebí tu éter expansivo,
un cristal que sublima en aire,
amor de zarza a espina,
caracola resistente,
mi pequeña ángel
hiriente , vespertina a fragor
ojos boscajes, tus notas infernales,
cual buque emergiendo
sin océano solo tierra
inextricable para osarte,
d' este abismo llamado verbo,
me visto de capataz tu aliento,
coagula mi aire
noventa y nueve porciones tu nácar por mí
creado,
en novecientas ascuas,
tu vapor y el mío de estrella
que flagran tu sendero de luz,
enamorado tu piel ensoñada atisbo,
cuál no dio fuelle a tus alas,
cuál no te hizo de mi placer herramienta,
mi amada voz,
acompañante
hacen nueve formas,
nueve pilares de Averno,
nueve cerrojillos de hielo,
mi condena y solución para poder conocer
lo que amo, amé y siempre amaré,
en novecientas nueve hojas
que encierra
tu corazón en mi agua´
siniestro caracol
con mi desvelo en hoz.
Inocente no soy,
ni ángel,
ni vendido,
ni por éxito mendigo,
el que no me acepte es su problema,
yo sé quién soy.
Miles dei lumen,
Förüq Miles dei lumen versus littera fagro methafora creavi blandus laetitia exspectare sed ardit.
Guerrero de luz,
en verso arde,
ardiendo metáfora,
crea caricia,
expectante de la sed que arde,
novecientas noventa y nueve hojas
esconden tu asido ramillete
que esconde tu cristal de viento,
hoy es por mí
que empecino
que soy culpable
de alzar mi cenit
en cúspide inefable,
de esencia que no llora,
dicta, que sólo es tu voz .
Pureza en vena dispuesta.
Una asonancia predilecta,
pude servir,
me quedé en tu frazada
del juego
que como todo juego
sólo abre
sólo despliega la opción.
a perder venciendo,
tu voz sólo eso,
musaraña cristalina,
de nácar y espejo quebrado
con mi cruz a lomos avanzo.
El Castellano
IX
TINTA
Transito de la perenne espina,
a la fugaz rosa, y su fantasma azul,
gloria su grandeza dónde;
clavado en la mirada,
labré los aires vino mi verso
como este amor rugió,
y se engendró dentro,
del mundo ignorado, atento.
Cárcel de imagen,
metáfora tal vez,
escudriñar ofrenda pudiese,
cual amparo d` esta rienda,
mi sangre sedienta clama
en el supremo canto,
su garganta, lengua de flor,
y eco de luna semper,
las mentiras sentidas no eran erróneas,
el pobre arte, valorado fue,
duende arcano, que siempre apremia,
y en justicia arrebata,
el amor mejor, y el ascua dolor,
cava hondo y profundo,
quebranto, en pío amanecido,
tantas noches de alba en lo infinito yo te he esperado,
que ahora dejar de hacerlo es impensado,
hay alma florezca, de néctar y sangre, un sortilegio,
como saltarín te picaría,
verso de escudo,
o llama de fuego, y grito mudo,
canta,
este mundo ignorado,
canta la profecía arcana,
amor es respuesta amor es clave,
es llave sempiterna,
el poder de una luz flagrante
y que todo llena,
razón para creer,
oh flor secreta, te llamara,
canta por la belleza perpetua,
hasta purísima estrella,
la noche obscura velada,
sin aguas inocentes,
te añoro más que a la virtud,
ignota, no enseñada,
de tus ojos prendida,
astuta,
canta mi pequeña, oscura ángel,
que mi verso hoy,
no sea ni libre ni blanco,
sea nuestro para siempre...
Förüq castellano Miguel Esteban
DAT ROSA MEL APIBUS
Triángulo de Fuego,
Trigonum Igneum,
regeneración según el espíritu,
el alma, y la personalidad....
Estar en el mundo pero no ser de este mundo,
tu luz me fascina
ilumina mi idea,
el mundo actual
que da la mano
para morderte el brazo,
brilla
brilla sin parar
que nada importe
ni mi mirar,
brilla
allende aguas
ultramares que tierras escarpadas
sé antorcha
vela, faro que tijera
sé amparo en la lucha,
dicha, eje,
arma y coraza
lo que siento
más que un cuadro mi cara,
ilumina mi sendero
esquivemos viborillas
caminan, ilumíname
abajo vivo ciego,
arriba
quiero besar tu mano
mi Reina
gloria at divitia
lago en mi pecho.
Satisfacción que canta,
arde almas,
pero ahora;
necesito tu aire,
necesito tu agua,
necesito tu fuego en mí,
brilla, brilla tu luz para mí,
complétame,
allí al centro del ascua,
quémame.
Soy fénix, vive de tu bondad
no me quemes, sin tu rosa
no me quemes, sin tu boca
abre mi flor,
deja te enraíce,
la caléndula llevo en corazón.
Miguel Esteban Martínez García
VENTURA
I
Soy yo tu tal árbol que rompe del viento
su gemido, tú, ávida y leve golondrina
dócil, que tus patitas pisar no usas
azabache que azur, tu plumilla,
espero mi futuro, quemando mi presente.
Dibujo osadías, y caminos sin final,
si acabase ya mi padecer,
muriendo este, que con vida no quisiera
quedar
ay, diosa, toda trocada, esta tu voluntad
en cuánto me difiere, tu fe otorgada
que firme tu amor yo mostrara,
tal confianza que tu querer me daba
que yo mudanza no apostaba,
no sé en qué ofendí a tu amor
que tan grandioso, así me procura,
si me falta el valor de merecerte
bastarme el del que osa amaros,
y el daño mayor que nace ciego,
mayor es el contento de mirarte.
II
De amor y fortuna despreciado
de accidentes mortales combatido afrento
sentido de pobre campesino, desmesurado,
mejillas de lágrimas floridas,
idas las sombras cuando el tiempo
embiste, nunca habrá aura alguna,
aquí tus ojos, pegados a mis actos,
y a mis ojos de imagen celestial,
rostro tuyo divino, todo consuelo y alegría,
por qué con tu memoria
se recuesta el alma mía...
Y si te nombro noche y día
por qué la muerte va vecina mía,
ausencia y claro huero en latencia,
peor que muerte, es vivir muriendo,
mientras la fuerza de mi desventura
con pensamiento procuro contemplarte
la figura, y en tus ojos la luz pura,
no puedo desplazar tu hermosura
que ni vista mortal puede, si te mira.
III
Arde en mí, la más ilustre parte,
del ardoroso y encendido fuego,
no hay descanso en alma ni sosiego,
tanta gloria siento al verte y admirarte,
cabellos de realeza, mi alma
de contento, pechos de alabastro
oh, sangre generosa, supremo acento,
no divisa el quebranto,
ojos en quien tal fuera, y poder
siento, al bajo, vil, mortal, corpóreo
velo, llorad ojos ausentes, llorar
canto, el desierto, y dolor el alma
siente, llorad ojos tristes,
que lágrimas no faltan en su fuente,
después nuevo aguardiente,
lloraréis, en señal de mi quebranto.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
FINAL
Contenido:
ÁVIDO DESIGNIO
PRIMER ENJAMBRE
NOTA PASIONARIA
LUMBRE LÍQUIDA
SUBREPTICIA
HERIDA DE GÉMINI
VERSO NUEVE
ESTRELLA ESTAMEÑA
TRUENO DE VENUS
A SU MERCED
CAMINO LA GLORIA
SEMPITERNO
SERENIDAD ETERNAL
FUNDACIÓN
SERENATA BLANCA
FLAMEANTE
A LOS VIVOS
Romance heroico Sortilegio sembrado*
RAÍZ EXTRASENSORIAL
A LA SOMBRA DENTRO DEL SOL
DESTERRADO
PANAL DE IDEA:
SIMIENTE DE SANGRE:
AVIDEZ EN LABIO DE FUEGO:
DAT ROSA MEL APIBUS:
VENTURA:
TOMO II --- ENTRE CORONA Y CANDELABRO
ENTRE CORONA Y CANDELABRO
<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<
Alma sin cuerpo, flagrante invierno:
Se deslizaba azarosa
una tarde de mayo,
abriendo pulcras flores
entre grados que blandía
el grillo en su madriguera,
osada se batía una lagartija
en la piedra aposentada.
La tarde cerraba danzando
suspiros precoces,
entre estambres.
El olmo viejo
lucía un tronco grueso
con hueco donde amarilleaba el sol
del día,
mientras la noche jugaba con sus ramas
y corazones de hojas,
ya vencía su sombra
miré su fortaleza
como si sus raíces gritaran
y pudiese verlas
clamando los años.
Te miré sombra
por mi ventana, sonreíste tímida
como si te agazaparas en tus párpados
frente a los míos,
miraste el espejo de mi armario
sólo un día dudaste de tu existencia
y tú estabas, tú estabas tan radiante
como si un aura te refulgiera,
sonreías a tu vida
reflejo en aquel espejo
porque en realidad ya no te encontrabas
la vida te brindó
reflejo,
mi risueña, reluciente fantasma,
que aún ríe y juega con la sombra.
Por ella no tenerla.
Me miraste y tus ojos
como estacas me henchían
la soledad acrisolada,
tu dulce inocencia traspasaba la mirada,
cuántas noches te soñé
cuántos otoños te esperé,
tu alma sin cuerpo,
tu sonrisa tímida, desangelada,
yo sin tenerte te amo,
como sólo tú llenaste
mi espacio vacío
de mi soledad despertada,
te hablo
te dicto
que sólo tú
eres mi invierno que llena mi vida.
El Castellano
Espiga roja sangrante:
Con el filo descarnado
y brillo reluciente
está la espada que severidad,
dirige
blandiendo surcos
en fosas yertas, funerarias.
A lo que su empeño consta
y sucede.
entre adobes y cuchillos calizos
entre cal y tierra férrea,
la sangre del inframundo reverdece.
Quilla de un flagrante monte
que Geríones desplaza,
surcado por el metal
de hilo de cobre esquela nativa
de mis ancestros,
sonaba con el viento
haciendo temblar calaveras
por gramas densas y espigas sanguíneas
en lo alto de aquel poste de telégrafo.
El viento tenía estridencia
y lamento seco como chirriar de gemido.
Digno a desatar quimeras y bestias rectas.
Capaz de dar voz a lo inerte de la vida.
Entre coraje y sentencia
volaba el vilano
en magnificencia del fría aura,
sola como nace la primavera
en una flor contagiosa.
II Hoja:
Allí plantado
como se siembra una pipa
en mitad del abismo,
me encontré, detuve el sonido
entre escalas y cielos soterrados.
con un precoz almíbar
Planté una pila de lluvia sobre marzo,
contestó entre gramófonos la tierra;
de septiembre
una melodía jamás interpretada
y jamás semejante o similar
a haberla escuchado una vez.
Era como un maullido entre gramas
y bocas sedientas de un gato morado.
Como cerrar y esperar que la compuerta secara,
de esa acequia que mi sangre lleva
como desplomar semillas
y aventar espigas granates;
plantado como una sola
de carne y tinta
que la espera viola.
Y frunce su golondrina espectral.
Era un soto de daturas
y ababoles cabalgados,
como un crujir de la mecedora
del linde vago,
era entablar con el alacrán soberanista
quien yo era,
como afilar pesquisas
que caminan yertas
su alacridad helada,
por caballos de fuego
y acordeones de agua,
como elevar el ara
y ver qué desquicia se siembra.
Voy por el tercer junco de Castilla,
y hasta su encina afligida,
entre soturnos lindes
teñidos de cal y canto,
arrastrando errores inmortales,
y sueños desangelados.
Premisa que ardía en un solitario espino,
acampado de sus falanges
amilanadas por vastedades
y simientes frívolas
despertaba el otoño
justo en el carrizo
y mi tabaco fugaz
de antigua brea
que expulsaba su color,
rencilla entre espasmos
y savias precoces del terreno,
jamás dormido,
jamás monótono, despierto,
un caminar y descubrir
que todo vuelve a comenzar.
Förüq el Castellano
Dos sombras
Soledad arregazaba
blandía sus brazos amilanados
en los que recostarse
a soñar la casa en el mar
con procesiones de sardinas
que sirvieran desayuno
con leche de las vacas
dibujadas celestes,
árboles en fronda volátil
tenebrosas líneas de horizonte
como cuerdas de violines
afinando nervios de nubes malvas.
Se querían dos sombras
como evanescer líquido, templado
de rocío por savia y tierra
y su desvanecer,
como flores a la alta espina
sirven su dolor.
Belleza oxidada,
ellas dos sombras
con camino de piel,
abriendo de la noche
gema profunda de lenguas azules,
era un camino el alba
para subir y descender,
ellas luz querían tornar,
vestidas de ásperas ondas
impalpables,
seguras sin obstáculo
eternas,
crispaban el tiempo
y se querían sin envejecer,
fría segura que su alma se iba,
suya, cristal vaporoso
de amarillo viejo,
su entrecejo deseoso,
querían entre noches
de gatos fugaces
por tejados colindantes
que anudaban rayos de luna,
su tristeza era pura
se anidaba en sus cabellos,
seca, entre sus cuerpos etéreos
la ausencia hacía verdad de idea
trasnochada,
su soledad muerta
de insectos ranqueasos,
asida de purpúrea pluma
y lunas enajenadas
con cristales lucientes
en navíos de tinta,
perpetua osadía
de ser luz,
como silencio
de Dioses relumbrados,
y su oro vegetal,
como ásperas rocas
destacadas, cerradas
al molino de noche,
se querían dos sombras
inertes
pero vivas al fuego
y carrusel de estrellas
pudorosas y ponientes,
su quietud sin color,
su amor por unirse
como dos gotas al helor.
Como dos voces se unen
en un solo corazón.
El Castellano
Eco de ayer vestido:
Honrada tibia luz caída,
pasaba y me ungía este sol puesto
una mañana amarilla, vestida de invierno
y su frío azul, encendía mi cigarro
y un humo y un eco envolvía
un hueco que dejó abisal la última helada,
carretas deslizaban las nubes
abriendo el vientre helado del cielo
este Sol tímido de invierno
parecía asustado sin ocaso
ni pájaros fantasmales
que le hicieran nido.
Me cobijaba la sombra de un ciprés enhiesto,
abría las puertas de gramas voraces,
lirios negros franqueaban mi verja
de pensamientos que se amontonaban
en la puerta, rezaba a mi Sol
que no me hundiese la primavera
como si él eligiese esta sequía
que la tierra llora y quiebra sus entrañas
vestidas, el viento era más fuerte que yo,
llevando y sujetando el iris de nuevo cierzo,
crascitaba por ramaje de mi muerto brevemente nogal
de sombra densa cobijando tenebrios,
bajo sus hojas caídas.
Portón de tiniebla, el paso de su oscura raíz,
despertando el devenir
rompiendo el nicho de la primavera futura.
El Castellano
Plubia cordis:
lit et summun canae,
miles Dei lumen,
mea unguis timor malum,
mors erit uxor mea.
Plubia cordis, ardentissime cupere amôris
stupóris, dêsîderium, sempiternusa laetitia.
Diês, carpentum, accrêvî calôris.
Colôris, vita, venerâvî canôris.
Laetitia exspectâre, cupitum nostra.
Ostendi âlae, festînâvî blanditia.
Cropinquus, somnus, versus, littera.
Prôfêcî imus, creâvî blandus.
Bâsium dulcis, aqua pûrus.
Sânô anima, fidus fruor.
Cupidus somnus, flagrô metaphora,
suspirium natura, amâvî ferventis.
Distantia dêstinâvî dedisco côgitâtum.
Volui pûrus, sôlus cordis.
Callis unus, sentido sensisensum.
Fôrmôsa societas, contentum esse vêris.
Ignis, dêlectô noster appetîtus fôrmôsus.
El Castellano
Invernando:
Camino la sierra
y labriego empedernido,
afilan cintas de esparto
y jocosos pinos bordean el monte,
era ella caminaba siendo mujer de húmedas hojas
y gramas recién nacidas
anudadas a la cintura,
era tiempo suficiente
para el recodo de un fondo fantasmal,
estallaba el acre que pisaba
palmo a trecho,
ribazos se despertaban sin alba
dejé un lugar ramificado,
más allá de juncos
y fardos de nueva cosecha,
sin ir más lejos
abría la tierra vieja invernando
su ombligo de invierno
la carrasca de hoja inmoble afinaba
sus dientes de hojas
que el viento pasa y respira.
Campo lejano por cualquier parte
sentir que dejaría plisado
por encontrarse con tus ojos,
pecho de paja nueva silo dormido
de hondo surco y barrizal,
oscilando el filamento de un severo cardo,
entre caracoles mutantes, judíos blancos,
dejé mi traje a reverdecer ortigas y orugas seculares.
entre la jóven hierba y el rojo trébol
del sendero,
recojo mi árbol del mañana y me marcho.
El Castellano
PANIDA DEL AZUR:
Saeta de prisma,
enardecida amante solar.
Reminiscencia en umbra
alegoría de carnal flor.
Lejana entraña de hoz
letanía viste que exuda
su sátiro perfume.
Salmo de noche,
voz mitad alma la tuya.
Elogio de estambre
¿Cuántas voces acallaste?
Eufórico vientre ardiente,
soy yo hacedor de luna fija;
claror que fulge, fragua
estertor verso solitario.
Este será muro de mi alma
con enredadera de torre y almena.
Dejaré mis versos
en oscuro parral,
es hora vacía mi casa
huí, dejé mi alma con mi gato,
salí por gotas de lluvia,
las más frescas,
las primeras caídas.
Mi alma salió en mi busca
habló y preguntó
a la araña de mi patio,
cual dijo estaba tejiendo
digna tela su visión no pude cazar.
Preguntó al caracol:
-Al fondo ´
del verde a la derecha puede estar ,
allí le encontró
tumbado en la grama
hablando con una malva
estaba pidiendo algo de azur brillante,
¿Dónde estabas ente mío de alma?
Te extrañaba,
Fuí por comida para tí,
-No me dejes más sola,
sin mí no tienes voz
sin ti no tengo vida,
ni la rosa en cruz su despedida.
El Castellano
Callar del ascua:
Este bregar me cubre
del que vengo,
un sol de esparto,
un ocurrir del que venga mañana,
nubes acolchadas me aguardan,
por febriles heladas,
horizontes sin guardas,
ni francas tapias
deshacerse puede,
era una luna de trapo,
que espolvoreaba la tierra,
su belleza se acostaba
en dunas de plata
mientras su alta ojera desplomaba,
su insomnio de infancia miro
y dime,
por mi desnuda imagen
que yo cerraba mis ojos
se acostaba a plañir,
tu transparencia me clavas
como ferviente yunque helado,
las espuelas tuyas corren sin caballo,
intranquilos ceños
me conducen por muros
y celdas de sosiego.
Cuándo venceré en este diáfano cuarto,
donde las sombras caminan,
y las voces en letra difuminan,
esbozos en coro de grillos,
en este lecho,
mi nicho donde me acuesto.
Confín de vagarosa imagen
que despierto,
cada vez débil,
cada vez más encerrado,
surtidor de fantasmas
que arregazan era mi dolor,
esperando para brindar con el enemigo,
humo oxidado sin ojos que duelen.
golondrinas dulces balancean mi día,
día entre sotos sin perdices
caminando mi patio;
fabricándose en él escarchas azules
con todos los rostros de diciembre.
llave fue, cincel encadenado,
lenguaje del ser claveteado
en recuerdos vanos,
polvo de poema parlotea
y dirige a callar hogueras,
fuerte raíz es palabra,
un calor retumba,
sobre márgenes de ríos sanguíneos,
reposa sobre la música su alba,
ventiscas que trae la noche,
alejando, alejando los sueños;
despertando el pasado,
abriendo luces en osadía
a quebrar el tiempo.
El Castellano
Albo espíritu azogado:
Abrí las rojas puertas
del fantasma de mi corazón,
despertaron grises leviatanes
como agujas sin cabeza ni redil
era él un fantasma puro, impío
un último respiro alzó
a mi cabeza,
y caí de rodillas
a otro mar
a otro mar
el suyo sin calma
ni espumas purpureas,
abrí esta vez las ventanas de mi pecho
esta vez como si alguien las sujetara
en mi propiedad
de fría carne,
un pulmón marchó a una rivera,
el otro perdido marchó
a otra con mi espíritu,
quedaba mi cuerpo como frío, desierto
páramo sin espacio sujeto
donde anclar señero de luz
mi pecho, el otro espacio
de mí desierto
oscuro como opacidad
de noche de soto sin luna
sin luciérnagas del cielo,
sin fusiles que clavan su plomo,
sin faroles ni lucientes
provocados encumbrados
como este vacío que ya cansado
no más habita mi espejo de alma,
mi pecho partido enraizó
la mejor flor que la vida
pudo darme
como espina para clavar la espina
de mi vida y asir
cielo y tierra en marea
de primaverales caricias
albos ojos fijos
en auroras que marcan
al violácea arpa de mi despertar
creyendo sus ojos un sueño
para, habitar.
El Castellano
Amante fantasma:
Hablo desde esta sombra
que me habita,
un cielo noctámbulo me cuelga la caricia,
mi vida que jamás se consume en desquicia,
rajo este sol que visita tu retina,
espacio derredor acaricio
en agujas que te cuelgan el techo,
flor con flor brilló nuestro corazón,
una luna tejida por su alarido
a galope del viento en mi mundo
te alzo en piel de piedra
crepitando tu rayo que me cuenta
de tu vena y su carcoma
muy lejos de la tierra hilvano tus ganas
con destello furtivo
de sed de abrojo
cambio tu vida a mi antojo
sí tu pecho en rojo,
sabes quien soy
soy fantasma que sólo tú ves
flagrando el viento a tu merced,
háblame del puerto y su negro sentimiento,
háblame del cuervo,
de tu alma sin cuerpo,
ven, ven a mí
veremos el amanecer
en la sangre de mis ojos,
acabaremos con el destino inerte
que cruza mi suerte,
ven de nuevo quiero verte, apoderarte,
alimentarte de mis rosas desangradas,
es por tu roce que mi sangre bulle
y jamás de ti se esconde
te siento en cada silencio seco,
en cada eco de oscuridad
que a mi espíritu sucede
cómo no tenerte
si por tu idioma me florece el verso,
piel con alma simiente del atardecer,
umbrío cae su sonido;
Tu cuerda que afina el grillo
y cigarra con su guitarra
acantonando nuestro oído,
es por ti que mi suplicio cae investido
fiel a recorrer tu segunda vida,
ninguna mentira me dijiste,
el miedo ahuyentamos juntos de la mano,
la noche llega de nuevo en tu pupila
de esferas yertas
y sus paraísos de hielo
que cruzo al verte
quiero que me sigas sonando
eternamente la noche
para todos los siglos
que empieza nuestra condena
sintiendo hoy la lluvia bajo tus ojos.
