Cavo la profundidad enigmática, tu verbo que me florece como ababoles sanguinosos todo junio, entre el claro oscuro matinal, y vidrios de cielo cual cristales azules, una revolución me cursa el auge; dentro del sueño flamígero, miro y avanzo, mantengo atento y en fase armada, por ti, por mí, por este rifle, amada poesía de silencio vertical azur. sombras madre me acojen, voy en travesía mi corazón brotó, mi alma reverdece, hoy fue el día incontable, miré través su densa tiniebla, entre opacidad y muros de comensales ideas, mi soledad zarpaba un eje doliente, una ruta desapagada, miré lo que solo se puede sentir, revoló un cuervo azabache cerca mi dama graja, vi la sombra densa una desolación, un impedimento pesado, como Mundo a espaldas del titán Atlas, miré dentro de la oscuridad para poder ver la luz, desveló que vivo por suplicio despierto, infausto, escritor poeta pintor del infrasentido arte de adorarte lo que habita a espaldas lo visible, a mi diestra sangre y corazón...