II
Hablemos hoy en plata de tiniebla,
oración de tu sangre yerta,
cumbre febril de hoguera quieta,
ese cuervo descubrirás su poder,
yo iré de tu mano,
manso tu poder sembrado,
aunque no entiendas
no preguntes por qué sigo a tu lado,
el puerto negro te llamó
y sentiste el poder de tu pasado,
nadie permitió que desembarcaras,
capaz eras de romper la cuerda
que sostiene las dimensiones,
ni vivo ni muerto
niega tu osadía,
cruzaste la puerta de oscuros lirios,
tu amor a la flor
al creador conmovió,
resoplo tijeras rojas
en grises ideas,
desenfundo mi filo,
crepitan arduas espadas,
respetaste la muerte y ella
respetó tu vida.
Crascita tu lozanía,
entre forrajes
y soles pudientes,
desmenuza tu silencio,
clavando yunques
de paredes granates,
el peldaño irá cuesta abajo,
cabalga tus lindes despiertos,
libérate de insectos que caminan,
turbios azares me cuentan
de tu devenir rizado
al filo de la navaja.
III
Anochecer de mi vida,
en tu patio de la araña,
rezogan clarines esquivos,
yo soy lira de alma consumada,
vicisitud ensimismada
de tu azar en semblanza,
vivo flagrando tu azada,
pulcritud entre cristales rotos
esa soy, bruma en tu noche,
claridad en tu día
luz de cada siembra,
arena del tiempo
enclaustrado,
vine deshojando recuerdos,
hoy me diste voz,
no seré yo tu perdición
sino el camino a tu salvación,
viviré mordiendo tus rosas
que desangran tu amor,
liviaré lo liviano,
afligiré temor al miedo,
seré aliento perdido
descubierto,
te abriré mi reino,
las escarchas serán los colores,
viviré besando tus flores,
limaré abrojos nacientes,
serás estaca del destino
servir a tu alma sin nombre
me alumbre,
camino de mis flores desgranadas,
sangre de tu reposo
mi amada espina del señor.
Förüq
Yo reposo despierto:
Danzo con el Diablo y bebo sangre,
soy mío y de la sangre,
sirvo muerte en vena cava,
ven a mi reino que no se acaba,
soy ente
en hueso de muerte,
vampiro de honra y muestra,
por ese colmillo
la madera quedaría
en yunque de calcio,
tengo novia y qué
otros se apropian de una lombriz con mandíbula,
la sangre me llama
como cuarto oscuro sediento
de una vela,
hoy por mí
mañana por mi sed yerta,
nadie me alcanza
con mis alas oscuras,
de azabache de noche
enterrada,
me encumbro de lo vivo
porque soy
señor muerto-vivo.
II
Rompo saco los ejes
de esta imaginación en campana,
yunques despiertos me clavan
que llegó mi momento,
taciturno lustre oxidado,
alas en bronce agujereado,
es por mí es por ti
que dicta este haz, apolillado,
polvo en el viento
sombra desterrada,
el alma de un cuervo,
un granate dirige esta mi sed,
hasta ser color de ayer clavado,
al limpio, seco, duro faz ensartado
cabalgo que avanzo
y sombras me acompañan
esta visión serena, opaca, desangelada,
siendo directriz fusilada,
que late el cuello de la penumbra,
cuando oscuridad llama
estoy sembrando objetivo
de mi postrada calma.
III
Tiempo que se oxida
en este vilo,
eternidad azogada
en negras tijeras,
es el tiempo
de mis murciélagos emergiendo
de las sombras y su madre,
se estira otra primavera
por mi avenida,
me mordieron
y no me arrepiento
de mi nueva vida que tiento,
oscuros silos me acogen
donde sembrar alaridos
de vidas traspuestas
a mi fría caricia,
soy ente de otro ente,
mi sombra me quiere,
yo la digo que un día la alcanzaré,
que muy lejos no vaya,
avanzo que trenzo
el tiempo de mi suspiro helado,
para no tener alma
ni espíritu de hielo,
sólo una sed de vida
por repletar,
de un horizonte al hierro
encontrado,
de una arteria
hago río de sangre
en mi adentro.
El Castellano
Förüq breve recopilación,
Hablo desde esta sombra
que me habita,
un cielo noctámbulo me cuelga la caricia,
mi vida que jamás se consume en desquicia,
rajo este sol que visita tu retina,
espacio derredor acaricio
en agujas que te cuelgan el techo,
flor con flor brilló nuestro corazón,
una luna tejida por su alarido
a galope del viento en mi mundo
te alzo en piel de piedra
crepitando tu rayo que me cuenta
de tu vena y su carcoma
muy lejos de la tierra hilvano tus ganas
con destello furtivo
de sed de abrojo
cambio tu vida a mi antojo
sí tu pecho en rojo,
sabes quien soy
soy fantasma que sólo tú ves
flagrando el viento a tu merced,
háblame del puerto y su negro sentimiento,
háblame del cuervo,
de tu alma sin cuerpo,
ven, ven a mí
veremos el amanecer
en la sangre de mis ojos,
acabaremos con el destino inerte
que cruza mi suerte,
ven de nuevo quiero verte, apoderarte,
alimentarte de mis rosas desangradas,
es por tu roce que mi sangre bulle
y jamás de ti se esconde
te siento en cada silencio seco,
en cada eco de oscuridad
que a mi espíritu sucede
cómo no tenerte
si por tu idioma me florece el verso,
piel con alma simiente del atardecer,
umbrío cae su sonido;
Tu cuerda que afina el grillo
y cigarra con su guitarra
acantonando nuestro oído,
es por ti que mi suplicio cae investido
fiel a recorrer tu segunda vida,
ninguna mentira me dijiste,
el miedo ahuyentamos juntos de la mano,
la noche llega de nuevo en tu pupila
de esferas yertas
y sus paraísos de hielo
que cruzo al verte
quiero que me sigas sonando
eternamente la noche
para todos los siglos
que empieza nuestra condena
sintiendo hoy la lluvia bajo tus ojos.
Förüq
II
Tumbado el horizonte
se acuesta mi ilusión,
este mundo arde en un verso,
la decencia queda volcada,
la gente se pierde en el alambre
que sujeta el verso,
mirada a la tijera
y que suene la campana,
todos mis sueños quedaron amados detrás,
yermo el terreno mecía un alarido
por la tierra que no estaba muerta,
vuelo sin suplicio dormido,
la acequia mi sangre lleva,
pierdo el control por quemarme con su luz,
resumen de lo vivido en la esfera de su retina
más que un crujido de mi ventana,
al viento le pido me acerque su latido,
camino por fuera del límite,
anudado el tiempo y sus cuchillas doradas,
sol tras sol, día tras día,
todo lo haría para que te quedaras en mi vida,
graznando viene la noche
por el círculo dibujado por la luna
se cava la llegada del día,
desde el lugar que yo amé antes,
te escucho gritar,
la oscuridad me sostiene
con su manto templado,
vuelo al alfeizar,
tu habitación muerde mi pupila,
el tiempo me vio nacer cuervo,
jamás rendido desde una torre a otra
exclamaba el perdón de los Dioses
por alimentarme de sangre,
llegada la hora
que luciérnagas cuelgan noches en los robles,
se abría el reguero de mi sed de abrojo,
la araña tejía su cena,
yo te esperaba como cada noche,
los minutos derretidos en mi colmillo,
granate albor se deslizaba por la tercera campanada,
tibio, parco, sumiso, el sentido,
se vencía mi sed de nuevo,
concluida la estampa de la sombra,
que araña cada grito en su cama,
danzando mi calma.
Hoy no será una noche cualquiera,
se prende la hoguera,
la sombra me abraza cayendo de nuevo el sentimiento
yo no me acuesto,
limo mis nervios con acero,
la lluvia canta en mis oídos,
será otro amanecer violeta postrado,
mírame soy el alba de tu amanecer
hoy no me verán perecer,
mírame voy por ti.
Soy förüq.
III
Estupor nacido
tus brazos no están lejanos
a través de los tiempos
todo lo que siento
es un ramillete de estrellas
esperándote en la cruel avenida
de ángeles estrellados en sus caricias
puedes verme caer en mi subrepticia
vida que para en vivo
y me deja verte
resumen de lo vivido
cuando la noche comienza a sonar
yo vengo por el camino de las espinas
hoy que no se bendiga
me mantendré esperando
con mi soledad por ti
ecos de un tiempo
que se desvanece en el vértice
si ese por el que colgar mis ilusiones
gana el horizonte
yo era más viejo a la entrada
de las nuevas visiones
yo cambiaba el tiempo
en la hoguera
al parpadeo estaba besándote
al fulgor crepitando la estrella
en amor latidos sordos de penumbra
me cuelgan las pestañas
todo te lo di
y te di más que nada
me enraizan las malvas en mi nicho
hoy seré yo quien muerda tu cuello
al son de la luna seré el vampiro despierto
a través del tren de la noche
atravieso zarzas y cardos
hasta llegar a tu ventana
el azabache es llorado de nuevo
queda tu corazón de cuarzo
la noche se mueve
mis grillos cantan un réquiem por la flor
se despierta un cuclillo en amor
eres mi fuerza, eres mi hombro
me deslizaré en tu cuarto
cuando las sábanas arropen tu cuerpo
y yo beberé de ti el sentido
hálito de vida en hierro
esta noche de primavera
que corría hacia atrás
seré espectro en oración
hasta llegar a tu puerta
y devolverte a la nueva vida
tiempos negros me trepan
cuando su eco sordo
baila en mis pestañas
me fumo un cigarrillo
a la hora que lechuzas despiertan
se oye el resquemor de tu ventana
mis colmillos brillan
tú dormida sientes frío desde tu cuello
a tu sentido
visiones de tu nueva vida
te entran despiertas
y yo ya no estoy en tu cuarto
por las violetas nocturnas
recorres la grama de tu patio
comienzas a explorar tus nuevos sentidos
y escuchas en tu cabeza
bienvenida a mi mundo.
Förüq
IV
Resueno
en el borde del papel
la condena dilecta
que marca un futuro
en subrepticia subyugada
a la luz vuelta oscuridad
del alma deseos de sangre
que jamás se cumplirán
solo la sed de vida por gastar
besando en la noche la sed
de vida ganar
asesinando creencia,
aliento y latido
en la oscuridad vuelta luz
un silencioso lugar
sólo el latido escapó,
el espejo no refleja
lo que reconozco
y mi vida va quedando atrás
solo tu mente atrayendo
para sentir el aliento.
Deshaciendo este frío
hojas y hojas de pensamientos
van cayendo
cuando me paré a mirar tus ojos
que ahora no puedo borrar
ni en oscuridad.
Te voy viendo llegar,
tu calor y corazón latiendo
estáticos dueños
de su tejida existencia,
te veo en paciencia
y me voy adueñando de tu pensar
mas que sangre
quiero cerca tu vida
para yo sentirme con otra
que hasta alma tiene,
y se va desgastando el camino,
los pasos trazados
se vuelven ilusiones.
Un día derretido,
el segundo quedó en vacío eterno
sin manipulación
de un ser superior
no puedo ayudarme
en este frío y vacío espacio
cada noche
deseo sentir tu amor
algún día
para siempre.
Förüq
V
Avanzo despierto
las sombras por carretera
del mundo inerte
que vive en la sangre
por brotar yertas espinas
grazna el cuervo del lugar
y los altares gotean
sangrando murciélagos
ojos ausentes de sus ojos
que juzgan en su mentira superficial
qué necesitas
cuando todo suena a final
y el circo de la sociedad mece
y teje tu actividad
rojos al mirar
guerreros del abismo soñados
no cielo para vivir
eterna batalla espiritual
del interior de la tierra
llueve de nuevo
nubes se derriten
plano elevado en vida
único libre de acto y pensamiento
al océano de hierro y construcción
solo un deseo que se pudra en albor
y el resurgir venga
brillando sangres
mas lombrices maldiciéndose
por haber acabado su hogar,
desaparece y viene la oscura noche
a pesadilla mece el sonámbulo devenir
de quién me habla en mi cabeza
diáfano cuarto donde se clava
el sembrado silencio
donde el respiro cuelgo del techo
crujiendo paredes el sentido
me nubla los ojos
hay algo que me llama
es el hambre de la caza.
Förüq
VI
Iba la tiniebla bajando mi escala,
iba vestida como florece una roca
de anchas y hondas calzas,
desertora de la mundanal zozobra
que me acusaba,
bajaba y se preguntaba si la luz estaba con hambre,
entonces abrí la ventana y apareció su madre,
azogada, cansada de ocultar la luna,
abrió sus oscuros párpados
y una espectral sonrisa se dibujó en su cara,
para decirme: -Esteban su Sol ha muerto.
¿cómo?
Entonces encendí una lumbre,
y lentamente devoró aquella madre oscuridad,
mientras yo escribía una elegía,
posó mi ventana un cuervo,
que dijo: -Noche siempre.
entonces un vil recuerdo de mi Sol
cruzó mi mente,
yo que le creí invencible
ahora la luna era una esfera negra,
un espectro se colaba por mi ventana
era una mujer sembrada en sábana,
me acarició el hombro con su manecita helada,
ella que dudaba más de su existencia
que la propia duda,
entonces miré mi imagen en el espejo
y la imagen me devoró el rostro,
ahora lucía una piel pálida
como la arena
y unos colmillos que atravesarían la madera,
era el inicio de mi condena.
Förüq
VII
Mi polilla desvencijada
nace del espejo que crepita
una boca de esfera y su artificio,
revoloteos en torno a la bombilla
que más quisiera ser ella la estrella
que te atrae
tu noctámbula sed
de espinas blandidas,
un viento lunar se reposa
en mi ventana,
siega del mar oscuro
que todo tiñe de malva nocturno,
hoy estoy aquí
ante ustedes cigarros
para latir
y que vuestro color
sea expulsado,
recibo que acuso
ponlo en mi pierna
caminaré el infierno
por si consigo pagarlo
con mi sangre algún día,
serrana se torna mi almohada
de su musgo y lozano rostro,
por el canto de este caracol
que ya no late se quedó seco
en su intento,
es una luna menguante
y su aguacero litigio áspero,
un iris y un prisma lejano
es mi hombría un surco
en mi jardín de cementerio
por el estío rígido
y sus cristales de hueso
de un sol
que le enfadaba su luz.
El Castellano
VIII
Seco y duro, seco y umbrío,
corría el linde quieto
por la arboleda despejada
daban las tres y treinta
de la madrugada que se marcha
por oscuro diván de la sombra,
un espejo tímido sonaba,
el reloj paraba,
con un grito de estrella,
su alcoba fría en la que despertaba,
no quedaba viento de palabra,
ni pensamiento ágil que en eco no quedara,
lanzó aquel espejo contra el suelo,
y rápidamente sangró un borbotón de sombras,
se abría la noche y sus quimeras despiertas,
brotaba de su ceniza de pulmón,
el irisado que la oscuridad clama,
quedando para siempre
su alcoba fría y vacía,
sombra de aquel que sonaba una noche
que ya escapa.
El Castellano
Desde que vine a vivir:
Imperios de ojos cerrados:
Páramo del verso solitario, decapitado
buscando el encuentro
y su soledad que mece riza y concluye
momentos de la fuerza universal
menú de la disponibilidad de vida
mi lluvia sube redonda tu cara perpleja
podemos salvar lo regio del reino que cae y vuela
soy uno, rey de sí mismo sin atisbo
desde el fantasma que vengo
todo crecía ardiendo
no tengo miedo a su pirámide
ni su ojo absorbente de mí mismo,
tú piensas tu resguardo
en la radio hablan de nosotros
te incitan su teatro de vidas manejadas
el amor a la flor me lleva,
cabalga mi iris consumido
a lo onírico de mi conciencia
Orando por mí mismo
mientras muero quiero dejar absorto el tiempo,
agujerearlo, estirarlo, romperlo
en la rebeldía que asesina la vida material
inconcluso en este mundo
no puedo volver eternidades atrás
deberé guardarme a mi existencia tejida
pero sin asumirme o doblegarme a ella
nada que negar en silencio seco
nada que defender
solo una parte soy del eslabón
nada de mensaje
nada que decir
nadie a quien impresionar
es mi vida nada más
puedo empezar mi historia de nuevo
por mis amores típicos
de ser humano insignificante
nada que arder, nada que cambiar
todo puede suceder,
los errores no se pueden quemar
a quién le importará
carnes pensantes me dan igual
el Juez Supremo me dirá
a mi Conciencia de ser humano
le hago un templo
la verdad compañera sin ti
buscando más razón
del amor del Sol,
en comunión sangrando lunas
en armonía de esferas de años fríos
vívidas estrellas que todo lo imaginado
viene de ellas
hasta este astro apagado en vida
que arde por dentro
su ser llamado planeta Tierra
sabes que puedo
pero no volver de nuevo.
El Castellano a 09-03-2015
Siembra del pensamiento:
Asustado no estoy
el miedo perdió su cobijo
los dioses de mi cabeza
reinos de su locura
inhabitada, extensa,
auspiciada inteligible
puedo bajar por el cansancio
escribir un mundo muerto
creciendo, buscando verticalidad
en la sabiduría de mi verdad
ausente el día desde mi hogar
busco lo inconsciente del sueño
que pierde esperando
esas profundidades del hálito de vida
por despertar la semilla
de la sembrada humildad
qué solo yo veo y me basta
piensas que estás salvado
mentes blindadas
en la luz de la conciencia
unificadora que dicta
el retorno al único origen
voy escalando estas nubes
de mi mente
considerando brillos los sentidos
costando y pagando el pasado
tiempo que despierta y roba el sigilo
caminante de la sombra
grito a la mente que me habla
pudiendo florecer
una y mil siglos más
la bruma teje su limitada ascensión
que subyugada y difuminada en la sociedad
material, empedrada de su cementerio
llamado hogar basado en la mentira
el cerco se estrecha ahorcando al gobernante
del aire
y los ineptos millones de ausentes
pájaros voladores que creídos pensantes
ven como los dirigen
sumidos en directrices de hormigueros
y el libre tiene la cabeza a líneas
de horizontes superpuestos
en laberintos de lo perfecto
que la elevada conciencia
te tiene de paraíso en lo insignificante
que marca su autenticidad
y se hace risco en la eternidad.
El Castellano a 09-03-2015
Desde que vine a vivir:
Ascua irisada al tacto,
estoy bailando sobre una estrella,
todas las cosas que vienen ahora,
en soturna claridad apagada,
hoy es el ahora,
mañana es para siempre,
mentes acristaladas
en espejos que les reflejan,
rompo mi sumisión particular y generalizada
a esta realidad mecida y dirigida en el ojo
sí ese de su escuela, en seis mil millones
de mentiras que caminan,
todo lo visto quema mi retina,
por el ojo de este cuervo
el tiempo ya no me puede sostener,
volando lejos donde la mente alcanza,
no tengo creencia que estos tiempos
serán mejores,
me estrellan sus filos hirientes,
entre lapsos de gentes
al parpadeo me venzo,
hoy será vendido al postor rendido,
extasía en metal prendida,
todo lo que pasó:
Estoy soñando
el tiempo que cerraba mis ojos,
retales que cerrar y su olmo blanco,
su jardín azul, su fuente de cristal,
nada desvanecerá al Miguel sin alas,
seco de hoja de otoño
no me llorarán ni mi jardín azul de caléndulas,
ni mi acristalada fuente,
ni el olmo que no es mío ni su blanco
será mi aura intransigente, seca a morir,
sobre los años avanzo,
yo soy el Sol,
lluvia cae de nuevo este acre me cuenta
algo para tu entendimiento,
cruzo los cielos muy alto de nuevo,
soy el humo,
yo soy la piedra que te habla.
El Castellano a 09-03-2017
Guardería de estrellas:
Ronquidos del mal dormido
y su visceral entrada,
quiere abrir la madrugada
guarderías vacías
de los gatos que cuelgan las estrellas,
inaugura el oscuro vivero
su cultivo de alas oscuras,
la noche cierra en valse,
su latido desnudo
que la penumbra sostiene,
aquí en el margen
del infinito horizonte
me cuenta la saeta de su sed de cielo,
oiga sombra desterrada,
encuentre mi latido nacido
esta noche que tus hermanas
se alzan bajo esta luna de hueso,
todo dibujas lúgubre
el color muerto se te descubre,
desde el cielo a la tierra
bañas todo yermo,
violeta horizonte que se retira
quedan sus mil fuegos
luciérnagas que al alba morirán,
noche nadie te quiere entender,
solo los faroles y fusiles
iluminan tus venas negras de oscuridad,
tú que sólo ciegas la luz del astro,
arrastrando su luna
con correas tiradas por los trescientos
caballos difuntos,
jinetes del tiempo me avanzan
la compostura,
muertos se enfrentan
por mantener su ciclo eterno
su espuela raspa el hueso,
la noche que cabalga con ellos,
corredores fantasma del viento,
oscuridad que no entiende
de maldades del hombre,
miro todo bajo la noche en mis ojos,
solo sombras caminantes y figuras
se forman en su prisma de aberración
sempiterna,
apuro mi botella
esperando ahogar esos fantasmas
de mi cabeza que suenan estridentes
con sus voces,
es un caldo malva de tristezas,
fosas de mi pensamiento
que abren al caer la noche,
enterrando lo vivido al día,
afilo estas mis venas,
esperando brille mi carne
y esta luz de vela se haga fuerte
y toda abominación espante,
todo avanza deslizando su hueso
es a esta hora sin el sol
que mis pesadillas
toman voz y materia,
puliendo este escarabajo de oro
me vera el devenir eterno
hasta el crepitar descansado
y su cruz de nuevo día.
El Castellano
Acuchillada osadía:
Descendiente fulgor entre grises sienes,
humores de tierna fontana precipitada,
es mi jauría de estrellas que la sed
vence, conforma, infinito panal ahogado,
que vence y me vence,
este granate frustrado avanza
su extasía de cristal,
forma y conforma un lustre yerto,
ardiendo entre cerillas
de momentos intransigentes,
me proclama mi verso
entre manada de lobos
el padre del lobo de hierro,
aullando su temperamento de metal,
entre sierras madres de ríos dulces,
y de florestas destapadas,
yo tiempo, vencí al doliente tormento,
entre clavos y yunques despiertos
clavé mi aliento,
soñando que te soñaba
se alzaba mi tiento,
acaso yo no estoy durmiendo,
necesito la superficie
de los guerreros alzados,
represalias de caras muertas,
salta, salta mi abismo,
este es el sonido de mi escopeta de cristal,
esta clase es de fantasma,
vivo si yo escribo,
parco, tibio mi Dios de mis Dioses
solo entre estas cuchillas de gentes,
inmortalidad asolada descendiendo
entre sombras de oscuridad madre,
cuando todo indica
que la oscuridad te supera,
no hay soledad asesina,
porque me gusta hasta mi cuerpo,
en este otoño que los ocres
lucen el suelo
y llega el reverdecer del cielo,
en pie llegó el momento
y atravesar este viento todo lo que siento,
hasta ser de la vida
el victorioso esperpento
que acuchilló su osadía.
El Castellano
Luna trece:
Luna plateada de mi cielo,
en las noches
voy a tu encuentro,
pero te escondes
entre bloques
de hormigón y cemento.
Quiero verte,
pero incluso te escondes,
por las violetas ramas.
Mas los dragones,
del cielo sonámbulo te acarician.
Cielo obtuso,
de sueños fluorescentes,
tú, de color líquido,
solo templado
con miradas intermitentes,
por el tiempo de espera angosto.
El murciélago baila
con el colchón de tu luz,
rasgando sombras,
para reposar siendo una más.
Oscura nebulosa de tu vítreo trasluz dime,
por qué te siento incluso estando solo.
flores opaco reflejo
de luz violeta
incluso de noche;
artifficie luzzae.
Lucero de ciudad,
rompiendo la obscuridad.
La noche se detiene
para sentir que estás conmigo
otra vez más,
recuerda
que tus ojos tienen sangre
recuerda el viento
que aúlla mi nombre
recuerda la luz que tiembla
y cruje la noche en las pupilas
recuerda que me hablaste
de amor en el tiempo
que cae muerto
que pactamos con el hielo
la vuelta del invierno,
recuerda cada latido
de oscuridad
que llama a tus venas de humo
recuérdame en la eternidad del beso,
en cada rosa que robe tu cuerpo,
recuerda que vivo para ti
dando voz a la soledad asesina,
la flor vive soñando
que fue mariposa y abeja,
vive durmiendo la semilla
enamorada de la tierra
para despertar
y enamorarse del sol,
clávame estas nubes de sangre
en el hierro de mi destino,
se me negó la luz
encadenada a esta tierra sin cuerpo,
solo tú me sientes
en este camino
que no lleva retorno
solo espiral anhelada de renacer
el tiempo ya no nos puede sostener
camino buscando el frío
en este calor que quema el alarido,
te encontré perdido
hoy vives un amor
que sientes soplándote al oído,
en la puerta del infierno caído,
te casaste con la luna
que reinaba en tu corazón,
al viento le diste voz,
a la lluvia la nombraste
lágrimas de mi ayer,
le diste ojos
a la sombra para mirar,
la espina caía herida,
la caricia retornó a las polillas,
la vida marcha deprisa
cuando abras los ojos
ya todo habrá cambiado
solo encontrarás que seguiré a tu lado
aguardando tu otoño
y la caída de tus hojas,
esperando que seas mi acompañante
en los siglos y milenios
que nos condenaron,
encontrarás esta sed del cielo
en cada silencio muerto,
en cada raíz
que grita en su tierra
toma de la vida lo que quieras,
siembra tu aliento
en cada tierra,
tú todo lo tienes
yo solo soy una fantasma
que sólo tú ves.
El Castellano
Libreta:
Podando recuerdos para volver a amarte,
dolorosos detalles caen y vuelvo a desearte
ella mi rosa que llama al frío, pero resiste
cantando a la víspera del invierno triste.
El ocaso del tiempo que la dispara ya se disipa;
gota de rocío que se evapora con el sol que visita.
La sonrisa que resplandece sus labios besa
al encontrarse con el te quiero el beso que espera.
El fuego del deseo se hacía con su compañía,
en la que besos y caricias recorrían su fantasía;
De deseo en deseo transcurrió su vida y su anhelo
de cuidarla para no perderla nunca y soñar despierto.
Con su campo de derrotas y victorias en sus sueños
un nuevo insomnio cabalgado en sus recuerdos;
solos en el encerrado mar del amor no demostrado
su amor quiso ser fuerte y no caer olvidado.
Soledad ¿qué pena tienes?
Que oscureces y nublas mi pensamiento.
¿Qué quieres de mí?
Que me maltratas sin descanso.
Noche lúgubre y umbría.
Contemplando mi cuerpo flameando en la penumbra.
Pasa mis nervios, con gozoso frío y brío,
El arco siniestro de lunático violín congelado.
Los fantasmas de mi cabeza cantaban
Con delirios de agonía mi sinfonía,
Hiriendo el ansia mía,
aumentando mi ira cada día.
Caminando por el sendero distante
del verso asonante sin encontrarle,
serpenteando por la arena de tu piel;
Escribiendo un te quiero
mi mensaje con un beso
del paraíso atrapado en lo escueto
de un terceto que ya no es.
Camino por tu piel donde me perdí
me encontré con el placer al que serví;
Allí una flor con una nota: hoy te sentí
y volví a caer en la rima tonta de un sin vivir.
Bajo aquel árbol, bajo aquella sombra enhiesta
justo debajo de aquella piedra y ladrillo
con aquel cristal roto; espejo muerto,
encima de un puente con un ruedo de arena
en obras esperando, la semilla de alquitrán,
esperando
que aquel árbol nunca sea sepultado
por asfalto y hormigón;
sólo recordado por aquella huella de zapatilla
presionada en la arcilla pulida de su piel;
bajo él, el río de las flores desangradas
y el llavero del que falta mi llave
que abre aquellas puertas del cielo
liberando tu alma,
esa llave la tengo yo;
en mi llavero del día y de la noche
junto al peluche de una serpiente
de amarillos ojos y cuerpo verde amarillo,
historia enterrada
que protege mi corazón con tu historia,
tu tiempo, tu espacio, tus recuerdos
tu ayer y hoy, tu dormir y despertar,
tua vita in memories and love.
Yo the end and begins,
the man who have shout hecce homo,
the black and light,
the red and your blood,
the night and day.
Yo el mundo escrito en mi libreta,
yo bolígrafo macizo de plata y humo rojo,
yo el agua de tus ojos,
el vino de tus besos,
yo el demonio encerrado en versos y palabras
no dichas;
escritas.
Escritos que jamás
podrán descifrarse y entender:
Un canto al horizonte que sólo llegará
cuando llegue el final
y las trompetas derriben los muros de hojas de papel
donde crece el árbol de mis raíces;
donde te escondí;
para nunca dar a la luz
la luz de esta realidad
que sois todos vosotros atrapados
en la fantasía del mundo,
de una novela sin tinta,
sólo de imágenes.
En mi libreta duerme el mundo
yo
soy
su
creador.
Y este es vuestro eterno despertar
en papeles en blanco
que uso para liar mis cigarrillos.
Yo escribo la Historia
que es mi gran novela sin tinta;
imágenes, formas, figuras, personas, lugares, reales;
viviendo, alimentándose, existiendo
en ésta,
la única,
y verdadera realidad
de dos dimensiones.
Yo dirijo sus vidas.
Soy tiempo, soy espacio, soy alma de otro ser,
que guarda
en una mente,
y corazón todos vuestros recuerdos
El Castellano
Ocaso florecido:
Por la solariega vega del alma bullo,
jamás yo de sus brillos acrisolados
rehuyó,
yo que en fiel hueso calizo me siembro,
y crepito con su Sol mayor,
voy hecho de lluvia
del páramo su desventura,
las mentiras son erróneas
de todas mis caricias al cielo abierto,
la noche que empieza a sonar a mi Vera,
mantengo la quietud en alabada
sombra engalanada,
cae mi vida y de nuevo te siento
cerca muy cercana,
en tus campos nazco como hombre nuevo,
soy el crujido en tu ventana,
fiel abeja que a tu flor regenta,
enamorado suspiro de viento,
tu fiel sustento,
marco inamovible del desespero,
verbo y adjetivo de solar afán
en primavera que corre y lleva,
que abre y desgasta,
mi verdad que eres real,
y no un aliento de humo
dame una salvación,
y de la arista un primor,
en este solar muéstrame lo que pasó,
quiero ser aullido de viento,
solar empeño en tu piel canela,
dame vida que yo iré a tu vera,
una tentación que espera,
no hay miedo a esta hoguera,
este mundo habitado por fantasmas
de la gran ciudad,
me cuelgo en sus faroles
en alas de murciélago vivo,
hago entender
a este cielo de tijera descienda
su violeta pintado de Malva-Luna
clamando la vuelta de su fugitivo ocaso,
sin soles lejanos,
héroe del norte de tu boca,
mi cálido corazón hirviendo
con tu alzado amor,
mi beso de azahar que te necesito,
siente mi vuelta y su retroceso
a nuestra estrella,
no estoy perdiéndome,
me gusta tu hablar, me gusta tu respirar,
estoy dispuesto contigo a soñar,
estoy viendo al hombre mirar a otro hombre,
estoy haciendo de la bruma parir una sombra,
el hoy no entiende de vender a este anónimo,
le necesita para conquistar el mañana,
haciendo la línea que separe,
ven amor toma mi mano
deshacemos nuestros pasos al andar,
acunando campos de lirios,
dejame nacer bajo la luz del Sol,
mi respiro que mandó al cielo,
cruza conmigo la era,
estallando esferas,
hasta que nuestro cuerpo brote en flores,
por los pétalos de nuestras caricias
deshojadas.
El Castellano
Relato Sangre yerta:
Capítulo primero:
Era una noche oscura de diciembre,
daban las tres de la madrugada
en el reloj de la iglesia del pueblo,
caía una helada de invierno,
y en el cielo reinaba una luna llena de invierno,
ella dormía en su habitación
cobijada con dos mantas,
la luz de aquella luna iluminaba la penumbra de su cuarto,
como una sombra de piel pálida se posó
en el alféizar de su ventana,
con cautela deslizó el cristal
y sigilosamente entró en el cuarto,
podía oler la sangre de su cuello que dormía,
puso su mano helada en la boca de aquella chica,
que abrió sus ojos y solo alcanzó a ver dos colmillos
relucientemente blancos,
el miedo paralizó su cuerpo.
Sintió un escalofrío helado subiendo por su cuello.
Sobre este cielo, reina mi amor quieto,
sobre los vientos y mis nubes de versos,
clava mi colmillo tu cuello,
bebe hasta saciar la sed de mi adentro,
te descubro al vuelo nocturno
y su dama de oscuridad violeta,
pasado de un pasado que nos hacía brillar
en el marco de la ventana al acecho,
lento pierdes el sentido,
vas sintiendo entrar tu nueva vida,
la antigua solo te crea nostalgia y rabia,
te adentra la mente al reino de la sombra,
tu sed se vuelve intensa,
sientes vacías tus venas,
te levantas con la luna, duermes con el sol,
soñando quien te mordió,
las polillas y murciélagos son tus compañeros,
te mudaste de morada
a ese túmulo perdido y olvidado,
donde reposaban guerreros antiguos,
solo la sangre te despierta,
acechas en tu oscuridad compañera,
la oscuridad es más fuerte que tu alma condenada,
cambiaste tus vestimentas por una capa negra,
que esta noche se verá en rojo manchada,
tu interior lo sabe tan bien como tú,
al acecho,a sí sea una rama, o una ventana,
te despiertas fría cada noche que revives tu pesadilla,
no hay lugar ni bar donde calmar tu sed,
solo el cuello de víctimas al anochecer,
la compasión y bondad solo huyó de ti,
solo vive esa sed en ti de tener sangre,
solo una condena te marcó,
para todos y cada uno de los siglos que te vinieron,
algunas noches quedabas saciada
y no rematabas a tu víctima
solo la clavabas tu condena en su muñeca,
y vampiro la volvías,
tu capa con los decenios ya parecía más rojo granate que negra,
te gustaba oler aquella sangre seca y recordar
cada grito y soñar con tu embrujo
y como venía a despertarte, algún vampiro convertido
bajo tu colmillo,
tosías con espanto, el frío y la humedad,
se apoderaron de tu morada,
aquel túmulo, no tenía ninguna criatura de sangre sana,
las polillas y murciélagos volviste vampiros
para tu diversión,
sentiste miedo, tu noche pasada cuando tuviste que matar
un caza-vampiros inexperto,
los tiempos no entiendes,
como la gente cambió su superstición,
por materialismo salvaje,
y a los vampiros como tú mandaron a la fantasía y a la literatura,
tu única realidad solo la entiende el demonio,
y a una bruja invitaste a tu morada,
ella te trajo un regalo pero no permitió que la mordieras,
y hoy extraña te sientes con una amiga mortal
que cura tu soledad y tu condena.
Era viernes, ella ansiosa esperaba la llegada del sábado,
a las tres de la madrugada había invitado de nuevo a su hogar
a su amiga mortal,
ella quedó en traer comida y su puchero,
ella esperaba llegada la noche del sábado
con ansiedad y nervios,
como si nunca hubiese conocido a su amiga,
sentía una extraña sensación de deseo al mirarla,
le caía saliva por sus colmillos al mirar su cuello,
se prometía a sí misma no morderla,
pero su naturaleza la torturaba cada vez que la veía,
aquella bruja guardaba un secreto,
sus visitas eran interesadas,
quería pedirle a su amiga vampiresa
un favor que ella no podría rechazar una vez conquistado su aprecio,
ella le pidió aquella noche que se deslizase en la noche
y volase para morder y matar a tres enemigos de aquella bruja,
los tres hombres que denunciaron a la inquisición a su madre
y ella quedó huérfana cuando quemaron a su madre bruja
en aquella hoguera de la plaza del pueblo,
lo que la inquisición no sabía,
que aquella bruja que quemaron
ya estaba muerta y condenada
pues vampira era,
y el fuego nada la hizo,
vivió en la sombra atormentando a los aldeanos que la creían muerta,
y ella misma fue quien mordió y convirtió en vampiro a la a la que ahora
es la amiga vampiresa de su hija.
La vampira sin poder renegar de su naturaleza
pidió un precio elevado por su trabajo,
y ese precio fue
que la bruja dejara y permitiera ser mordida por sus colmillos
para ser amigas eternamente siendo vampiras ambas,
la bruja aceptó su nuevo camino y nueva vida
haciendo su pacto de sangre aquella noche con la vampiresa.
Ella llevó un puchero de sangre aquella noche,
sangre de animales cazados en el bosque,
solo consiguió despertar el apetito de su amiga vampiresa
el acuerdo estaba hecho,
y hasta que no matase a esos tres inquisidores no podría morderla el cuello,
se quedaron platicando hasta el amanecer,
y entonces su amiga se fue a su ataúd a dormir hasta la noche siguiente,
al despertar la noche del domingo
una nota en tinta escrita encontró,
quería los ojos de sus enemigos en un tarro,
a sí quiso y a sí sería,
aquella noche, se puso sedienta,
corría veloz como una sombra más,
el cielo corría un helor muerto,
y una neblina que cegaba hasta el sentido más despierto,
era la noche más siniestra elegida para cumplir su encargo a su amiga,
tenía la dirección apuntada con odio
de sus siguientes víctimas,
tenía ansiedad por arrebatar aquellos ojos y dejar vacías aquellas venas,
se coló a través de la ventana abierta de la recamara y despensa,
de aquella casa lujosa de clérigo de víctima,
ya olía su sangre mientras avanzaba el pasillo,
una luz de una vela la alertó
algo iba mal,
encontró al inquisidor durmiendo con un ojo abierto en una mecedora,
una ballesta cargaba en la mano de lo paranoico que era,
vió la sombra de la vampiresa, y se hizo el dormido,
cuando ella sacó sus colmillos relucientes aproximándose al acecho,
abrió los ojos el cura y disparó su ballesta,
la vampira rápido y veloz saltó y se enganchó en el techo frío,
al segundo después ya tenía ensartado el cuello de su víctima,
que este maldecía asfixiándose en latín antiguo,
a cada oración más rabia sentía aquella criatura de la noche,
clavó sus colmillos en los ojos,
y de un mordisco los escupió en el tarro de cristal,
a continuación tachó el primer nombre de su lista
con unas gotas de sangre fresca,
minutos después ya se encontraba volando
hacia la morada de su amiga bruja en el bosque
tocó a su puerta, ella contestó con dulce voz,
amiga te esperaba temía que algo te hubiese pasado,
abrió la puerta y la invitó a pasar,
Ven siéntate, brindemos por esta noche siniestra tan bella,
la vampira sonrió tenebrosamente luciendo sus colmillos manchados en sangre
agudos como agujas,
veo que mucha hambre no tienes amiga jeje,
al momento sacó de la capa el tarro con aquellos ojos frescos
con el nervio óptico intacto y el iris tenebrosamente en color,
como si aquellos ojos siguieran con vida,
uno menos gritó alegre la bruja,
te amo le dijo a la vampiresa,
yo te amo más contestó la vampiresa
al tiempo que caían gotas de saliva por sus colmillos,
le encantaba desnudar el cuello de su amiga con sus frías manos
a modo de caricia tierna.
Te faltan cuatro ojos más para morderme sobria y parca respondió,
lo sé, mañana más pronto que tarde los tendrás,
al tiempo que observaba como la bruja,
abría una rata con un cuchillo
y metía dentro los dos ojos,
a comer Sombra misina misina,
apareció corriendo una gorda gata negra
de ojos amarillos como de demonio,
ronroneó y se restregó en las piernas de la invitada,
que contestó ¿puedo morderla?
tan dulce, tierna y sabrosa que se ve,
No contestó medio enfadada
es mi gata y la amo igual o tanto como a ti,
está bien dijo- Cuando seas vampiresa tú misma querrás morderla
a esa morcilla peluda con patas llamada sombra,
ambas rieron y platicaron
hasta tarde en la madrugada,
ya va a amanecer amiga tengo que volver a mi túmulo,
no te preocupes amiga mañana te hago una visita
para que me entregues comida fresca para mi gata,
A sí será ambas se despidieron con un abrazo tierno de hermandad,
llegó la vampiresa y se tumbó en su ataúd.
Despertó a la noche del lunes con retortijones de tripa
y una tos espantosa,
presentía una noche fructuosa de caza,
pues las polillas y murciélagos de su túmulo lucían su colmillos rojos
al anochecer, está es la mía dijo y salió en busca de la siguiente dirección,
emocionada examinó la fachada,
y vio que sería más fácil que la noche anterior,
veía una ventana que daba directa al dormitorio
del segundo inquisidor,
un olor a sangre excitaba su sed, y ya sigilosa estaba moviendo el cristal,
una vez dentro vió col gusto y dulzura su alimento,
un cura obeso,
que estaba roncando hartado de vino y carne,
puso su fría mano tapando la boca y la nariz del clérigo
e insertó sus colmillos en su cuello cual espadas,
siguió bebiendo una hora larga de reloj
hasta que aquel corazón dejó de latir,
a continuación,
cercenó las cuencas de los ojos de aquel inquisidor
con precisión de cirujano con sus colmillos prominentes,
escupió los ojos en un tarro de cristal,
al tiempo que pensaba
se va a hinchar esa gata obesa con otra rata rellena de cuatro ojos frescos,
se fue volando riéndose a su siguiente dirección,
tras tachar el segundo nombre de la lista,
ya había llegado a la dirección,
esta vez era una casa cuartel con mazmorra,
del alguacil inquisidor,
no sabía que le esperaba sorpresa aquella noche negra y yerta,
abrió la verja, mordió al perro guardián que ya babeaba con sed de sangre,
abrió la puerta principal que se encontraba rota y crujía,
el escalofrío de la emoción recorría todo el cuerpo de la vampiresa,
encontró al alguacil en su lecho ebrio de vino hasta el hartazgo,
esta vez arrancó los dos ojos con sus uñas
que llevaban siglo y medio sin conocer un corta uñas,
contuvo el grito de desgarro metiendo la esquina de su capa
hasta el fondo de la garganta de su víctima
depositó los ojos en el tarro
y bebió hasta quedar con dolor de tripa,
al ver que el corazón del ciego alguacil dejó de latir,
saboreó un extraño olor de sangre reciente y carne gangrenada,
siguió el rastro hasta las mazmorras
y descubrió el horror que las habitaba
eran las mazmorras de la inquisición
en ellas descansaban hombres encadenados gimiendo y maldiciendo de dolor,
veintiséis cuellos mordió en aquel lugar,
después de llenar una bota de piel que antiguamente guardaba vino,
con sangre de arterías cercenadas,
ya tengo almuerzo merienda, vianda, y ten ten pie para mañana,
pensaba satisfecha al volar a casa de su amiga,
tocó su puerta de su casa de bosque
una voz dulce contestó
ya va cielo,
al abrir la puerta a su amiga desnuda contempló,
estaba haciendo un aquelarre y tenía un extraño olor en la entrepierna,
estoy trabajando contestó la bruja,
pasa y acomódate cielo,
y en que consiste tu trabajo, preguntó con curiosidad la vampiresa
con la boca llena de saliva de deseo,
he preparado un ungüento, tradicional que conocemos las brujas
para contactar con el demonio
¿necesitas ayuda? dijo la vampira,
no tranquila,
¿trajiste la comida para sombra?
a sí es contestó orgullosa,
bien sacó una rata de un almanaque y la abrió en dos,
aquí tienes amor
a continuación metió los cuatro ojos de relleno.
Sombra, Sombra misina mis mis, tu cena cariño,
salió corriendo con dificultad por estar obesa aquella gata negra de ojos amarillos fijos,
se sobó en las piernas de la amiga invitada y ronroneó de nuevo,
estas contenta he sombra le has cogido cariño a mi amada amiga
miau contestó la gata y se puso comer la rata rellena de ojos sangrantes,
terminó la rata entera, y se quedó durmiendo en su alcoba pequeña
llena de pelos, y raspas de peces del río y plumas,
esa hasta mañana no despierta dijo la bruja riéndose a carcajada siniestra,
trato completo, debes pagar el precio del acuerdo
dijo la vampiresa,
está bien contestó la bruja,
que se untaba un unguento con aroma a sabia y a yedra en su entrepierna,
¿Qué lleva eso? preguntó asombrada
pues bien lleva mandrágora, yedra y daturas de estramonio, machacadas a mortero,
Ammmm,
y eso qué efecto tiene,
ayuda en la adivinación,
y llama al demonio con mi plegaria de odio,
está bien,
te ves rica y deliciosa a sí desnuda,
si fuera hombre esta noche te hacía cinco hijos,
la bruja río para sus adentros,
está bien estoy lista,
inclinó la cabeza mostrando su cuello desnudo a la vampiresa,
se levantó de la mecedora
reluciendo sus colmillos
pasó la lengua por el cuello de la bruja
y le susurró al oído,
dame tu muñeca,
para que seas vampira tu corazón no bebe pararse
ni quedar sin sangre,
a continuación mordió su muñeca,
cerró la ventana y aquella noche se quedó en casa de su amiga,
amaneció y se durmió en su cama abrazada a su amiga aquel día frío de invierno,
llegó la noche del martes,
abrió sus ojitos, emocionada vio que su amiga bruja
que ahora era vampira estaba bebiendo con ansias toda la sangre de aquella bota
que llenó en las mazmorras de la inquisición,
se acabó la sangre,
y más rápida que un rayo la vio mordiendo una pata de su gata,
estaba segura de que tu gata correría tu misma suerte
ambas rieron plácidamente,
toca tu primera noche de cacería amiga,
vamos, vamos dijo emocionada,
al alcalde quiero esta noche por cabrón,
esta bien chuparemos las sangres del alcalde,
treparon el castillo donde vivía
entraron por su ventana y cada una eligió un lado del cuello,
ambas bebieron del cuello del alcalde hasta quedar saciadas,
volaron a su refugio,
y la vampiresa le suplicó a su amiga bruja vampiresa
que se mudase a vivir con ella a su túmulo y que le daba permiso para llevar allí también
a su gata obesa vampiresa,
pasaron la noche platicando de cacerías y nuevos objetivos,
con la gata mordiendo murciélagos más grandes que ratas
y ronroneando al lado de su dueña,
llegó el sol y se tumbaron en sus respectivos ataúdes,
esperando con sed su nuevo anochecer eterno.
Fin Primer Capítulo
Segundo capítulo
que trata del amor que surge entre las dos amigas:
Erase ya un miércoles nocturno, negro y yerto,
la niebla dibujaba las tinieblas siniestras,
se podía respirar la humedad en el ambiente,
aunque los caracoles por ser invierno todavía no caminaban por la hierba húmeda,
platicando se encontraban en el túmulo las dos amigas,
debatiendo la cena,
-Hoy amiga quiero que me consientas,
hay un hombre del pueblo que no me pagó mi trabajo de bruja
no me pagó la muerte del hombre al que debía dinero este señor,
me costó eslomarme escalando montañas para conseguir
aquellas yerbas y el sapo pa abrir y meterle el nombre
pa trabajar aquella muerte,
de acuerdo le chuparemos las sangres a ese moroso
¿Dónde vive?
a las afueras del pueblo,
tiene una granja donde cría gorrinos para vender en el mercado,
está bien iremos pero me prometí a mí misma no morder más animales,
su sangre me da retortijones y empacha,
vale solo le vaciamos el cuello,
y a su esposa también por maruja chismosa.
La noche del miércoles,
se tornaba larga y deliciosa para las dos vampiresas,
ya volaban como dos sombras en aquel cielo nocturno con niebla,
llegaron a la granja,
los gorrinos roncaban,
bueno una gallina no sienta mal a la tripa espérame,
una no fue suficiente mordió 23 gallinas hasta tener retortijones,
abrieron la ventana de la habitación,
y allí estaba el deudor roncando en el lecho con su esposa,
¿ves que tiernamente siniestro se ve nuestro trabajo?
Si mi cielo,
una mordió el cuello del hombre otra el de la esposa,
algo macabro resultó aquello,
de repente la boca de la mujer que dormía empezó a brotar sangre,
la vampira inexperta bruja había hincado demasiado hondo sus colmillos
perforando la garganta de su víctima,
que bruja eres contestó riéndose
al instante estaba chupando la sangre de la boca,
para no desperdiciarla,
tenían las dos bocas juntas las dos amigas,
y una extraña sensación de nervios sintieron las amigas,
en la oscuridad la boca de una llegó a la boca de la otra,
y con la sangre empezaron a besarse con pasión y deseo,
aquello les daba más placer según pasaba el tiempo,
el corazón de sus víctimas ya no latía y decidieron volverse al túmulo de su vivienda,
allí hablaron larga y tendidamente como si nada hubiera ocurrido,
pero ambas amigas sabían que habían sentido placer en aquel macabro beso de pasión
ya empezaba a asomarse el sol,
y se metieron en sus tumbas,
aun estaba la luna en el cielo y apenas eran las cinco de la madrugada,
aún faltaba hora y media para que saliese el astro rey,
se dieron el besito de buenas noches y se acomodaron en sus respectivas tumbas,
te huele el aliento a gallina amiga
jajaja es broma no te enfades, te quiero,
yo también que descanses bruja,
hacía años que no hacía trabajos de bruja, pero amaba que su amiga la llamara bruja,
aún podía sentir la nostalgia de su vida pasada en su ser,
buenas noches amiga hasta esta noche,
yo también te amo,
en la oscuridad del túmulo habitado,
se oyó una tapa de ataúd crujiendo al abrirse,
amiga amada puedo dormir este día a tu lado,
es que la oscuridad me da miedo dijo riéndose siniestramente,
ven bruja te hago un lado en mi ataúd,
las dos juntas allí durmieron en la misma tumba besándose toda la noche
y acariciándose sus piernas,
besándose y haciendo pequeños mordiscos mutuos en sus vaginas,
ambas acordaron al llegar la noche del viernes,
que dormirían todo el invierno juntas en el mismo ataúd,
la gata negra de ojos amarillos sombra tenía muy mal aspecto había engordado 7 quilos
de beber noche tras noche decenas de murciélagos hasta dejarlos vacíos,
a sí en amor y ternura pasaron el invierno frío
hasta que una noche de mayo ya se encontraban en su primera primavera sangrienta
que el amor y la sangre altera.
FIN DEL SEGUNDO CAPÍTULO
CONTINUARÁ
Tercer capítulo
Que trata sobre el encuentro con la madre de la bruja vampiresa
Corría una noche de primavera en aquel pueblo maldecido,
por las criaturas del averno y su muerte sedienta,
despierta bruja, ya es de noche,
ahi no que sueño, me siento como si no hubiera comido en una semana,
mira, mira ha crecido una seta enorme al lado de nuestra tumba,
ajá es una macrolepiota tóxica,
con ella hacía venenos de encargo cuando era bruja,
ahí cuando yo era bruja,
que vida más perra esta he acabado
durmiendo con una vampira siendo yo misma otra vampira,
bueno estamos y somos felices y comida no nos falta,
tienes razón pero como sigamos a este ritmo vamos a beber a todos los del pueblo
y nos reclamarán comida decenas de vampiros hambrientos,
bueno entonces iremos a cazar esta noche al pueblo vecino,
hay unos cuellos que duermen alegres el sueño del gorrino
esperando el san Martín de nuestros colmillos.
Si te soy sincera, el pueblo vecino corría de leyendas,
que estaba condenado y maldito por demonios,
a si es beberemos sangres tres veces más ricas de personas poseídas,
amén a sí sea, te aviso que esos demonios duermen despiertos,
no me metas miedo,
los demonios siempre son amigos de las brujas,
diles que te dejen morder su cuello a ver si son tus amigos,
deja el sarcasmo,
soy valiente y fuerte y tengo hambre.
Venga vamos, espera que le cojo un murciélago a mi gata sombra,
con tanta sangre de murciélago va a coger una cirrosis tu gata obesa,
una diabetes,- Que va esta solo con los huesos fuertes, no está obesa,
sí, sí lo que tu digas,
vamos,
ya estaban volando juntas aquella noche de primavera,
llegaron al pueblo vecino
y se encaramaron a una ventana que estaba iluminada con luz de velas,
mira, que mal rollo ¿ves eso bruja? ese cura da más miedo con ese crucifijo que un caza-vampiros,
esperemos que este de espaldas amada y le ensartamos el cuello,
vale a sí lo hicieron,
de un zarpazo tiraron el crucifijo del cura al suelo,
que se encontraba en medio de un exorcismo,
lentamente la sangre del religioso dejó de brotar por su cuello,
lo hemos dejao seco, vamos a por el poseído
de repente contemplaron asombradas como el poseído se doblaba y retorcía
para balbucear sus últimas palabras,
tu madre que condenaron a la hoguera a demás de ser bruja era vampira,
y sigue alimentándose en la oscuridad y la tiniebla,
para puede que este pobre diablo tenga razón,
puede, pero ya conoces al demonio que te cuenta la mentira más bonita
como que hay cerdos con alas de murciélago
que vuelan y son vampiros,
tranquila que si es cierto
puedes comunicarte con tu madre mentalmente y ella vendrá a verte,
escucharon un chirrido en la ventana mientras vaciaban el cuello del poseído,
mira una vampiresa como nosotras,
Madre eres tú,
si hija soy yo,
te he echado de menos todos estos años vigilándote en la sombra,
te echo de menos también
te amo madre,
veo que ahora eres vampira también
si y acabé con los tres hombres que te quemaron en la hoguera,
esa es mi hija
siempre supe que tenías un corazón de guerrera,
tengo que irme hija perdóname por hacerme pasar por bruja quemada,
no te preocupes mami, siempre supe que volvería a verte.
Nosotras también nos vamos ya pronto saldrá el sol.
FIN DEL TERCER CAPÍTULO
CONTINUARÁ
CUARTO CAPÍTULO
Que trata sobre la visita al túmulo del vampiro ermitaño Miguel, y la boda de las dos amantes vampiresas.
Corría una noche lluviosa de mayo,
cuando de repente tocaron a la puerta del túmulo,
las dos vampiras se encogieron del sobresalto llevaban dos décadas sin recibir una condenada visita,
abrieron con cautela la puerta,
¿quién llama? preguntaron
. Soy el ermitaño Miguel, aquel que vive por los siglos en la cueva del monte del reguero del gato.
Pase, pase bienvenido sea llevamos mucho tiempo sin una visita cochinera,
adelante mi casa es su casa,
póngase cómodo, que le trae a bajar de su montaña,
Os cuento que llevan decenas de siglos mis barbas bebiendo la sangre por mí,
vengo aterrado de estar enterado que un caza-vampiros llamado Juan Belmonte
ha llegado al pueblo a investigar los ataques de nuestra amada familia,
que el demonio la guarde en su seno y morada,
vengo a ponerlas en aviso que no salgan a cazar solas,
ese caza-vampiros tiene los huevos mu gordos
y ya a pasado cepillo a siete de los nuestros,
las invito a cenar mañana a ambas a mi cueva para dialogar sobre el asunto,
no quiero ver desaparecer a mis dos amadas vecinas que espío cuando me aburro
y se comen la boca y las piernas con deseo y lujuria,
pero bueno ¿no le han dicho que espiar está muy feo?
perdonadme pero con tantos siglos uno ya se vuelve un poco verde,
no se preocupe con gusto iremos mañana a la noche,
de a cuerdo las espero ansioso,
y cuidado con los caminos de la noche,
con esa estaca de Juan Belmonte.
Cuidado tendremos, nos vemos mañana,
chupe cuellos en paz
igual deseoso de gusto las espero para tomar un cafelito y un vinito de sangre,
hasta una gitana vieja me hizo una canción la del probe Migue
pero soy tímido y solo la escucho cuando estoy triste,
llegó la noche de la cena esperada y las vampiresas fueron a la cueva del reguero del gato
con su gata sombra,
bienvenidas sean a mi humilde morada, pasen, pasen,
más guapas y no despiertan esta noche,
jejé sí el amor nos tiene con piel de lechuga y picores diurnos,
eso es bueno,
bien de cenar hay gorrino vivo a chupar, sopa de rata de agua,
y la panadera del pueblo recién secuestrada,
se veía bien dulce y sabrosa aquella panadera amortajada con unas bragas rojas en la boca,
la rata para mi gata sombra que está a dieta,
de acuerdo iré sirviendo un vinito de sangre gran reserva traida de las mazmorras de la inquisición,
serviré de tapa lenguas humanas estofadas,
que rico y sabroso huele que alimenta,
ya va esperénme sin salir volando.
Se hartaron a cenar y a beber, una extraña sensación de deseos sintieron ambas vampiresas
por aquel ermitaño simpático y risueño llamado Miguel Capote,
antes de un parpadeo estaban en su lecho desnudas bajo su embrujo,
cosa cierta porque aquel vampiro era brujo druida,
hicieron el amor con pasión y lujuria toda la noche,
y acordaron casarse las dos con aquel ermitaño misterioso,
pasaron aquellos tres meses tres días y tres horas
de prometidos cazando y alimentándose juntos
hasta que llegó el esperado día del casamiento,
fueron de invitados, el conde Drácula de Transilvania su esposa Anacleta su sobrino Dante Romero,
un ciervo, un centenar de vampiros murciélago, polillas vampiras de los 3 continentes malditos,
duendes oscuros, hadas asesinas, basiliscos y demás criaturas del averno,
sonaba el flamenco y corría la sangre fresca por doquier,
el otoño siguiente vivían su vida de casadas las dos vampiras amantes
eternamente enamoradas y sedientas de sangre.
Fin del cuarto capítulo
CONTINUARÁ
Quinto y penúltimo capítulo
El amor eterno y desenlace
Trata sobre la lucha contra el caza-vampiros Juan Belmonte y la adopción de un niño vampiro rumano:
Caía ya una noche lúgubre y cálida de junio,
se podía sentir un hedor muerto en el ambiente,
las vampiresas se encontraban alimentándose,
estaban en la granja de un aldeano del pueblo,
este estaba obeso y sano, de alimentarse de tanto puerco y gallina,
ambas tenían un extraño presentimiento,
como si algo no fuese a salir bien aquella noche,
sentían otra presencia en aquella granja,
y a sí era, al salir de la granja,
se encontraron con el caza-vampiros Juan Belmonte,
que llevaba una estaca en la mano derecha
y un brazo musculoso,
se quedaron paralizado con aquel caza-vampiros,
como si hubieran visto un fantasma tres veces muerto,
de repente se escuchó un fuerte disparo,
y el caza-vampiros Juan Belmonte cayó desplomado,
se trataba del ermitaño Miguel
que había acudido al lugar con una escopeta
intenta dejarme de nuevo sin esposas malnacido
desde la tumba, a continuación Miguel
se encontraba mordiendo el cuello del caza-vampiros,
que se estaba retorciendo como un gusano
en el suelo tras recibir aquel disparo,
ese es nuestro esposo dijeron las dos vampiresas aliviadas.
Caía ya larga la noche,
y nuestras amigas descansaban en su túmulo platicando,
aquella noche de junio había sido muy intensa para las dos,
que ya se encontraban en una tumba juntas
besándose con pasión y lujuria,
llegó la noche siguiente a aquel pueblo maldito sin nombre,
las dos vampiresas se encontraban apenadas,
a ambas se les había pasado ya el arroz
y a su edad jamás podrían tener hijos,
tras pensarlo largo y detenidamente
decidieron adoptar un niño vampiro,
llegaron a la decisión de que adoptarían al pequeño vampiro,
famoso por sus libros infantiles,
aquel pequeño vampiro era de Rumanía
y se llamaba Rudiger,
fueron al juzgado vampiril rumano,
y tras unas largas burocracias tenían los papeles de la adopción en su mano,
tuvieron que sobornar al juez rumano
para conseguirlo,
le regalaron seis botellas de sangre de vino gran reserva añeja,
y una maleta con el cardenal de la inquisición española
Bartolomé Diaz Espartaco, se lo regalaros en una maleta de hierro,
con cerrojos y murciélagos grabados,
aquella maleta tenía agujeros a modo de respiradero.
Ya tenían al pequeño Rudiger en casa,
y fue la mayor alegría de su existencia,
jugaron al endemoniado y al ahorcado,
y salieron a cenar y dar un paseo nocturno,
el verano estaba llegando a la aldea maldita sin nombre,
ya pronto serían las fiestas del pueblo.
Fin Del Quinto Capítulo
CONTINUARÁ
Capítulo sexto, capítulo final
Que trata sobre los orígenes del pueblo vecino endemoniado.
Caía ya una noche de calor y de grillos una noche de julio,
nuestras vampiresas se habían despertado emocionadas,
veían a los murciélagos y las polillas del túmulo gordas y babeando sangre,
vamos bruja esta es nuestra noche hay comida hasta hartarse y son las fiestas del pueblo,
sí, sí sí quiero,
¿me sacas al baile?
¿me llevaras a bailar?
Pero bruja somos vampiresas, no mortales,
Ya veo desde hace un siglo y medio largo,
bueno algo podemos hacer,
le pediremos a nuestro esposo que deje la timidez y nos ponga la canción del probe Migue
que le escribieron,
ni hablar se escuchó una voz tras la puerta,
hace una noche pa’ asar la manteca y no quiero ponerme triste,
por fa, por fa,
bueno está bien pero solo la pondré una vez,
sonaba ya la canción en el gramófono,
Qué le pasará, qué le estará pasando al probe Migue
que hace mucho tiempo que no sale,
dice que se ha vuelto ermitaño en su montaña,
que de ahí no quiere más salir,
allí se hace su cafelito hasta se toma él su vinito,
jajajaj ambas rieron a carcajada siniestra,
es preciosa amor,
te describe hasta la perfección,
bueno fuera la broma o la quito,
jajaja no te enfades,
hoy iremos al pueblo vecino,
algo oscuro y gordo se está cociendo allí hay vampiros poseídos
que nos están haciendo la competencia,
está bien, al rato se encontraban volando al pueblo vecino,
fueron a la iglesia del pueblo
que tenía escrito en la puerta con sangre, pueblo propiedad
del demonio y Calvin kain,
tienen sentido del humor por lo menos nuestros amigos,
si, sí ya le entra a uno mal rollo de verlo,
se escuchó una voz que provenía del campanario,
bienvenidos pasen, pasen
¿Da mal rollo ves?
se puede venimos del pueblo vecino
a exponer nuestro problema vampiril,
está bien, pasad y poneros cómodos,
pasaron a los púlpitos de la iglesia,
y bajó del campanario un vampiro anciano jorobado,
con la cara rajada,
me presento soy Odor jorobado de Notredame para servirles,
como podrás ver soy vampiro extranjero francés,
¿Que les trae a mi humilde morada?
Pues bien últimamente estamos teniendo problemas con vampiros endemoniados
de este pueblo que nos hacen la competencia y nos dejan sin alimento,
está bien se acordará lo siguiente el invierno y la primavera será la veda abierta
para los vampiros de vuestro pueblo, otoño y verano
será nuestra veda para nuestro pueblo del demonio,
las dos estaciones que tendréis vedadas tendréis que ir tirando de despensas de sangre
y sangre que halláis almacenado en botellas, barriles y toneles.
Me parece justo,
una pregunta más y nos marcharemos,
¿A qué se debe tanta presencia del demonio en este pueblo?
Pues corre la historia que san Miguel ARCÁNGEL
bajo del cielo en septiembre porque se gastó todos los dineros en licor, casinos y prostitutas
bajó a hacer la vendimia como todo buen hombre del señor,
y aprovechamos para ensartarle los colmillos y volverlo vampiro,
desde entonces el Arcángel vive en Transilvania,
bajo el seudónimo de conde Drácula ese es nuestro origen endemoniado,
sin san Miguel luchando contra el demonio,
cientos de demonios salieron y se apoderaron de todos los aldeanos del pueblo,
brindaron en sangre,
y todos se fueron a dormir pues ya iba a salir el sol.
FINAL
El castellano
SÁBANA ESPECTRAL:
Palidez inaudible:
Era una joven noche,
caída ya entre algodones de nubes,
y un hueso de luna
por blandir el horizonte,
de sucesos famélicos,
miradas fugaces,
y testigos somnolientos.
Vencido el atardecer
bajo oscura premisa,
que todo aliento encarcelaba,
inquietud disparada
de fuste en curiosidad,
suscitada en envés
y lo más profundo
del humano anhelo,
entre belleza y muerte,
locura o razón sajada,
juventud eterna,
mito o paradoja en lucha
contra lo caduco del ser,
instinto en deseo servido
en cáliz del mortal inmortal,
como juego macabro,
en inevitable curiosidad,
un ser maldito,
condenado a la vida eterna,
y su sed de sangre
que le envuelve,
soga tensa de maldad eterna
que vive y camina sigilosa
sin condición de mera elección.
Sueños encorsetados,
en nuestra atracción
por ese lado yerto
de ser siempre en esta vida
condena resarcida,
entre oscuro granate,
y acecho de ley
y comprensión desconocidas,
que emerge de historia
jamás narrada,
y seducciones finales,
de colmillo y paradoja
terror vecino.
Leía los recovecos del alma
transparentados en vivaces,
ávidos rostros,
sin esta sed
que batía como rayo
de plomo mi entraña,
convivía oculto
al sentido que relucía la vida,
por colmar su caducidad,
el tiempo jugaba
en mi caso a otro juego,
como lucha del tedio
y sombra de buscar distinción,
para regocijo
de no repetir acto
y maniobra,
siglos parecían inermes
frutas que morder,
sabiendo que mi final
no llegaría.
Frívolo llegaba el otoño,
que peras del olmo eterno
dispensaba,
aparentes los rostros,
satisfechos parecían,
llegada la hora yerta
de negrez, oscura,
flotante,
algo llamaba estridente,
era el nuevo hambre de la caza.
Förüq
Danzaba mi vida frívola, en medio de un otoño castellano, era yo, como un pertinaz observador, las glorias y misterios entablaba aquella tierra mesetaria, observaba lustres y brillos de alegrías secuaces, también quien no me conocía, opinaba que capaz era de arrebatar con sola mirada destello fugaz de risa desapagada, y llenar de pavor solos corazones imbuidos.
No podrían sin conocer dar significante a esa oscura sensación tersaban mis ojos verde azules cual turquesa onírica, capaces de encender en curiosidad anhelante, o rasgar hasta el palpitar más ávido, un temor inextricable podían hendir, en el borde blandía un gris cual escarcha su iris, no sabían ellos que no solo podían perpetrar sus rostros, si no también descifrar los más escondidos recovecos del alma y sus huestes vidas;
resbalaban por sus caras como rayos mercuriales, y el plomo más pesado y denso, se fabulaba de donde provenían, con su brillo ígneo, cual vidrio líquido, el más vivo, cual gruta y fondo, del manantial más encendido en esmeraldas.
De facciones curtidas y temblorosas su facha era, a pesar de una casi mortal palidez expresaba su nieve de piel, ni el rubor intenso ni el combativo esfuerzo, tornar otro color su piel podía, y en lo expuesto pocos sabían, que no se cultivó más la imaginación, que mi juicio y semblante sempiterno.
Förüq
Candidez y sentido
al servicio de honores románticos,
no hubo na terra,
que cultivar más imaginación,
que virtud en juicio,
todos arribamos a la virtud,
orgullo y perdición,
de jovial inocencia,
sueños en poesía
eran pulcra vida misma,
oh escenario pintoresco,
ungido en feroces, pasionales
llamas.
De lánguido temor efímero avanzaba,
hacedor de tiempos faustos,
en los que tejer ojos brillosos y anhelantes,
mérito real, acostumbrado,
el esforzado vilo condenado,
de sortilegio claro,
rondando me aferré a fundamentos de vida noctámbula
surreal;
de hora parca solitaria que rebrillaba
la sed de mi colmillo en tersitud de filo,
fantasmal lucía el pertinaz sueño sanguinoso,
blandía su deseo,
la tácita recompensa amilanada,
héroe tétrico del norte su silencio invernado,
no me afinqué en ninguna carrera del vicio,
era día de abyecta dicha florecida,
ruina de muchos,
oh creer cielo ganado,
mismo techo,
que habita una criatura tan hermosa y delicada,
ojos expresivos como sangre en sed vampírica,
unas manos que ni mejor pintor,
tratar podría,
tez fría y pálida,
cuan mármol sonrojado,
recién pulido,
su cabello de realeza azabache,
peinarse sólo en fuego pudiese,
su silueta era perfil del paraíso,
asombrado pregunté su cincel de nombre,
respondió:
-Förüq soy Leannán-Sídhe señora hada Reina, dueña de la profundidad,
nocturnal.
El Castellano Förüq
Asumo un aniversario
digno de recuerdo,
cumplo trescientos treinta años
del designio fausto del
Panida trigo nacido,
en comparativa soy un
mortal inmortal jovial,
si existe la eternidad
me preguntaba al correr
de siglos sin hallar
respuesta válida
cadencia de haber estado
en existencia puede,
II
He conocido sortilegios,
encantamientos por los
que su víctima cae en un
letargo de sueño para
despertar a los cien lustres siguientes.
Sostener la carga del tiempo
nunca es bastante,
oh, transcurrir infinito
de la sed.
Alquimista de sigilos
y silencios esenciales,
un día susurró mi Musa
que el amor y la seguridad
eran enemigos
mi esperanza era total
pero no, mi miedo a ser
feliz.
III
Musa Luna sempiterna
era coqueta y en ocasiones
hacía que me muriera
de celos, seguíamos
viéndonos a escondidas
yo, humilde descendiente
de Candamvis
adorador de Mercurio,
mi Sol fierro,
anhelaba cobrar mis
lágrimas dulces vueltas
versos por y para ella
siempre veía a los celos
mordientes viles viborillas
invencibles, inextricables a mi temple.
La veía con curiosidad,
como se ve a un Fénix en una caverna,
como se encuentra a un resplandor
admirable.
Mis ojos iluminados
cual sed de cuarzo
bajo sol rebrillante.
Su tez era radiante
como carne recién modelada
yo como alquimista de un recipiente
de sueños inmutables,
como la dicha y gloria la bañaban,
ya acariciaba una noche memoriable,
al candor de estrellas
y lunas argentas,
la profundidad su belleza imantada
yo era incapaz describir en fúlgida palabra
asordinada.
contemplé su pulido rostro
y papiros azabache cual su mercurio,
en ojos encendidos,
mi tristeza ya era fugitiva,
un rayo de fuego emanó
de la admiración cautiva en mi pecho,
capaz de concederme
en un pálpito inmortal,
mi corazón no cabía entre costillas,
tantos años se materializaron,
de ferviente amor por ella,
mi no-estrella mi viva Doncella Escarlata.
Förüq
Bendita danza de muertos,
azur e índiga sangre alzada,
miraba dentro su halo vestigial,
era como una orquesta de estambres su rostro,
perdido entre nubes de ocasos,
y el cobre solar,
augurios yertos sacudían
su canción,
sones etéreos de arañas desveladas,
rizos de albas y acuciadas
despensas de cielo,
su dominio era,
supremacía angelada,
descubierta su zona umbría
que todo placer revuela,
oh primavera
vuelve Ostara con tu principito,
del rayo del acorde olvidado,
una maravilla en su jornada,
por habitaciones de respuestas incendiadas
través los siglos sepultados
su mirada tersaba,
hace eternidades llamaban
a los míos antes yo nacer
blandían azabaches miradas
las golondrinas;
al soliloquio confinado,
lanzo un baquio seguro,
escribo lleno de origen,
hoy,
a mi casa, su casa, nuestro reino,
entre zarzales de espina dulce avanzo,
un día de pocos
alzo mi linaje Solar
miel de luz en estados,
auge de los valerosos hombres,
que tierra osan pisar y ella,
de saborear su huella,
estos, que jamás pisan cenizas que son iguales,
al regio Sol caudillo,
entre esquelas vorágines,
de ángeles estrellados en sus alas
tersitud mi espada,
voy rumbo la tiniebla magna como cada cual,
no hay miedo canta mi sangre yerta allí te encontraré
también,
oh filo de polvo en aura,
vine blandiendo ríos
y solares como acequias mis venas,
exhausto, no me verán las mesnadas,
ni mi azada,
saco alegrías como mares,
origen y fin bailan de la mano,
no temas Musa a quien cruzó dos meses la Estrida,
traeré tu flor de Hércules,
así cueste mi alma,
honraré alba y osaso,
sólo como un Solar puede,
brindando sangre y simiente,
Néctar y Ambrosía,
tierra y vida,
lluvia y calma.
He oído a tu espíritu,
no me iré sin complacer mi dicha,
de eternal lustre alzado,
moveré cerros y sus huestes,
destruiré el destino
si no te quiere conmigo,
este febrero excomulgado
seré si quieres fiera de fieras,
señor de señores,
llama de hogueras
hijo su madre Luz,
tú eres la pulcra Voz.
Förüq castellano Miguel Esteban Martínez García
IX
Ella se tumba conmigo,
no hay trono,
no hay lecho,
hay un lugar,
donde reposar la desquicia atónita
en nunca más, ningún lugar,
horizontes atrás
se pintan y desdibujan los laberintos,
ayúdame estoy encontrando en ti mi lugar,
la quinta magia,
el quinto poder
la sola pesquisa,
el quinto elemento,
más que cine,
es control,
es orden,
es sabor,
es compás,
llama que es sangre,
elevado amor,
sinfonía de vena
jamás perdida
ni encontrada,
oh de colmillos
verá esta noche
perder mi suplicio dormido,
ella susurra que entona a mi oído,
ayuda, ayúdame,
he ganado mi cordura
perdiendo el control,
asáltame,
abandera este miedo,
de no ser de nuevo crujido en tu muro,
y ventana flamígera tu descontrol,
corro contigo
fuera la línea sedienta,
tu sed soy yo
acaba tu decencia
de no ser más que sangre.
Förüq y Leannán-Sídhe a 21-06-2023
X
Te escuché- dijo Musa, la doncella de palidez inaudita,
una solemnidad hería hasta el oído sordo;
ya que todos contaron su versión,
también quiero hacerlo yo,
por qué la blancura me hace nombre,
entonces,
un relámpago de luz tersa
descendió la ventana,
aquella noche tormentosa
hasta posarse en el oscuro diván,
luz azur que envolvió,
se velaban las sombras del patio de la araña,
allí dos principes combatían
por el amor la doncella real Escarlata,
se escuchaba el blandir de sus espadas
y como crujían bajo las viejas torres,
rugidos estremecedores, del tembloroso pavor en esfuerzo,
corría aquel 1825 en que Rusia y Polonia encarnizaron
una batalla feraz que al pueblo agota,
estas cimas tormentosas,
se pierden entre nubes del nuevo ocaso,
un canto moldavo brillaba
y relinchaba su propia existencia
por aquel cristal de lago
inabarcable como azur espectral,
ninguna barquilla ni anzuelo,
jamás partió su vidrio,
este solo completamente sorprendido,
contesta entre animales salvajes
aquel estupor indefinido de canto claro,
en la ribera la Estrida
donde sangre fluyó sin mesura,
sangre guerrera lloró,
un compás de ojos azules mentirosos,
corrió el río,
de bala en pecho,
aquel que cruce el río
junto a él,
donde reposa despierto en aguas
el maldito doncel,
vampiro es.
F:orüq el Inocente
XI
Macabra sinfonía solícita
de ojos fantasmagóricos
oh mi pequeña fantasma era,
de cabeza cubierta
y bañada entera en sábana
purísima en blancura
que ni azulete pudiera,
dirigió su manecita helada
a mi hombro
y me susurró al oído,
Esteban su Sol ha muerto,
noche blande y ahora regirá siempre,
asustado me acerqué a la ventana,
y el temor se hizo realidad
de aquel susurro fantasmal,
blandía que coronaba
el cielo una luna negra
cual gema azabache.
Encendí una lumbre,
para evocar un réquiem,
a mi Sol Fierro,
yo, que le creía invencible,
como mi amor a mi pequeña fantasma
sembrada en sábana,
un grajo rechoncho
picoteó entonces mi ventana
y crascitó con amplio gorjeo,
-Noche semper
nunc sember imbres,
sempiternusa tenebras blanditia,
ya rematado yo,
un cuervo crascitando en latinajos,
bajé a hablar con mi pequeña siniestra,
avivé mi lumbre por si Oscuridad,
bajase a la hora mi escala con hambre,
cerré la ventana
calculando nada prodigioso me asombrase,
entonces escuché un alarido estridente,
como si raices eternas gritasen
velozmente entró un borbotón umbrío,
de sombras densas como nube de la más cargada tormenta,
cerré mis ojos
para obserbar el inicio de mi final,
mi inocencia no tenía miedo,
miré el espejo sobre mi taquillón,
y quebró brotando un millar de sombríos ojos,
vi mi rostro en uno de ellos,
lucía una piel pálida
y unos colmillos no podía encerrar mi boca,
era el inicio de mi condena
la chica besé en 2006 era un vampiro.
Y mi amante fantasma,
es el espectro de su anterior vida.
Förüq a 18-09-2023
Surco de alma:
Dentro de la luz, fuera de la noche
y su oscuridad que sujeta,
estoy en el sueño,
estoy a lomos de mi araña
descubriendo mi pasado
que voy dejando atrás,
un tren escucho desasirse
es mi existencia
en tal crujido de sangre y aire
abrirse.
Ventanas transparentes
dejan mis reflejos ausentes,
busco por más
noches en vela de navegante
sin mar ni final,
yo amo la virtud
mi ser desnace en alas quejumbrosas
de creación,
de soles por ilusiones,
cumbres febriles, bosques dementes,
sombras amadas al acecho,
este es mi pecho,
resquicios de árboles
soy ciprés
soy guerrero de mí mismo,
era o no era, sin abismo,
mi tardío cabalgó estrellas
por puentes,
ríos y sus afluentes,
gramas por sienes descubrió,
un horizonte perdido
un mar de cal y canto,
era esta araña mi medio de vida,
una oración, un ruego
de que no me abandone,
cristales rotos brotan un haz de sombras
es una clase de fantasma la mía,
no se consumía,
las mentiras eran erróneas
detrás de mi escudo
donde todo arde,
el tiempo es un saco
nunca cambia
sólo cambia su contenido,
una vez la sombra brotó de mi carne
sentí su abrigo de frío
quise sonar la noche
quise ser sigilo oscuro,
taciturno del silencio,
mi vía buscaba la luz
para abrazarla,
me abrió los ojos el mundo
desnudando mi esencia
de pronto mi bondad iluminó mi pecho
y hoy soy dichoso, pleno, completo,
por saber que soy bueno,
con esto diferente a mi exterior,
y no hay mal
que no sucumbe
a mi cuchillo de luz
llamado virtud del justo.
El Castellano
Carcoma del sentido:
Araña el segundo colgado de la pared,
junto con la pesadilla matutina
que me hace esquivo y falto de tu piel
naufraga el barco sin océano
del rosario que acompañó años y años
de investida locura sin culpa causada
resquicio tibio, veloz estampa de hiel
cruel caracol que avanza en un sentido
y no es volverte a ver
días cayeron por goteo
tierras lejanas, sufridas
sin hueso ni secreto vivido
sol a sol elevado amor
preso de aquel día que fuiste musa del alba
y las nubes tornaron de color
el cielo lloró rocas duras y encogidas
como este corazón que hoy te habla sin dolor
avancé paredes subiendo peldaños
las puertas cerraron tu vista
el techo se volvió universo paralelo
los fantasmas seguían a dueto el verso
y solamente quedo algo por decir
cuadros de estirada realidad sin cielo
único demonio interior me habla
dónde quedó tu marca
tu océano para que navegara
tus años que me eran indiferentes
hoy son cuchillo de tu bien
fuego vespertino quema la tinta de mi sangre,
sentado en la silla del destino
mi valor mi honor lo injusto del sabor,
lo vivido sin catalogarlo en ofensa
libre por amor pero para ti otro calificativo,
juicios ajenos me resbalan
soy yo como yo he querido
ni envidio, ni deseo,
ni quiero la ajena sombra
construir puentes en mi corazón
escaleras que lleguen al sudor de la creación
vida sin vida elevada estima
para llegar a la cima
que es que lo escrito
un ser lo recuerde
y vea mi mente que arde
por la voz de acompañante
mujer ausente.
El Castellano
Sidra de boca:
Trémulo desliz
donde me camina
el linde solitario de humanidad,
lejana en la vid de la suerte,
en aquel risco sin carne,
en tu silente boca
que me trae en vaivén
del preso por tu sonrisa,
embotellada, deseosa de complacerla
en alud del fantasma
que me trepa
para decirte lo más común
avanzo mi tiempo
y me nace un fénix
que te alimenta;
el espino ardiendo lo alcanzo
con una sola de tus palabras
me invento un tiempo
que avanza marcha atrás
para renacer cada vez
y al reloj de Sol amarte de piel
avanzando mi ejercito
todos tus rincones
nada está de acuerdo
más que mi deseo por ti
por el que amo todas las existencias
y me gusta este mundo
para emborracharme de ti
más frecuente que poco.
Te adoro bebida espirituosa
de cálida sonrisa
por el que soy un hombre sin prisa
que te asalta de prisa.
El Castellano
Luna de lobo:
Luna sempiterna
Luna plateada de mi cielo, en las noches voy a tu encuentro,
pero te escondes entre bloques de hormigón y cemento.
Quiero verte, pero incluso te escondes, por las violetas ramas.
Mas los dragones, del cielo sonámbulo te acarician.
Cielo obtuso, de sueños fluorescentes,
tú, de color líquido, solo templado con miradas intermitentes,
por el tiempo de espera angosto.
El murciélago baila con el colchón de tu luz,
rasgando sombras,
para reposar siendo una más.
Oscura nebulosa de tu vítreo trasluz dime,
por qué te siento incluso estando solo.
flores opaco reflejo de luz violeta incluso de noche;
artificie luzzae.
Lucero de ciudad,
rompiendo la obscuridad.
La noche se detiene para sentir que estás conmigo otra vez más,
noche está llamando moviendo su tranquilo velo, noche llama una vez más
para sentir que a mi lado estás,
recuerda que tus ojos tienen sangre
recuerda el viento que aúlla mi nombre
recuerda la luz que tiembla y cruje la noche en las pupilas
recuerda que me hablaste de amor en el tiempo que cae muerto
que pactamos con el hielo la vuelta del invierno,
recuerda cada latido de oscuridad que llama a tus venas de humo
recuérdame en la eternidad del beso, en cada rosa que robe tu cuerpo,
recuerda que vivo para ti dando voz a la soledad asesina,
la flor vive soñando que fue mariposa y abeja,
vive durmiendo la semilla enamorada de la tierra para despertar
y enamorarse del sol,
clávame estas nubes de sangre en el hierro de mi destino,
se me negó la luz encadenada a esta tierra sin cuerpo,
solo tú me sientes en este camino que no lleva retorno
solo espiral anhelada de renacer
el tiempo ya no nos puede sostener
camino buscando el frío en este calor que quema el alarido,
en la puerta del infierno caído,
al viento le diste voz,
a la lluvia la nombraste lágrimas de mi ayer,
le diste ojos a la sombra para mirar,
el cuervo te dio sus ojos,
la espina caía herida, la caricia retornó a las polillas,
la vida marcha deprisa cuando abras los ojos ya todo habrá cambiado
solo encontrarás que seguiré a tu lado
aguardando tu otoño y la caída de tus hojas,
esperando que seas mi acompañante en los siglos y milenios que nos condenaron,
encontrarás esta sed del cielo en cada silencio muerto,
en cada raíz que grita en su tierra
toma de la vida lo que quieras, siembra tu aliento en cada tierra,
tú todo lo tienes yo solo soy una fantasma que sólo tú ves.
El Castellano
Criaturas en el alba:
Alba marcada sin aurora,
luz en inocencia de flor silvestre
al pálido fulgor de estrella
sobrecogida.
Cristal puro de oscura mano,
Nacen virginales céfiros
ruedan laderas suaves
que grama blanquea,
destino de esta infame senda,
vivir acabar sorbo de postrer respiro.
Azur marcado nacidas estas criaturas vespertinas
de celeste insignia.
Por cuántos labores los ojos desplegaron,
secuelas flagran y caracolean,
soterrada la ventura,
un prado arrancado a la semilla,
una dicha conmensurable,
ajuar lumínico de espíritu,
árbol de ceniza vestido.
Destellaba la rosa-cruz rendida,
sus nueve caídas.
Sotos sin prisa arañando la retina;
calma de Dios personal
y sus heridas.
Imperios de ojos cerrados,
aguerrido albor, vestido
en sangre de brea,
yerta, flamígera, ascua prendida.
Injerto de toda soledad anquilosada,
sin quieta estampa fría,
procesos de procesionarias
en quitina sulfuran
que ellas caminan.
Mariposa negra y gris de ademán
nocturna venda que el ojo
no vea.
Abre el mundo
un soturno caballito del diablo,
estas criaturas esparcen destellos febriles
son sensibles al tacto
y desvanecen entre ocasos,
destierro en hierro de sangre,
sus almas duelen
sus vidas huyen.
El Castellano
Raíz de albor:
Broza esculpo,
sus pinceles verde azules,
idea, hazme temblar la espera,
que tu voz dolida sea lengua en azabache
de otra noche que ya escapa,
y su vena escarpe por cristales
de vítreo haz,
réquiem blandido en un cielo de espadas,
anudada en tu cintura desnuda,
áspera, erizada ella,
mi idea,
combatiendo ocasos leves
que te dibujaron,
caos febril de plateada rienda,
estrellas miles la amparan.
Su muda vaga entre cardillos de la dama
y su vestido amarillo
de rayos acrisolados;
alto templo de erizos seculares,
caracoles avanzan seniles
profundo tallo,
bella eres.
Bella en sueños no me hablas
yo me quedé mirándote
para decirte:
-Si te encuentro, nunca te marcharás.
Desdén en este mundo de secretos,
en este mundo de demonios
buscando paz,
cazador corriendo la noche,
por la vana luz
cabalga el cielo,
un aullido,
llanto de un lobo,
miseria enraizada,
cada triunfo una escarcha
en hoja escondida,
que a la mañana verás morir.
Abrazo mi calma podando,
desmochando
lo que mi espíritu yergue,
forrajes miles acampan el corazón férreo,
mi vena coagula
al sentir mi idea
que al ser pensado el camino
no abandona dictado sentimiento,
cinceles esculpen mis manos
que siembran este beso etéreo
por tu caracola.
El Castellano
Frontera de la letra:
Se enervaba el sonido del tambor dificultad, soterraña vista sin aspilleras refugio de luz bajo la tierra. Voló sin visión mi vencejo de arena, seguía levitando en el aire mi fantasma, encallecida la soberbia entre paneles de plomo, refresca la idea. Frío se miraba enlucido, sentado entre pilares de fuego, escribano de la estación meditando, esmaltada la mañana en ruptura del hielo, y sus rosas huecas. Sí me arrastré por la miel del beso esperando andar, madre viuda de ausencia ocupada, mi sombra hecha padre entre bruma y humo de tinta, rastrojo que viaja al hoyo del sol. Me blandía mi estima al peso del hierro, hacia la frontera de escritura, nulidad deslizaba la ventanilla.
Desvestido hueso, mineral candente
avanzando por un carril que marzo
bañaba sexual,
trinchera con centinela
aspirando humo de bruma,
entre amapolas nucas,
surcos de honor afilaban espigas,
el forraje decía quién más fuerte.
baldío encrespando la suerte,
ojal de tiempo florecido
del yerto mejor,
sentir entre la roca esperanzado,
luminosis despertando.
Me tumbé entre la dorada grama
me creció un espectro
que hablaba silencio,
y amaba sin importar su verdad.
Abierta zanja, abandonada sien,
era un miedo atroz
tejido a no tener mejor.
Noche silo de oscuridad
destapada, traspasas
mi ventana entre espejos
tu voz se hace la dormida.
Carruajes malvas del sueño
taciturno entre las espigas.
Fuegos y fusiles iluminan
tu dama de oscuridad
amanecida por soles
que bajo ella
parecen de trapo.
Canto a tus pestañas morenas,
alcanzando tu osadía
de oscura dama.
Llora mi azabache
por tener piel de arena
y brotes de la noche.
Por estos nidos carcomidos,
mis abejas construyen
sus panales.
En fúnebres procesiones
de todo lo que dejó de ser
y así descolgar
de esta araña la eternidad
entre sogas de mi calor humano.
Verdes ojos míos,
verde trigo
de mi verde sino.
La noche quiere
ahogarse en mis ojos,
que su sonido
visten y desvisten
por carcomas,
del mutilado iris insomne.
Es sólo sangre en tus ojos.
Telaraña de vorágine,
araña descendiente de turbiales,
de lúgubres pensamientos
de étereas raíces en punta.
Blanco sueño deborado
al compás de cuclillos nocturnos;
en ondas de listadas cadenas.
A la esclavitud del latido
encorvado trino,
es el final dictado
de la oscuridad;
la era lumínica
comienza esta esfera.
El Castellano
Corazón de agua:
Hondo conjuro,
poesía de tu voz
que se hace meseta,
sobremesa de cabales,
reniego al cincel abrupto
de transparencia líquida.
Un osar que llama a la puerta,
se visten quimeras:
verso arde y conjuga el beso,
por cuanto he conocido
es insuficiente.
No me alzaron
camaleones con mi nombre,
amplio silencio
secunde largueza,
como día de recta hoja,
piélago frondoso,
perenne estampa alzándose
en marejada de fértil tierra.
Recia infancia
en linderos de semillas regaladas
por las que nazcan hombres de hueso,
flor en mi entraña parda y austera.
Dura piedra todo corazón,
lustrales colores
hasta el desnudo cielo de zinc
y su verde tallo que no palpita,
no deja su hondo manso lustre
en sortilegio de su espejo
que yo místico sueño.
Me desconozco
en este sueño que la letra
me tejía buscando luz
entre la bruma,
encontré mi corazón de agua,
nadando, casi despertando,
mi leño sin cruz podada,
llegué a la oscura nodriza madre,
la tierra.
El Castellano
Son de mí:
Destellos de luna
que llora su azabache
blande el grillo su sino
a la hora que luce la azucena amarilla
sus galas perfumadas
se duerme la lagartija en su refugio
un grillo caza un autillo
me bebo mi copa de vino
el sonido duerme
otra noche estrellada
baila la llama
de mi vela
sera otra noche en vilo
contando mi insomnio despierto
el hueso de la luna brillará
su mística oración
de la penumbra llena
cuando mi yedra
trepó a tu ventana
esta noche de primavera
y el colchón, de tu cama
no te vale
para guardar lo que por ti siento
hace más frío que antes
o eso creo
seguiré mirando el reloj
a ver si se hace el día
y la luna me guiña un nuevo día.
Son juegos de luna
que otra noche
en mi lago se verá reflejada
el agua me cuenta de tu cristalina alma
que yo por ella colgaría
mi traje de estrellas
el azabache que llora la noche
se agota mientras miro mi almohada
será otra noche
que sienta frío en mi cama
el cristal se empaña
mi Dios está en la lluvia
cae de nuevo de la vereda a la rambla
la soledad se hace cuarto en mi cama
la cortina por la luna
cae iluminada
otra noche destapada
que cuento los minutos marcha atrás
de mi insomnio desvelado
una noche que corren
mis cicatrices silentes
y el sonido de los nocturnos grillos
se blande lejos
por crear un horizonte
cuando la zarzamora rige en espinas
su amor a la luna de plata
crujía mi alambre
que sostenía cobarde mi noche
son juegos dementes
del sueño taciturno
que quiero alcanzar
mi ventana está iluminada
será otra noche colgando de su hueso
por un despertar siniestro
de la pesadilla cabalgada
sosteniendo mi cigarro
me prendo el alma
por cumplir un sueño
que me hizo taciturno de tu sonrisa
que encendió tu amada voz
hoy soy simplemente yo
el que ha venido a dejarte un beso
quiero que me esperes por si vuelvo
a dejarte mi corazón entero.
Nueva generación de lo escrito
que junto clama por la vida
se afila en el alambre
el sentir de una mariposa
todo lo sentido cae marcha atrás
se derrite en el cristal de mi ventana
por si vuelvo guárdame un beso
yo dibujaré el resto
ilusiones ardiendo en la llama
altivas voces perdidas
vestidas de sueños rotos
oye mi súplica
rompiendo el momento
deshaciendo la noche
que corre por mi reloj de cuarzo
entona el son de un grillo despierto
hoy por hoy ayer por ayer
sigo siendo el mismo
o he cambiado
no lo sé miraré
el alba y su encanto
otra noche que cuelgo esperando
de tu pestañeo
todo por decir
y no dije nada
nunca podrás sentir esta soledad fría
que late su caricia
amamántame un camino a encontrarte
soy yo rezando al hueso de la luna
que vuelva el antes
todo se enarbola regio
en la tela de araña
reconozco
que he caído en el ayer
que me dibujó feliz
el puerto negro
hoy luce de nuevo
fuego intransigente que arde mi mente
segundo dormido deslizado
por un tiempo inerte
no será una noche
esperando mi muerte
por si tengo suerte
y bajo tus labios me mece
que sepas que yo por ti
deshojaría el horizonte
y el azul del cielo
dejaría su sangre
resumo en el borde del papel
mi latir preso de tu firmamento
para acampar a hierro un beso
yunque sonámbulo
sin dormir que me mira
y yo nazco en su sonrisa
para nacer el nuevo día
sin tu vida con mi vida prendida
cabalgo un ocaso
hasta llegar a la novena estrella
y henchir allí mi corazón de nuevo
como en un comienzo
mis grillos latieron de nuevo
el frío de mi corazón
ardiendo al cielo
el sentir preso
que me hace desearte entero
mi casa mi hogar y mi templo
lo guardas en tu pecho
cuchillas afilan el sentido
que vendrá a rodearte por si vivo
y por si vuelvo a tus brazos de nuevo.
Que sepas lo mucho que yo te quiero
y el cielo se cierra
sin tu sonrisa tierna
mi Sol está muerto
también murió
la luna de invierno
bajo tu pestañeo
que yo entero lo quiero
es el momento, es el tiempo
de clavar al firmamento
lo que yo por ti siento
y por la mortaja gris yo quedar despierto
nunca olvides lo sentido
que nunca se tornará lejano
sueños disparados por la boca de la estrella
nunca me olvides
no siempre todo lo bueno tiene un final
mi amor por ti
quedó en mi corazón sin apagar
y que el mundo gire y se estampe
que yo a ti en mi corazón
te tengo clavada a espina de sangre
esperando mi suerte
que un día yo vuelva a verte,
destellos en el horizonte
baila un día que te mezca mi caricia
buscando la eternidad
te encontré a ti de nuevo
y mi mi charco se hizo abismo
de todo lo vivido y sentido
que sin ti quiebra y carece de sentido
espero volver a la vida algún día
y que mi cielo de malvarosas se tiña.
El Castellano
20 septiembre 2011
A ti noche oscura te escribo.
¿Por qué no me das el sueño que tanto ansío?
Paso noches enteras de insomnio escribiendo poemas hasta
enloquecer, llevo ya cinco días sin dormir y veo que se van
mermando mis facultades mentales y escribo frases sin sentido,
garabatos en hojas de papel.
Me asomo a la ventana y contemplo las sombras de la noche como fantasmas,
deambulando sin rumbo.
Mientras apuro la botella esperando matar esos fantasmas de
mi cabeza que suenan como delirios con sus voces.
Me estoy volviendo loco.
Solo veo sombras y figuras que se dibujan en tu oscuridad como
demonios.
Sólo los gatos y lechuzas salen a cazar como los murciélagos.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo que bajo tu protección de tu oscuridad
ven salir los ladrones y asesinos a hacer sus acometidos
de muerte y delito de acero y sangre.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo.
Tú que no entiendes de genocidios ni de muerte ni de fosas
comunes selladas con cal y tierra ni de fusilamientos.
Tú solo ciegas la luz del sol y solo el fuego y los fusiles iluminan
tu oscuridad.
EL CASTELLANO
Ruido en el silencio:
Lloro soluciones
caminos opuestos
a verdades encontradas
ojos desparramados en las venas
de mi no pertenencia
a ninguna ventana de existencia
asumida en alas de un motivo
que haga correcta la dirección
en esta piedra viva llamada tierra
donde todos los ángeles cayeron
solo voy contigo
desde que vine a vivir
escucho el ruido del silencio
crepitar en la llama de la luz
sin conocerte conozco tus defectos
absortos, plenos, derramados en virtudes
somos lo mismo quizá
un camino dominar energía
servir empleando la perfección
tú no puedes oír mi voz
te hablo a pesar de no ser tu dios
desde este lugar sumiso
donde todo es lo mismo
veo caminar en mentira cabalgada la ciudad
elegí el suelo mirar
lo que crecía me hizo brillar
ideología ser yo mismo
allí donde te acaricia la palabra sin mirar
maestra la ley natural
que amo compañera
creencia más allá de la elevada conciencia
eclipse de mis soles de ojos
que te miran fascinados
para ser el último hombre
ningún resurgir,
ya quemé todos mis errores
cauteloso mi destino de nuevo hombre
carreteras del perdón sin motivo
uno luchando contra lo que le hace
no ser uno mismo
intrusos en los cielos
me llamaron llorando la verdad
obligación de acabar con el demonio
de uno mismo
invencible del silencio
escalo la tierra
uno amo la noche
dos amo la ley del dios Sol.
El Castellano a 07-03-2015
II
Poza del ruido en el silencio
gonde gotea y cae absorto el péndulo,
pulso en la noche,
noria febril de esquilmada razón,
espinas de corazones
que ya no sangran lunas de ataduras
ni huellas de números.
Plomo y verdín tan cercano
como tu sonrisa pulcra, afilada
en la piedra generosa que eres ahora
como regazo fuera del regazo
mineral lírico, ambiguo, galáico
como el pazo y su signo
denyto el muérdago y su tejo.
Tranvía que caricia enjoya
cautela de luz brava.
Estabas tú en esa cautela
llorando soluciones sin agravios
sólo estelas en señales.
Senderos abren opuestos a soluciones
encontradas.
Expandidos los ojos en las venas
de no pertenecer a nada
que haya existido.
Sumisión en alas de un motivo
que haga correcta la dirección.
De mi libertad recta.
Melodía de ruido en el silencio;
llamas arden su luz.
Con la conciencia de un ex-presidiario acuno
que nazco en este lugar sumiso,
donde todo es lo mismo.
Desde que vine a vivir sólo voy contigo.
Las corrihuelas en flor bailaron,
no se hicieron para damas
de silla y oficina.
Tallo regio de lápices,
no se diseñó para volar
como pluma estilográfica.
Muerte presente, cristal de mi rostro discreto,
eternidad azogada del mañana.
Ven, ven por mí, me estoy disolviendo
como asfalto en cloro.
Juega cariño con mis labios;
no están diseñados
y si se conocen es entre ellos;
abre y fecunda el cáliz
de mi sueño
ahora que caigo hacia arriba.
Como escama y espina áspera, marca
del final de los tiempos.
El Castellano a 07-03-2018
Ruido de nirvana:
Es solo ruido
en las hendiduras de mi calavera,
un iris doblado del nirvana,
un hastío florecido,
es una calma de mi dios solo,
un panal infinito de belleza,
fatal hoguera consumiendo,
desmembramiento de soles,
entre fulgores amarillos,
que el nocturno, sujeta,
sangre de acequias perdidas,
felicidad enjaulada
que algo me cuenta
de sus tulipanes amarillos,
por crisantemos helados
viaja mi esencia,
una noche que silba,
cantando con árboles difuntos de otoño,
es una vida de mi araña destapada,
un tejer sin estrella,
un álamo que ya no vive lejos,
derramada, acostada, nacida esta parca,
hoy yo sí estoy hablando,
mi sentido yerto desconcertando,
que era un ajuar de gotas del alba,
era un caminar somnoliento
por la carne de metal de esta azada,
quién fuese silvestre como una planta
en este mundo que se envilece,
destierros forzados de la locura de la ciudad,
escarchas dolientes entre mis sienes
que azogan solares póstumos
de mi serenidad alcanzada,
es un firmamento para cabalgar a voces
que lo mío es para siempre,
como un candor fulgente
en estas hogueras
que el aliento helado, de la vida cuecen,
era la cara oculta del espejo
un aullido de la fiera
que el tiempo arrastra
entre punzones enajenados,
avanzando la caducidad del hombre,
era mi suerte una rueda
y una hélice que no volvía,
era este tiempo como la dimensión
del pez muerto,
clavando cuchillos al éxtasis
de la creación ensimismada,
ardor de los mil fuegos
deseo haciendo bandera,
hoy no me arrebatarán nada
ni el destino que todo se adueña y lleva,
cruje mi calavera,
haciendo sonar este silencio duro,
desnudo mi chopo
queda ser como el rocío primero
para besar sus labios de mujer verdadera,
un viaje por su fantasía,
estoy flotando en sus olas,
disfrutame estoy volviendo realidad
nuestro sueño,
reinando este corazón,
siendo austero como un jarrón lleno en ilusión,
siendo caballero de tu dura sonrisa desvelada,
que acapara y acampa
el alma de mi polilla de cemento.
El Castellano
Redención sagrada:
Cuando los ángeles desertan a morir,
en los ojos de otros ojos
estás buscándome,
me despierto;
los dioses celebran
un silencio sepulcral.
Colores me evocan de la nada,
ruido cómplice aborda
como navío tiznado al 2025
senderos del mar de tierra
que abre mi lengua en tu guarida de boca.
Melodiosa suerte de la máquina de tu cuerpo,
tonos sobrios, vespertinos
absorben la mirada como filo inexpugnable.
Absorto cae el tiempo en tu sangrada candente
azada dispuesta, es tu verbo un franquear de desvelos,
que respiran estrellas fratricidas.
Es un solo cuarteado en siglas,
los soplos resplandecen vibran al son de nueva grama.
Sombras inmobles cuentan de tu respiro
infranqueable, por jóvenes tapiales
de tu inexorable, florido, grandioso desvelo
de metales,
cobres anidan campanas de media noche
aguardando el surgir de lo sepultado.
No frena la sintonía de tu saliva, una,
ensueños duermen llamando se cumplan los anhelos,
cuando los ángeles desertan a morir
tu mirada se enciende, abismos silenciosos se prenden,
tu voz se hace palabra.
Me sigues te sigo cariño de ternura dispuesto,
luz enraíza tu alma, efímera en mi mano,
vuelve a mí una paz que ni los nichos toleran.
contratiempo por fuelle,
magarzas de otoño,
corona de reyes en primavera,
etéreas hojas a solas peregrinas,
dejando embriones por verso,
capataz de siembra única,
al compás liberando golondrinas,
punto de Sol a ciegas,
es mi mente surcando brumas grises
que me acercaron.
Vagido indeleble,
fúlgido yo destellaba tu sien sin marca,
caliente al arrimo de mi ser,
valedera fuga sin ocaso,
un caracol en un verso montado, arrastrando:
sacado del pecho
como heraldo sin desquicia semblanza,
corriente arrastrando cadenas de errores,
fruto de libertad
y conciencia sellada a ciegas.
Comiendo raíces por hechos
en fruto divino insoslayable,
frío de noche
bañando la casa de lo eterno
llamada Diosa de tu entraña
mi musa bella.
El Castellano
Palabra sin boca:
Deshojo mi momento
para abrir la puerta helada
de un infierno flagrante,
me entablo y conozco al insomnio
y su hermano,
avanzo despierto un linde quieto
del pensamiento ensordecido,
tapias derrumban
azares de ojos abiertos
y parpadeos veloces,
resquicios oníricos
que dormir es para el vivo
agua en sequía.
Resumo que venzo
quimeras ultrajadas
y anillos sin manos,
después de mi vida
sangre en los ojos acaso queda,
resguardo al vil enfrentamiento
padre de mi conciencia enclaustrada,
otros tiempos mejores
ya no sueño,
todos marcharon sin balde
dancé en la oscuridad de mi mente
y vengo a verte.
Sigo de frente
ocasos dejaron su malva rosa
a su suerte,
pensamientos casaron su negro
con el color de la tierra
sin germinar
sin brotar simientes frías
que suerte canta nanas.
Granate lustre postrado
que fue desertor,
afilo mi colmillo
hematite nace dispuesto.
Es una sombra que fue destino,
abierta a la altura de fauces
y su hocico,
es la generación del pez muerto,
carpas de personas bogan sin aire,
otras aman lombrices con mandíbula.
Yo amé una lagartija
hasta que tiempo quiso,
desquicia febril no traigo,
por un pantano soterrado
nadaba mi sentimiento,
recurso de memoria
no era ausente,
ni se avivaba como lumbre.
Directo al patíbulo de la suerte
fueron las venas y su sangre procesionaria,
un marzo que corrió sin verte,
metal de espera intransigente,
acaso soy gente,
seguiré sin preguntar a mi mente
todo sea que conteste,
un camaleón fugado
de quien yo era.
Agresivo
sí hasta la muerte,
sé quien soy y si vienen por mí
no seré yo su suerte,
lit C et summun canae,
miles dei lumen
apostado y recto a vencer,
insectos caminan su linaje
respiros blanden peces en tierra,
alto alto como sendero a la nube
me vio nacer
el mundo y su mente ausente,
bondad relucía sin prisa
quién afortunado la asesina,
¿acaso yo no estoy durmiendo?
parada en el bosque demente
que mi hambre vierte,
llegó el momento
divisaré mi juramento despierto
porque soy humano
vivo muerto.
Förüq 04-03-2018
Cepas de un día:
Sangre que tiene bordes,
coraje espectral de imposible azar,
como pez dorado rige el sentido.
Día o respiro, fugaz aleteo sin calma;
acto que baila en bigote del pez gato.
Es en esta suerte la vida del bastardo,
flancos ocres tiñen el linde
por sombras vanas que arregazan
la prisa del estambre.
Cómo se tejió la expectativa
acaso fue sin semilla.
Al párpado encumbrado
azoto que lanzo
un generoso transporte,
aire o humo, acaso eso.
Espectral brisa que cubre,
fresca flor en soto sin nube.
Vivir en muerte batiente
tender tierra y escribir sangre
a la Rosa.
Igual se aventaja el agua sin forma,
de viejo silencio,
de final desempeño
como prender la estrella
en su mismo fuego.
Abrir la tierra y sembrarse
eso trae nuestras vidas milenarias
de rebeldes índigos.
Diferencia ensordecida, muda y ciega,
impalpable, insensible,
inmutable, insoslayable,
reverdecida, engrandecida,
incuestionable,
regencia sostenida,
con lo que os determina
a ustedes abrojos vidas de un día.
El Castellanoº
Espiga de agua:
Con el filo y brillo reluciente
está la espada,
blandiendo surcos
en fosas funerarias.
A lo que su empeño sucede.
Quilla de un flagrante monte
surcado por el metal
de hilo de cobre,
sonaba con el viento
haciendo temblar calaveras
en lo alto de aquel poste de telégrafo.
El viento tenía estridencia
y lamento seco.
Digno a desatar quimeras y bestias rectas.
Capaz de dar voz a lo inerte de la vida.
II Hoja:
Allí plantado como se siembra una pipa
me encontré, detuve el sonido
entre escalas y cielos soterrados.
Planté una pila de lluvia sobre marzo,
contestó entre gramófonos la tierra;
una melodía jamás interpretada
y jamás semejante o similar
a haberla escuchado una vez.
Era como un maullido entre gramas
y bocas sedientas.
Como cerrar y esperar que la compuerta secara,
como desplomar semillas
y aventar espigas;
plantado como una sola
de carne y tinta
que la espera viola.
El Castellano
AZUR DESNACIENDO:
Esencia intangible,
no hubo na terra,
que ni dioses
osaban mirarla,
ni albergarla;
ella sollozaba,
cual flores, incredulidad
brotaba.
Ella era encargada
de sembrar en ellas,
rocío perplejo
que en suelos germina.
Pureza
en venas;
lo que la perfección era.
Crisol insostenido
por cauces febriles;
inteligencia
en mares secos;
abejas de ideas,
colmenas
con intelectos graves.
II
Que cubre valles y peñas
inusitadas
y sus penas ahorca;
su misterio
enhechiza toda alma
quién arrullarla sin dañarla pueda,
será dueño de la llave
que encierra a la virtud
no enseñada.
III
Cae la noche,
sobre ingrávido
lecho de mi juventud
acostando luna de cuarzo
entre áspero frío.
Cuerpo mineral candente
quieto en pantanos de tela,
retorcidos sus destellos
en esta nube de leche;
el fango fragoroso gira,
imploro a esta luna que ame,
y el morado cielo ladea
mi sangre verde.
es por este escarabajo
que llega el verbo.
Soledad, soledad tus pulcras alas
que vencen auroras de adoración.
Aurora funesta clavada la hora
vorágine o trasiego
LUZ que ignora
si acaso nace.
Tu liso, amarillo barco,
de oscuro torso.
Tus infinitos beso
dime corazón al apoyo
de tus párpados.
Cuál profunda verdad
en esta espectral rivera
de ondas líbicas.
Espuma densa
de océano de ideas entregado.
Profusa ascua invencible
es mi dolor que más no quiere
retirarse;
que sentencias invade todo ojos
montaña de hojarasca;
cristal de pulsos
que tu imagen toca.
Suspiro fresco
en labio extinto de sombra
día que no se encuentra,
su densa forma.
Cuerpo con agua de estrella;
querer vivo que llega al aire,
tiende y espera.
La muerte que renace
por fuegos de brea
en el aire.
Abren batientes pétalos
de viejo silencio esquilmado
estallado esplendoroso.
Acurrucados sobre un lecho
que la brisa abre;
trocados rayos de sol
esquivos, en plano de verde follaje
por azur causados.
Astuta golondrina encontrando
la dócil rama.
Mundo sin mentira
de la vida,
se abre este mi manantial,
reluciente de esmeraldas, desposeído.
Y todo siente:
-Que la sangre miente.
IV
Terruño ojo victorioso
aplaca sus arpas irascibles
estrujando abismos dolorosos,
petrificados.
Reniega la boca vegetal
casi viva
promesas en frente de violetas.
Cantan amando el claror
lírico, estremecido
coágulo de viento
en cientos de porciones
esta luna quieta
que semejanza quiere.
Descubierta la zona umbría
donde yago de yacer.
V
Aplasta mi sombra
contra sí misma
derrumbando opacidades
de granates profundos,
ballesta súbito forjada
a tu entraña.
Derrite mar de boca
que pide extensa
negra noche
y sus espectrales corceles.
Tiembla que rueda
paz, orgullo bello.
El desliz, ráyame firme;
conservo mis principios
numerados.
Reluce mi roce pulido;
entre-cielo asido;
palpita mi iluminada tristeza,
haciendo camino.
Vendrá mi torvo grajo
se constatará mi lucero roto.
Turba mi aliento
bajo mi pecho la quiero
con montes limpios
enturbiados por sarmientos.
Delinean este viento.
Lividez plena,
fuga el desaliento
con todos los jirones
de mis ascuas.
Diáfano, ancho, repleto
a trote primerizo.
No cabalgarás,
no cabalgarás si no es conmigo.
Cabalga, cabalga
el llano, que sólo a mí lado
cabalgarás;
cabalga que sólo a mí encontrarás.
El Castellano
cabalga con su espada en mano
todo tu llano.
Hasta divisar todo lo que amo.
Sembrada el alba
que apacigua
la noche que negrea
en estela conmociona
mi luna extensa
que bajo ella,
siempre
estoy en taciturno hechizo
contigo y mi falcata.
VI
Embeberme la luz
sin forma en ojos distantes
luz de aquel fulgor purísimo
allá lo oscuro
en tiniebla sin padre.
Yo besé las amapolas de los campos,
buscando me embebieran
la forma que como eco
apagaba.
Heridora en cascada
se aposentaba mi bondad
aquietan aguas longevas
la feroz sien
que me dio mi padre.
Nota:
Embeberme la LUZ
sin forma en ojos distantes
LUZ de aquel fulgor purísimo
allá lo oscuro
en tiniebla sin padre,
yo besé las amapolas
de los campos
y heridoras en cascada
me entregaron sus hijas.
Nacidas tras yo sembrarlas
esta primera lluvia de septiembre 2018.
VII
Cuchillo que tu voz asesta;
mi pecho sin coraza hiende.
Camino mi desvelo enjaulado,
cuenta atrás de la tierra quieta
y sus grillos asolados.
Oh me olvidaba.
Esto es la resurrección.
Indemne entre losas
de azur firmamento.
Respiro entre rosas
las espigas por llegar.
Dilata los verdes la tierra
sosegada dicha trasiega,
un día cenizo
de esta la otra primavera.
Estoy escuchando semi-recto
el retemblar de hojas huecas
sobre la gravedad
de un arroyuelo que fluctúa
cauce entre la copa
de árboles;
sobre semi-vacío cristal
con limpia brisas
encima de un blindado
cantaba, dictaba
antiguo sargento
su presionar, disparar
como hueco
en la ausencia del polvo.
VIII
Abrid la ensenada al capataz
del brillo primero.
Tímida la floresta
escondía sus amapolas.
Núbiles gestos danzaban
la cabeza en loma
que silvestre evanescía
el coraje de la flor.
Vuelto mujer por Ostara.
Patio de perdices
que soslayaba
entre el quejido
de carrascas afiladas.
IX
Hacían sus hojas
mi última espada.
A mi izquierda
el peso
de su hierro estable.
Sibila destrenzabas
tu cándido mirar,
en fraguas de belleza,
inviolada.
En tus altos,
profundos
ojos de ámbar.
Luna que en fractura
recorre mi tejado de alma.
El Castellano
IRIS EN OJO DE SANGRE:
Vena del cielo:
Solitario rayo estertor;
siniestra umbra,
escala la cuchilla
de tres arañas colgando,
hoy es por mí
nunca quede huella,
destino en azar hendido,
lleno, repleto, asido
en el origen primigenio,
madre ella del color,
asume este sentido yerto,
agujereado en haz luminoso,
nitidez en halo
de nocturnal visión
derritiendo,
devorando astillas primas
de subrepticia enhebrada,
padre flamígero del fuego soy,
elemento hermético
de tres sentidos,
arder, conquistar, consumir,
estelas abren runa clave
Gemineye,
sangre de este ojo,
perplejo soliviar
en azur abriendo pulcritud
inabarcable,
inicio de sabiduría en vena,
muerde,
acaba esta espera,
raudal extenso de pura visión
en certeza
de sentido superior,
cristalina esencia
descendiente
sin parpadeo fugaz,
crisol de valles
y gramas feroces,
deslices del afán superior,
dar sentido a mi vida,
ojo de sangre calzo,
cabalgo anquilosado designio.
Ancestro del lobo único soy,
perplejo sentir asido
del diablo en simiente,
primer ángel caído consumado,
errático vuelo soterrado,
magia del silencio encumbrado.
Visión, y sueño,
indescriptible con lenguaje.
Si te ocurre lo mismo
no eres capaz de usar razón
y ordenarte abrir los ojos
y dejar de ver;
como un corzo paralizado
por un lobo estarías,
imposible por sensación
hacer desaparecer lo que observé,
por extasía, incredulidad oxigenada,
belleza en percepción,
la pureza en sueño
en imagen mental
que escapa a todo,
vi el azur
por decirte aproximándome,
en un ojo femenino
lejos de este mundo
y de todo lo conocido
o descrito,
fué una sinestesia recta,
sin ser más que tocar el color
de la Oscuridad nacida
a ojos cerrados,
sumisa, displicente,
involucrada en crear
sonido del vacío absoluto,
sigo perplejo y asustado.
Es lo trascendental del infinito,
como ver el origen
del color formándose en un ojo.
El azur, el verde turquesa,
y azul mahón
no te puedo decir más
que esa belleza no me cabe en el pecho,
por algo sigo viviendo
no hay azar enraizado,
hay perfección.
Luz me arde ahora
en el mirar ciego del sueño
sin miedo sin embargo
saboreo el viento,
los cielos me poseen
de nuevo sobre los años
que ellos son,
algo llega a la rosacruz
de ayer
y sus nueve caídas
de sus ángeles despiertos
en tu sueño me ves invernando
dorando mis pelos de murciélago
bailo el colchón de nubes
que sostiene esta mi noche
para desaparecer llorada la tierna cara
saboreando una sombra más
que me vuelve
imperceptible
muerto sabor
de obscuridad sin faros ni luces
ni fusiles que matan hermanos
de su tierra y sangre
crecieron los caminos
y el rojo fuego versado
brotó en flor de amapola venidera,
dime qué debo hacer
¿Algo erróneo?
No puedo volver atrás
se sostiene aparte
la fuerza que nadie alcanzará
nada por cambiar
todo está hecho
algo que asalta aparte
puedo volver y empezar de nuevo
sin mí, sin vida, sin cuerpo
sin lo que me ata a éste mundo
mañana veo el futuro
la destrucción del pasado
quedará atrás.
Corpus, anima, crescens
sol refulsit,
lux
et patientiam meam scientiam
florum, est vita
nosotros no somos lo mismo
la bondad sangra las venas
gustos, deseos, vencer,
arder sin perder aposta la partida
esa que las hiladoras tejen
momento del momento
nacido absorbiendo el hilo del tiempo
las piedras lloran flores
el final es volver a empezar
viendo y amando
el ancla errada de mi lugar,
continúo al cuervo
que me vuelve más fuerte
ave más inteligente de la faz
poder de la misma
energía
en tormenta de conciencia
siendo ese rayo solitario
que partió todo inepto,
inconsciente tormento.
El Castellano
MARGEN BRUTO:
Vagido azar indeleble
quebradizo como abrir
la nuez del tiempo líquido.
Sostenme al arrimo de mi pecho,
no idéntico, no pretende ser
fuerte, encorajinado, denso palpitar
en soberbia luz destellando,
supervivencia en retórica translúcida
rayo y secuela de impávida nota.
Azogue de medrosas secuelas,
abiertas de azar hondo y arcano,
silencio; entonar diviso
todas las trompetas de los ángeles
un prado flamígero
en miles lenguas ababoles.
sangre de tierra transmigrando pudores,
por cuanto mi fecunda indecencia
llegó a conocer en disparo,
en disparo propio
en nuca del siniestro azabache,
fronteriza rivera de álveos
y azucenas nocturnas.
Florece una paradoja exiliada;
susurro en tinta roja
no ceso de cantar para escucharte.
Estruendosa quimera
en inteligencia seca,
secuaz de millares pensantes,
camino de zarza y endrino
camino de vida y un sino,
fuente, abrevadero virginal
descorchado, símil destilado,
por cientos renacuajos ideas.
Rebelde soga a mi condición en una encina,
vaivén en veleta con el viento
raudal trenzado, en mimbre cabalgo
veleidoso, regio, espina sangrante,
tránsfugo renegado a morir,
rebelde índigo de 1989;
hidalguía desdeñada por tierras
y cuchillos de espigas,
con ocres carraspeados
aguardando ababoles matutinos
semblantes esparcidos
como entes rutilantes a la espera
de haber nacido.
Encumbrada la libertad
de nacer sin parcela;
resumen de vida de una vida
bajo tierra.
Rumbo a zarpar
la vía astral
que todo lo acontecido
es la historia de un muerto.
Ajeno seré cuando silencio
deje de ser concepto poético,
como azul duelo de espadas
que separa toda naturaleza humana.
Tu vida mi golondrina
nueve cerrojillos
azures de tres llaves
hoy abriste uno
de los indescifrables,
anhelante, deseoso,
inescrutable
rindo mi oscura dicha
sin desliz condenado.
Fuego soy.
Elemento compasivo.
El Castellano
DENSO HALO NOCTURNAL:
Fuentecilla parece mi noche oscura,
fuentecilla retozona,
y de verdes lamentos quejumbrosa
como sombra leve de mi pájaro piador
que acuesta a dormir su entraña.
Sombras largas que descubren
el canto los lisonjeros grillos.
Blancura y azabache descansa en la arcilla
el nido mi golondrina.
Al fresco respiro de mi chopo soñador
lanzo un severo destello argento.
Longevidad imperial cercenada
como retazo de persistente
carcoma manida a mi verde intelecto
grave;
embaucaría sin tenerla
todos mis instintos,
todos mis impulsos.
II cuartilla
Canta , canta mi pena azul
sin ocre zozobra.
Abre el verde ramaje ,
a la espesura de mi idea.
Entre un camino serpeaba
como culebrilla de un destino azaroso.
El murciélago castellano
rasgaba bailando, ladeando
el cielo mullido
de levedad de colchón sin luz.
En sintonía opaca que rodeaba
y acariciaba.
El cielo abría su sangre a la noche.
Un sopor de estrellas
que en este verano no tardaban,
y el rudo vigía ciprés soportaba .
III cuartilla:
Bajo tenue luz de luna
que los sentidos arrugaba
y mi fiero ciprés de lanza colgaba.
Avanzaba por el camino
los álamos,
como un sendero
en cal de maderos acenizados,
rumbo al Valhala.
Alumbrado , rememorado,
anhelado
por todo guerrero .
Era un olmo frente la tapia
de un cementerio
en Fuente la higuera.
Caminillos de hormigas dispersaban,
desplazaban los vástagos
de forrajes venideros.
El Castellano
TU AGUA CIEGA (SANGRE)
Afilo hasta pulir el filo
de tu sonrisa yacente,
entre mi pecho de piedra;
sonríe a tu agua que no se piensa,
ataraxia momentánea
en sangre esquiva verde,
plomo largo de idea batiente,
cesando terco y fructuoso aljibe
donde se almidona la sed de tu cicuta,
surco cielos extensos
de golondrinas cromáticas,
esperando ponerlas nombre.
Acantonado se estría mi respiro,
cromo que abre el tiempo,
por nubes de besos de zinc,
acrisolado mejor extasiado
el vértigo en lienzo
sin melodía ocre.
Desnaceré
y no acabaré de irme
sin regentar
tus reflejos muslos férreos
en musgo de caricia anhelante,
de abrir la noche
dentro de tu párpado cerrado,
abierto a dulce relámpago
de mi color áureo.
Albino se ciñe mi sino
preguntando si un alba
me oscureció el cabello,
acaso sueño,
perpetuidad de constelaciones
y raudas estelas
que guardo en mis bolsillos,
ninfa, pléyade, musa
de acuartelados suspiros
entona tu arpa notas de agua,
abiertas al iris.
Abeja de esta mi escritura dicta,
tejer la celda,
y el pólen será la letra,
cuál la reina oscura
que quiera miel de flor sonrojada
que espera,
tibieza en sueño de metal,
hematie sanguíneo
que tu surco devela
y avanza en punta de lanza.
Llamada prosa a 23-08-2018
El Castellano
MEMORIAL VETUSTO:
Despierto mi criatura;
tú no comprendes lo que yo te quiero,
por tus manos hacen nido las sedas;
falanges silentes, cumbres
de cuanto mi placer dispuso
asúmelo todo
en tu pavorosa grieta
de brillos fugaces
y transeúntes luciérnagas.
Lucifago apodera
tu nitidez severa.
El poder pudo
lo que el querer expuso.
Osada no es mocita
pero oro antiguo luce
en conocimiento.
Que a imaginación prende fuego.
II cuartilla
Luz de la sombra
de tu carnal espera,
anida golondrina
mis campestres manos.
No habrá retroceso
ni vuelta de hoja
sin enraizar nuestra alma.
En vértigo cobijado,
sublima mi dicha:
junta conmigo tu vera.
Rito de Sol y ambrosía
de padre Lugh.
Perversión esquiva, llamada
en retazos de cumbres flamígeras.
Apasionada dame tu voz.
III cuartilla
Anatema me anuncias
por tu opio en letra.
Todo es negro,
hasta el amor.
Júrame la vuelta de una lluvia
de tu boca.
Mi arco es ballesta.
Ausencia llama por sí sola,
a exigir unión del eje
y la orna.
Cuerpo de metal,
agua de su espiral.
Pureza consecuente
deslices y febriles osadías.
En plantilla de sangre.
El Castellano
CORNUCOPIA DE ESPEJOS SEVEROS:
Manso río de tu frente
tu tenaz blancura duerme.
Confía mi raudo deseo
a todos los dioses.
Vides ut alta...
Piélago ferviente
tu dulce entraña nace.
Vientos hondaban irritados
fértiles voces
acepta que en el campo de Marte
sembré tu dicha.
Abrojo puse en rinconcillo ofrecido.
Nireo empujando
su hermosa lanza ciega,
brillan de Pirro
encendidas flechas voladoras,
este rigor blanco y desnuda,
que aguza
favorita Perséfone,
aguas puras avanza Nearco,
soberana musa Calíope,
no baja.
Cadenciosa lira abre los cielos
en funestas auroras.
Melodía descende caelo,
y riega los bosques de Bancio.
Expresión de mi deseo en espejismo
oírla,
en todos bosques
y arroyuelos
eterniza.
Esta fatídica región,
de dioses dirigiendo mortales.
Yo por ellos
y mi obra
estoy que beso el suelo.
El Castellano
SOPLO DE CONJURO:
Veo color de certeza,
color a la esmeralda,
por follaje caduco
de ilusión adusto
en noche silenciada;
halagüeña tiende
su cuerpo, negras dichas
como el tiempo no llora;
en albo espíritu
en suelo sin hallar
bosques y sus frondas suaves.
Pliegues de sombras
bañan sus pestañas,
nítida y hosca
lejos ve en flor
mi sendero castellano.
II cuartilla
La espera sonríe
lecho de tristes ecos
y encajes de apenadas auroras.
Dulce cicuta al rayo acrisolado .
Puro mi aire
de luz enrojecida.
Vistas en colas de lagartija .
En ojos de araña ,
no se valla ,
conjuro sopla
en alas negras.
Vivaz tordo
en busca de lombriz
de idea anhelada.
Nubes de éter
en agua ardiente sin agua
ni limbos profusos.
III cuartilla
Verde transparencia
en canal llano
por arroyos fluye
sin balde;
quejumbroso término
de mi amparo .
Camino a relumbrado
misterio,
adoré la llanura muerta
que mis fuerzas aviva .
Tardía arranca oscura arboleda.
Sombra sin esperanza,
casi viva,
muerta la precoz flor.
Amima la pupila ciega,
descanso sin ancha lengua
sobre tus pulcros muslos
ensortijados.
El Castellano
LUGH CABALLO SOLAR:
Lugh Solar y Poderoso,
jamás a ti te hable el olvido disuelto,
ni se rija tu onda luminosa como tronco esbelto,
digno a abatir el rayo,
noble melancolía por tu madre difunta
Tailtiu,
en el alto cielo,
tu grandeza
sea reguero de oro.
La tierra secunda en nueva cosecha
por talentos colmados a florecer,
viento sonoro guarda tu hermosura
Rey Padre,
El páramo yerto perecerá
en ámbar blando
de aroma besando tu frescor
de vida nueva.
Abatirá la sombría dulzura la tierra,
ilumina mi pluma al honrarte,
suspiro de mi estruendo crepuscular;
nombro al pájaro misterioso
que te pertenece
cuervo que otorga el anochecer,
Sicut nubes, quasi naves,
velut umbra.
Años pasan yo busco mi recto yermo,
triste aflicción por aquel tomo de tierra
como las sombras vaporosas.
A ti Creador de luz,
acógeme, pinta esta mi noche negra,
amigo de imagen solar,
soy por cuantos Soles he nacido.
Por sosiego de tierras ignoradas
dame su gloria.
Camino afable con tu candor a seguir,
blasón yo no pido
ayúdeme a desplegar y sembrar mi porte,
en tierra a cabalgar
y deslumbrar.
Lughnasadh, Lammas, abro celebración
para generar nueva vida
en cosecha nueva
limpiando en tu nombre Lugh,
toda tierra.
El Castellano
SINS OF MY SILENCE, PECADOS DE MI SILENCIO
Inicio de la Rapsodia nocturnal,
I
Canción. capricho, concierto, cantata, rondó, estudio, preludio, obertura, oratorio:
Sins of my silence:
It's only you it's only me,
the line is forever,
into submission,
burning hell
surrounding my life again,
spring everdone,
it's scream time again,
for this sky,
all hopes coming into the earth,
river of my sence,
frozen angel
I am the man
beautifull lies of you,
grow your heart
inside my head,
slippy born again,
call my doock to close,
you are my sea and my boat,
silent scope you imagine all,
shipper close,
I am starting these,
can hold my arms,
the night sounds again,
my killing time,
of sorrow,
and my tenderness floating by,
upgrade my destiny,
I am forever,
I am your pain,
I am walking your street,
open skyes,
fly again inside my brain,
blood is drank
by my vampire in vein
beautifull eyes,
beautifull mouth,
it's time for eternity,
I am forever,
past my time at the stone,
broken eye on ice,
my eyes on fire,
burn the sky again,
I will your breath,
I will your strenght ,
eye blind,
my silent dream of you,
my spirit fly again,
water, fire, earth, wind
my soul is creating a new kingdom,
full of pain walk walk don't stop
it's my power of the light
inside this night.
Doom I will forever in your blood.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Solo eres tú, solo soy yo
la linea es para siempre,
en la sumisión,
infierno ardiente
rodeando mi vida de nuevo,
primavera siempre,
Es hora de gritar otra vez
por este cielo,
todas las esperanzas que llegan a la tierra,
río de mi sentido,
ángel congelado
yo soy el hombre
hermosas mentiras de ti,
haz crecer tu corazón
Dentro de mi cabeza,
resbaladizo nacido de nuevo,
llama a mi muelle para cerrar,
eres mi mar y mi barco,
Alcance silencioso te imaginas todo,
remitente cerca,
Estoy comenzando estos,
puede sostener mis brazos,
la noche vuelve a sonar,
mi tiempo de matar,
de dolor,
y mi ternura flotando
actualizar mi destino,
Yo soy para siempre,
Soy tu dolor
Estoy caminando por tu calle,
cielos abiertos,
Vuela de nuevo dentro de mi cerebro
se bebe sangre
por mi vampiro en vena
ojos bonitos,
hermosa boca,
es tiempo de la eternidad,
Yo soy para siempre,
pasado mi tiempo en la piedra,
ojo roto en el hielo,
mis ojos en llamas,
quemar el cielo de nuevo,
Yo seré tu aliento
Voy a ser tu fuerza,
ojo ciego
mi sueño silencioso de ti,
mi espíritu vuelve a volar,
agua, fuego, tierra, viento
mi alma esta creando un nuevo reino,
lleno de dolor camina camina no pares
es mi poder de la luz
dentro de esta noche.
Condenaré para siempre en tu sangre.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Darkness
Inside my head
there is something climbing by,
calling and calling again
my body assemble
calling to the earth, wind and fire,
kissing my self control,
art of conflict my self control
loosing my old blind generation lost,
full of pain it's runnig again,
restores my mind,
inside my body to the earth,
love shoots again,
you are my soul,
you are my pain,
I don't belive in me
this kind of brightness,
killing and killing once more,
I'm loosing control,
my delight,
my espirit
walking by the streets walks alone,
I could never be the same,
involve me in magic,
I will shaman of the new wind,
sadness could describe you,
in my floor healing insane thing nevermore,
and nevermore be the same,
I need darkness. I need shadows
to sleep and oncemore wake up for be the light,
in my darkness nights I will be with you,
my wonderfull,
my bright of shadow of my tenderness,
climbing the line of the horizont,
killing my eyes of full hope,
be my ilusion nevermore,
my kind of flower of this light surrounding dead earth
of dreams , thoughts this kind of madness
killing and killing my self life
because myself is yours
and you surrounds me
mother of darkness.
El castellano
Halo umbrío:
Oscuridad.
Dentro de mi cabeza
hay algo escalando,
llamando y llamando nuevamente
mi cuerpo ensambla y encuentra,
llamando a la tierra, viento y fuego,
besando mi autocontrol,
arte de conflicto mi autocontrol.
Perdiendo; mi antigua generación ciega perdida,
lleno de dolor, está corriendo de nuevo,
restaura mi mente,
dentro de mi cuerpo a la tierra,
el amor dispara de nuevo,
tú eres mi alma,
eres mi dolor.
No creo en mí
este tipo de brillo,
matando y matando una vez más.
Estoy perdiendo el control,
mi deleite,
mi espíritu
caminando por las calles, camina solo.
Yo nunca podré ser el mismo,
involucrarme en su magia.
Voy a chamán del nuevo viento,
la tristeza podría describirte,
en mi piso curando locura, nunca más,
y nunca más ser el mismo.
Necesito la oscuridad.
Necesito sombras,
dormir y una vez más despertar para ser la luz,
en mis noches de oscuridad estaré contigo,
mi maravilla,
mi brillante de sombra de mi ternura,
escalando la línea del horizonte,
matando mis ojos de plena esperanza,
sé mi ilusión nunca más,
mi tipo de flor de esta luz que rodea la tierra muerta
de sueños, pensamientos este tipo de locura
matando y matando mi vida personal
porque yo soy tuyo
y me rodeas
madre de la oscuridad.
El Castellano
Devil inside my head,
singing my letter of no-life,
lyrics of my home inside
the dark flames of suburb burning
without feeling of unknown path
signals of the dark know as my army
devil god of my self,
Me the dark god
the end and begins you know my name?
I'm sure not, well I like
no name only denomination
the sun and the flames flows
in the eyes of the eyes
you live? are you sure?
only your mind lies to you
red heart, red blood, red fire
red rose, red your cross
snake your breath you remember
you know who you are
the night falls wake up
needing new life needing darkness
to feel you alive
reality on wrongs directions
exposed with one only one finality
unifique I wake up
in this body you have to rise up
to loose your self control
to exterminate your pain
and destroy all you have
nothing real you have
love my companion
that the side of the other side streams
the line of your side your solitude
my loved victim of love
three desires, one: ask you to me life,
so I have your soul
two: have your legions
three: love
your condemnation
is myself in your self identity
speak, spoken confusion
because me
is your blood talking with mind
wrong if you think you are not mad
I´m your mad, your devil
inside you, King of the ancestors
First you are speaking with you.
The Castelian
Diablo dentro de mi cabeza
cantando mi carta de no-vida,
letras de mi casa por dentro
las llamas oscuras del suburbio ardiendo
sin sentimiento de camino desconocido
señales de la oscuridad conocen como mi ejército
diablo dios de mi yo,
Yo el dios oscuro
el final y comienza sabes mi nombre?
Seguro que no, bueno me gusta
sin nombre solo denominación
el sol y las llamas fluyen
en los ojos de los ojos
¿tú vives? ¿Estás seguro?
solo tu mente te miente
corazón rojo, sangre roja, fuego rojo
rosa roja, roja tu cruz
serpiente tu aliento te acuerdas
Tú sabes quién eres
la noche cae despierta
necesitando nueva
vida necesitando oscuridad
para sentirte vivo
realidad en direcciones equivocadas
expuesto con una sola finalidad
unifique, yo despierto
en este cuerpo tienes que levantarte
perder tu autocontrol
para exterminar tu dolor
y destruye todo lo que tienes
nada real tienes
amo a mi compañera
que el lado del otro lado fluye
la línea de tu lado tu soledad
mi amada victima del amor
tres deseos, uno: pídeme la vida,
entonces tengo tu alma
dos: ten tus legiones
tres: amor
tu condena
soy yo mismo en tu propia identidad
hablar, confusión hablada
porque yo
es tu sangre hablando con la mente
mal si crees que no estas enojado
Estoy loco, tu diablo
dentro de ti, Rey de los antepasados
Primero estás hablando contigo.
Lonely I was empty at this cold night
lost in the darknest black,
myself dark,
brighnest soul of my heart,
freece my arms,
I am lost in yourself pleasure,
bloody sence of your acomplished
freedom,
heal my half life died,
I am yours, my pain, my happiness
it is talking by,
your night,
my food,
food of your suffering control,
this empty void
my color,
my silence my sight,
your shine,
kiss fly, to endless sky of sweet torment,
my life around you, my blood,
oh my tenderness it is red.
the dark one red god,
oh glommy shadow,
end to begin,
and begin to die again,
nevermore said winter alwais,
the sun it is down again,
I can believe withought moon,
I say good bye to my wrong sence,
since I was come to live,
temperate my blood,
climbing and climbing
mountains, hight buildings
several likes of you, my dream,
my dought,
a kind of my happiness,
that it suffer to it`s happy be,
around and looking you more,
wake up, hight, hight to never ending story
to the point of no return,
my love,
my darknest flowere
of growing moon.
My all,
my hands of comrade pleasure,
my secret belongs.
Solo estaba vacío en esta noche fría
perdido en el negro más oscuro
yo mismo oscuro
alma más brillante de mi corazón
libera mis brazos
Estoy perdido en mi mismo placer
maldito sentido de tu logro
libertad
cura mi media vida murió
Soy tuyo, mi dolor, mi felicidad
él está hablando
tu noche
mi comida
alimento de tu sufrimiento control
este vacío vacío,
mi color
mi silencio mi vista
tu brillo
beso volar, al cielo infinito de dulce tormento,
mi vida a tu alrededor, mi sangre,
ay mi ternura es rojo
el oscuro dios rojo
oh sombra sombría
fin para comenzar
y empezar a morir de nuevo
Nunca más dije invierno siempre
el sol se ha puesto de nuevo
Puedo creer sin luna
Digo adiós a mi sentido equivocado
desde que vine a vivir
moderar mi sangre
escalada y escalada
montañas, edificios altos
varios likes de ti, mi sueño,
Estimado
una especie de mi felicidad
que sufre para ser feliz,
alrededor y mirándote más
despierta, alto, alto a la historia sin fin
hasta el punto de no retorno
mi amor
mi flor mas oscura
de luna creciente.
mi todo
mis manos de camarada placer
mi secreto pertenece
El castellano
En orden VI -Estudio
One voice in my voice,
along the mirror,
inside me her silence void,
another sence like yours
only hope, only terderness
my insanity go and go out
out of my night,
it is my knife,
it is that there is
there is nothing about my only hope
I am waiting for win,
to win a place insane in her eyes,
state of my mind climbing by,
oh my sin, my destiny about my life inside you,
your reflection, your refraction
of never ends,
all it is written by blood,
concord, armony fear self destroy himself,
pain it is not an option for me,
your love,
oh your window
Calíope my way of letter, letter C my cristal
of sorrows and beatifull lies of you,
history it is destroying all I have love before,
red, red my croix, red my rose, red my blood,
oh blood my blut oh VLAD
I am calling you,
sence of redemption I am yours listen to me,
out of your correct life,
feel my cold making something wrong for you,
so much wrong at time of my soul,
son of day, I will revenge,
all things make you sad,
there much words to you to said
something to forget my demon will arrive
and he will never die,
I am your protection,
lisen to your walk around my walk,
your heart around my love.
Oh Caliope Akritas Muse.
Una voz en mi voz,
a lo largo del espejo,
dentro de mí su silencio vacío,
otro sentido como el tuyo
solo esperanza, solo ternura
mi locura ve y sal
fuera de mi noche,
es mi cuchillo,
es que hay
no hay nada sobre mi única esperanza
estoy esperando ganar,
para ganar un lugar loco en sus ojos,
estado de mi mente escalando,
ay mi pecado, mi destino sobre mi vida dentro de ti,
tu reflejo, tu refracción
de nunca terminar,
todo está escrito con sangre,
concordia, armonia, el miedo se autodestruye,
el dolor no es una opción para mí,
tu amor,
ay tu ventana
Calíope mi camino de letra, letra C mi cristal
de penas y bellas mentiras tuyas,
la historia esta destruyendo todo lo que tengo de amor antes,
rojo, rojo mi cruz, rojo mi rosa, rojo mi sangre,
oh sangre mi blut oh VLAD
Te estoy llamando,
sentido de redención soy tuyo escúchame,
fuera de tu vida correcta,
siente mi frio haciéndote algo mal,
tanto mal en el tiempo de mi alma,
hijo del día, me vengaré,
todas las cosas te entristecen,
hay muchas palabras para ti que decir
algo para olvidar mi demonio llegará
y nunca morirá,
yo soy tu protección,
escuchar tu andar por mi andar,
tu corazón alrededor de mi amor.
Oh Caliope Akritas Musa.
VII
TREMULARY SILENCE
key passing by
we have seen the floor,
in the darknest way of no-life
red lips of the rose
i have seen grow.
oh dear, it is only my sence, cold
cold like ice, my soul
control passing aroud sunny delight,
whisper and whisper the blood,
my blood, my signal level
silence floating,
climbing across the ocean,
and your destiny it will bloom,
sparking control shiny
silence it is strong
all things along noice
are broken,
my emotions I want make decision full,
I never shout,
talk to me,
here comes to rainy day,
involve my seed,
talk to me then,
about flower was seed,
and the seed will be flower,
one step,
turn ago, ago
the sleepy born down it again,
red flower, blue choice,
even a park
even a stark,
you are afraid to trust,
you are alone,
saw me your fire,
FACTA NON VERBA
God facts are romance, reasons are lost.
Reset your mind next step.
Förüq
VII preludio:
Silencio trémulo;
llave pasando
hemos visto el suelo,
en el camino más oscuro de la no-vida
labios rojos de la rosa
he visto crecer.
oh cielos, es solo mi sentido, frío,
fría como el hielo, mi alma
control pasando alrededor de alegría soleada,
susurra y susurra la sangre,
mi sangre, mi nivel de señal
silencio flotando,
trepando por el océano,
y tu destino florecerá,
control de chispas brillante
el silencio es fuerte
todas las cosas a lo largo del ruido
están rotos,
mis emociones, quiero tomar decisiones completas,
nunca grito,
háblame,
aquí viene el día lluvioso,
envuelve mi semilla,
háblame entonces,
sobre flor era semilla,
y la semilla será flor,
Un paso,
gire hace, hace
el sueño nacido abajo de nuevo,
flor roja, elección azul,
incluso un parque
incluso un rígido,
tienes miedo de confiar,
usted está sola,
me vio tu fuego,
FACTA NON VERBA
Dios los hechos son romance, las razones se pierden.
Reinicie su mente el siguiente paso.
Förüq
VIII obertura:
I will take your soul apart
it's time to conservation
no feels
no voice only
this servant of darkness
moon spirit walking by
close your eyes it's my tense
nervous knife
runing and runing
in the night
blood your veins
eyes in surrender
generation blind.
Feel darkness my bloody vampire
at this night that involve all know sence,
afraid it is cold and far away
your mirror, your street,
all ligths of the city it will turning off,
brightness of love
surrounds every thing,
all the power of the past,
involves your freedom,
involves my blood,
destiny it will arrive tonight,
mi soul my arms;
your violet lips,
the rose,
the night rose of the moon,
oh Scarlet be my pain,
be my secret life of no-life;
my feelings of you does not stop,
years of years
I can not have a solution
of my desire, I want you day by day,
the mirror can not be broken,
my soul inside me,
it is singing a loud force of silence,
you are waiting my silence,
sorry me my love,
I can not die withought you,
all the words are along in my hands
only screaming I need you in my own,
my patch to underworld,
my key,
my only voice of hope
love you more and more
while can it can not to be can.
Auge at this forgotten realm.
Förüq white raven
TRADUCCIÓN:
Desarmaré tu alma
es tiempo de conservación
sin sentimientos
solo sin voz
este sirviente de la oscuridad
espíritu de la luna caminando
cierra los ojos es mi tiempo
cuchillo nervioso
corriendo y corriendo
en la noche
sangre tus venas
ojos en rendición
generación ciega.
Siente la oscuridad mi maldito vampiro
en esta noche que involucra a todos los sentidos,
temo que haga frío y esté lejos
tu espejo, tu calle,
todas las luces de la ciudad se apagarán,
brillo del amor
rodea cada cosa,
todo el poder del pasado,
implica tu libertad,
involucra mi sangre,
el destino llegará esta noche,
mi alma mis brazos;
tus labios violetas,
la Rosa,
la rosa nocturna de la luna,
oh escarlata sea mi dolor,
sé mi vida secreta de no-vida;
mi sentir por ti no cesa,
años de años
no puedo tener una solución
de mi deseo, te quiero día a día,
el espejo no se puede romper,
mi alma dentro de mí,
está cantando una fuerte fuerza de silencio,
estas esperando mi silencio,
perdóname mi amor,
no puedo morir sin ti,
todas las palabras están en mis manos
solo gritando te necesito en lo mío,
mi parche al inframundo,
mi llave,
mi única voz de esperanza
te amo más y más
mientras puede no puede, ser puede.
Auge en este reino olvidado.
Förüq cuervo blanco
IX ORATORIO:
My sins, your sins,
only my life screams, tonight,
soul, freedom redemption,
black spirit,
heritage my color,
furor, yor eyes,
my point of view,
never ending tales,
darknest heart, one of my never more sad.
Climbs and surround your self,
all of this life open your hand
one flower there will be for you,
only you will need two hands,
Me the white raven,
solar vampire
of your knek, my queen of condenation,
spread, ride whith me my darling
my body hunter,
all my destiny it is at your signal,
temperate my love
you my blue rose,
my fever, my love,
starling this galaxy,
red it is sacred,
the first demon non consumated,
the first God that have blood.
Yes I am,
Oh panida woman,
Pan it is my surrounding poetry name,
be a kiss,
be a tenderness withought name,
my no-star, my unknown pleasure
turned Rocío Salazar Torres,
I need life, I need your breath,
only forever be the same,
be my love my faery Woman,
Leannán-Sídhe, Lhiannan Shee,
Förüq, it is sincerely yours,
your Silent mercenary.
Förüq
IX Oratorio Traducción:
Mis pecados, tus pecados,
sólo mi vida grita, esta noche,
alma, libertad redención,
espíritu negro,
herencia mi color,
Furor, tus ojos,
mi punto de vista,
cuentos interminables,
corazón más oscuro, uno de mis nunca más triste.
Trepa y rodéate,
toda esta vida abre tu mano
una flor habrá para ti,
solo necesitarás dos manos,
Yo el cuervo blanco,
vampiro solar
de tu rodilla, mi reina de la condenación,
esparce, cabalga conmigo mi amor
mi cazadora de cuerpos,
todo mi destino está a tu señal,
templado mi amor
tú mi rosa azul,
mi fiebre, mi amor,
estornino de esta galaxia,
rojo es sagrado,
el primer demonio no consumido,
el primer Dios que tiene sangre.
Sí, lo soy,
Ay mujer panida,
Pan es mi nombre de poesía circundante,
ser un beso,
ser una ternura sin nombre,
mi no-estrella, mi placer desconocido
convirtió Rocío Salazar Torres,
necesito la vida, necesito tu aliento,
sólo para siempre ser el mismo,
sé mi amor mi hada Mujer,
Leannán Sídhe, Lhiannan Shee,
Förüq, es sinceramente suyo,
tu mercenario silencioso.
Förüq
X Movimiento
This reason I can´t deniege
I am a time, dead warrior,
dream my lady acomplished blood,
there will be
an reasoned way,
above rainbow,
and black soul of your spirit,
walk and neverending wind
about your knive,
about your kneck,
freedom it is dead,
my blood always live in vein,
Love you one more time,
kiss you and floating by
sence my pleasure
it is running behind your arms,
guilty sorrow,
cold as ice in my brain,
green Spirit,
out of my point,
sising blue,
all it is climbing above black,
stairs to hell,
come my love,
my soul is burning,
my life screaming obout you,
love, red your rose,
red your lips,
starting again,
let me climb to the skyes,
down the moon and stars to you,
cause to remind me your pleasure,
just to sing to you one more time,
remember your choice
sweet yourself my damned
queen of darkness,
my redemption it is at fire,
my soul, oh my soul,
it haven`t name,
god of devil,
a reason to survive
inside yourself.
X Movimiento (Traducción)
Esta razón no puedo negar
Soy un tiempo, guerrero muerto,
sueño mi señora sangre cumplida,
Habrá
una manera razonada,
por encima del arcoiris,
y alma negra de tu espíritu,
caminar y viento interminable
sobre tu cuchillo,
sobre tu rodilla,
la libertad está muerta,
mi sangre siempre vive en vena,
Te amo una vez más,
besarte y flotar
desde mi placer
corre detrás de tus brazos,
pena culpable,
frío como el hielo en mi cerebro,
espíritu verde,
fuera de mi punto,
tamaño azul,
todo es trepar por encima de lo negro,
escaleras al infierno,
ven mi amor,
mi alma está ardiendo,
mi vida gritando por ti,
amor, roja tu rosa,
enrojece tus labios,
empezando de nuevo,
déjame subir a los cielos,
bajar la luna y las estrellas a ti,
causa para recordarme tu placer,
solo para cantarte una vez mas,
recuerda tu elección
dulce tú misma mi maldita
reina de la oscuridad,
mi redención está en llamas,
alma mía, ay alma mía,
no tiene nombre,
dios del diablo,
una razón para sobrevivir
dentro de ti mismo
Förüq
As a fall into deep,
demons, vampires, seeds
sons,
sins of my blue,
beginig of the past
no peace, no war,
can you light,
can you climb the darknesst soul,
second lost
my mind, my soul,
spirit walks
higher, more higher
like blood, colors,
my notes all about your life,
oh, my wonder burn mineral,
you hear the clouds
tue warrior of the night,
the hope in a harvest earth,
can you see the lost child,
the earth warriors,
fire the sun,
all my thoughts of light,
your eyes
dance your silence
blind silence
keep me the heart,
keep me the pain,
suffer myself I am yours,
my love my tenderness
my blood turned into a woman
by your name,
colour of dry line,
sence behind all bloody eyes,
all my blue,
índigo code,
nature my godness
all my life I dream of you
and fight
fight apointmen it is my heart
green heart
cypress heart,
my love
my endless way
my power
my storm,
all I Want, all I give by yourself.
TRADUCCIÓN OBERTURA REDEMPTION
Como una caída en lo profundo,
demonios, vampiros, semillas
hijos,
pecados de mi azul,
principio del pasado
no hay paz, no hay guerra,
puedes iluminar,
puedes escalar la oscuridad del alma,
segundo perdido
mi mente, mi alma,
espíritu camina
más alto, más alto
como sangre, colores,
mis notas todo sobre tu vida,
oh, mi maravilla arde mineral,
oyes las nubes
tu guerrero de la noche,
la esperanza en una tierra de cosecha,
puedes ver al niño perdido,
los guerreros de la tierra,
fuego el sol,
todos mis pensamientos de luz,
tus ojos
bailan tu silencio
silencio ciego
guárdame el corazón,
guárdame el dolor,
sufriendo yo mismo soy tuyo,
mi amor mi ternura
mi sangre convertida en mujer
por tu nombre,
color de línea seca,
sentido detrás de todos los ojos ensangrentados,
todo mi azul,
código índigo,
naturaleza mi divinidad
toda mi vida sueño contigo
y lucho
lucho apointmen es mi corazón
corazón verde
corazón de ciprés,
mi amor
mi camino sin fin
mi poder
mi tormenta,
todo lo que quiero, todo lo doy por ti mismo.
Förüq y Leannán -Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
PIEDRA DE LUZ :
I
Derecho firmamento cristalino
entre filos férreos,
es una piedra que camina,
piedra aventurera,
seca y umbría,
reposa y duerme
cantares del linde,
centellea rayos irisados
se riza con los besos de lluvia,
acaso quiso ser otra,
ella tan yerma, tan plácida,
imperecedera,
cerrada como se cierran
los rayos de luna,
acantonada, de estéril estampa,
dejas muda alabanza,
el día que te hice de voz,
piedra bella, sola,
estridente sin patio de sonido,
y esta voz que te di
voz dorada como tu piel de minera,
como un soto sin perdices,
avanzabas solo tú,
la vida quieta,
sembrándote allí por donde anduvieras,
al candor de piedra única
igual a la siguiente y a la anterior,
sin afán superior
hasta que este poeta te dio voz,
como flores que sin color
acaso fuesen,
un despertar en brazos de cieno,
un respirar de la montaña,
un cuchillo calizo que afilan
erosiones de las eras,
latido férreo, sangre de mineral,
o compostura de arenas,
piedra de mi casa,
piedra de tu casa,
la tierra.
II
Piedra potencia eterna,
nacida como nace una estrella,
cumbre de filos por bandera,
hogar, cobijo y morada
de lagartijas que cuelgan tus venas,
colchón de rayos de sol,
asolada tu espera
por quien te dio voz,
lideras tu guerra sin cuartel,
antes de yo nacer,
tú dabas alientos al suelo
sin importar pertenecer,
siempre fuiste
siempre eras su piel,
de la cantera, al nicho,
del mausoleo, al caserón viejo,
del silo al castillo,
tu fortaleza empedernida,
tu aval de honda certera,
Siempre estabas
siempre estuviste,
como río a su voz del mar,
osado no fui yo
quien te encontró,
solo fui encargado
de darte moción verdadera
ojalá pudieses contestarme
mi piedrita bella.
III
Devuélveme a tu vida eterna,
del soto a tu quimera verdadera,
clávame la oscuridad de tu cueva,
en esta esfera pulida sin espera,
risco de tu sien enarbolada,
millones de hijos
esencia desnuda de tu alma pura,
techo sin compostura
del ser invertebrado,
techumbre que pizarra llora,
su azabache de cristal,
tu sangre de fuego y agua
que nunca te alcanza
sólo partirte puede,
grieta de helada, tus filamentos
que encaran tu azar de vida sin dueño
a tu sangre de musgo me cuelgo,
en verde musgo tu fantasma muerdo,
vida de herramienta,
azar de la idea,
al paraje que te conforma
al que sostienes su vida
siendo el suelo techo de esta hacienda,
si tuvieses dolores todos gritarían
que se acabase la muerte en la tierra.
El Castellano
FINAL
Miguel Esteban Martínez García
Pseudónimo: El castellano
Índice
Contenido
Alma sin cuerpo, flagrante invierno: 2
Espiga roja sangrante:
Dos sombras 6
Eco de ayer vestido: 9
Plubia cordis: 10
Invernando: 11
PANIDA DEL AZUR: 12
Callar del ascua: 13
Albo espíritu azogado: 16
Amante fantasma: 17
II 19
III 20
Yo reposo despierto: 22
II 23
III 24
Förüq breve recopilación, 25
II 27
III 30
IV 32
V 33
VI 34
VII 35
VIII 36
Desde que vine a vivir: 37
Imperios de ojos cerrados: 38
Siembra del pensamiento: 40
Desde que vine a vivir: 41
Guardería de estrellas: 43
Acuchillada osadía: 45
Luna trece: 46
Libreta: 49
Ocaso florecido: 53
Relato Sangre yerta: 55
FINAL 80
Surco de alma: 93
Carcoma del sentido: 96
Sidra de boca: 97
Luna de lobo: 98
Criaturas en el alba: 100
Raíz de albor: 102
Frontera de la letra: 103
Corazón de agua: 106
Son de mí: 107
20 septiembre 2011 114
Ruido en el silencio: 115
II 117
Ruido de nirvana: 119
Redención sagrada: 121
Palabra sin boca: 124
Cepas de un día: 126
Espiga de agua: 127
II Hoja: 128
AZUR DESNACIENDO: 129
II 130
III 130
IV 132
V 132
VI 133
VII 134
VIII 135
IX 135
IRIS EN OJO DE SANGRE: 136
Vena del cielo: 137
MARGEN BRUTO: 141
DENSO HALO NOCTURNAL: 143
II cuartilla 143
III cuartilla: 144
TU AGUA CIEGA (SANGRE) 146
MEMORIAL VETUSTO: 148
II cuartilla 148
III cuartilla 149
CORNUCOPIA DE ESPEJOS SEVEROS: 149
SOPLO DE CONJURO: 150
II cuartilla 151
III cuartilla 151
LUGH CABALLO SOLAR: 152
SINS OF MY SILENCE, PECADOS DE MI SILENCIO
PIEDRA DE LUZ
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